EL CUENTO DE LA SEMANA, DISFUTENLO... MIS ALAS. En un sueño muy lejano, un pequeño niño lleno de esperanzas quería aprender a volar, sin importarle el precio a pagar. A veces imaginaba que de su espalda emergían alas doradas con las cuales recorrería el mundo entero, o que quizá se volvería tan ligero, que los aires se lo llevarían en un viaje sin fin hasta lo mas lejano del universo; pero ni aun cuando lo soñaba con fuerzas, ni las alas, ni su ligereza venían. Así que un buen, o mal día, se canso de esperar y entonces decidió buscar la manera para emprender el vuelo. Lo primero que hizo, fue ir y ver al hombre mas viejo y sabio de su comunidad; para preguntar, qué era lo que tenia que hacer para aprender a volar; a lo que el hombre contesto: “si has de aprender a volar, primero tendrás que tirar todo lo que te sobre, aquello que ya no te sirva, además de todo lo que te cause dolor; si un ave tiene dolor, prefiere no emprender el vuelo”, el niño se dio media vuelta y regreso a su casa mas confundido de lo que había salido. Lo único que tenia que hacer era deshacerse de lo que ya no necesitara, pero, ¿qué tan difícil iba a ser desprenderse de eso?, o aun mas complicado, ¿qué era lo que ya no le serbia? Entonces busco a su madre, se sentó junto a ella y le pregunto “¿Mamá como puedo saber cuando algo ya no me sirve?” la madre le miro de manera extraña, se levanto y camino hacia el pequeño mueble de la sala, abrió las puertitas y de dentro saco una balanza de oro; le miro a su hijo y contesto “amor lo único que tienes que hacer es utilizar una balanza, y de un lado, pondrás todo lo que te haga feliz, y del otro, todo aquello que te lastime; lo que menos pese, será lo que te has de quedar, y lo que este del lado que mas allá pesado deberás tirarlo”, el niño emocionado de saber que es lo que tenia que hacer, regreso a su habitación, y tal cual le dijo su madre, puso de un lado todo lo que le causaba dolor, y del otro todo aquello que le hacia feliz, cuando termino se dio cuenta de que solo había una cosa que le hacia feliz y muchas mas que lo hacían triste, pero lo mas curioso era que una de esas cosas que lo hacían infeliz, era la razón desesperada de querer volar, entonces se dio cuenta que su lugar era ahí, y que lo grande lo haría en su tierra, con aquellos que lo aman. JCN
Posted on: Mon, 22 Jul 2013 00:46:03 +0000
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