Hoy cumple años un amigo. Podría meter mucha paja y muchas - TopicsExpress



          

Hoy cumple años un amigo. Podría meter mucha paja y muchas palabras bonitas, que sin duda el susodicho las merece sin duda. Pero todas ellas conducen a amigo. Y eso es lo que es. Es una persona que en las buenas, en las malas, en las regulares e incluso en las que no tienen nombre, va a estar ahí para echarte una mano, dos o incluso 9 si realmente las necesitas. Llevo dándole la tabarra desde que éramos chiquitines, unos mocosillos que se juntaron en su día y aunque estén más cerca o más lejos, no se separan de corazón, que es lo importante. Aún me acuerdo de que ya con 4 añitos tenía sus ricitos ya asomando. No olvido jugar con él en el patio del colegio, haciendo carreteras y rotondas con arena y poniendo a circular cochecitos por ellos. Tampoco faltaba alguna patada a actimeles, papeles albales o envoltorios varios. Pasaron los años y los hábitos también lo hicieron. Nunca dejaré de agradecer que gracias a nuestros apellidos haya tenido a este muchacho delante de mi pupitre tantos años, llenos de preguntas de dudas de clase, chistes absurdos, adivinanzas o simplemente conversación sobre lo que llovió el día anterior. Muchas son las aficiones en común, casi tantas como las tardes de llamadas mutuas preguntando dudas sobre los deberes o haciendo planes para el viernes. Sin su ayuda en las matemáticas o en la tecnología las hubiera pasado más que canutas, aunque en mi defensa diré que en temas de inglés yo siempre estaba ahí para echar un cable. El campamento en Asturias, las visitas a Calpe y a Somo, las múltiples tardes en su casa jugando (y perdiendo con estrépito) al Scalextric. En alguna ocasión me llevaba la revancha con el Monopoly, también hay que decirlo. Los años poco a poco pasaron y yo crecí al igual que su rasta hacía la propio. Como se iba viendo desde que éramos micos, él tiró hacia la rama tecnológica y yo me refugié en mis queridas letras. Era de esperar, la verdad. Aunque ya no nos teníamos en clase para hacer más llevaderas, e incluso divertidas, las seis horas en ese aula, los recreos servían para seguir charlando de mil y un temas. Ha llegado la universidad y se ha consolidado lo que ya íbamos viendo: la ingeniería y el periodismo se pusieron en nuestro camino. Por eso nos vemos con menos frecuencia, aunque no cambie el sentimientos cuando coincidimos por ahí. Yo me llevo un alegrón tremendo, sonrío como cuando teníamos 8 años y recuerdo los miles de momentos felices que he pasado gracias a este mozo. Entre esto y aquello nos vamos viendo menos, también hablamos menos. Lo cierto es que es difícil rememorar esas conversaciones de una hora larga charlando de todo un poco. Pase lo que pase, siempre será un amigo para mí y tendrá un reservado VIP en mi memoria y en mis recuerdos. Me voy a poner ñoño, también en mi corazoncito. Un mes después que yo nacía el gran Jose Pelos Martínez. Hoy cumple 20 años y cuando le vea le voy a dar un abrazo de los grandes porque lo merece. Porque dudo que hoy fuera como soy sin haberlo conocido. Porque es mi amigo. Muchas felicidades, amigo.
Posted on: Sat, 19 Oct 2013 09:51:59 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015