DURMIENDO CON SUS ENEMIGOS . Desde la muerte de Néstor Kirchner, Guillermo Moreno se convirtió en el funcionario más importante del gobierno de Cristina. En una gestión en la que no se podía discutir absolutamente nada, el supersecretario de Comercio ofrecía soluciones rápidas cuya característica era la efectividad de corto plazo. Alineaba a los empresarios a los gritos; reducía la inflación alterando las estadísticas; cerraba el grifo de las importaciones y de la venta de dólares para frenar la caída de las reservas y armaba viajes a Angola o Vietnam para compensar la desaparición de las inversiones extranjeras. Siempre fue leal, cultivó la estética nacanpop afín a cierto kirchnerismo y, hasta ahora, nunca se le han probado hechos de corrupción. Pero el procesamiento que ayer le dictó el juez Claudio Bonadío en una causa por la pelea que Moreno tiene contra las consultoras privadas que miden la inflación conmovió al kirchnerismo. Les dejó en claro que algo se ha roto en el peronismo, algunos de cuyos sectores quieren ver al funcionario fuera del Gobierno después del 27 de octubre. Además de Sergio Massa, la novedad es que el gobernador Daniel Scioli y varios intendentes kirchneristas se anotan ya en la ofensiva contra el hombre al que la Presidenta siempre ha defendido hasta la última instancia.
Posted on: Wed, 18 Sep 2013 22:28:59 +0000
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