La Dificultad de reconocer la Verdadera Humildad As Salamu Alaykum Bismillahi ar-Rahmani ar-Rahim. Ramadán Mubarakah Bismillahi ar-Rahmani ar-Rahim. Uno del os atributos más importantes que hay para buscar, y digo buscar porque mucha gente lo posee pero a mucha más gente le falta, que es la humildad. La humildad es un punto muy importante, y últimamente he encontrar y he estado reflexionando sobre esto por mucho tiempo, y ahora aparece el Sohbat… humildad es lo contrario de soberbia. Soberbia es considerarse por encima de los demás. Sin embargo, por el contrario, mucha gente dice que es humilde porque dice porque se considera igual a los demás. Y eso es una soberbia encubierta muy peligrosa. Porque humildad es el pináculo del servicio, es estar por debajo de todo el mundo y servirlo. La igualdad, en el plano social, es un invento del mundo moderno, que nace de estos escapados del “mental house” de Marx y compañía, que pretendían que fuéramos iguales. ¿Iguales a quién? ¿A quién quieren ser iguales? ¿Quieren ser iguales a Bill Gates, a George Clouney, o al muchachito de África con la panza hinchada y lleno de moscas? ¿Iguales a quien? Hay un acto encubierto de soberbia tremenda en esto de la igualdad. Mucha gente cuando entra al camino espiritual, por ejemplo, su mujer, o entra la mujer y no su esposo, o entra un hermano y el otro hermano no, toman esta posición de soberbia muy fuerte. Es muy común en los caminos espirituales o en estos caminos de salvación del mundo de la ecología, de la sociología, y de lo que sea. Porque parece que ser diferentes a los demás nos hace estar en una posición de relevancia. Y muchas veces es totalmente encubierta. No es una soberbia dirigida a “Vení, estate por debajo de mí”, sino que: “Como yo puedo ver esto de la salvación del mundo, de la salvación espiritual, de la ecología y del medio ambiente y vos no, vení que te voy a enseñar. Te voy a dar mi tiempo para enseñarte un poquito a vos”. Ser humilde es considerarse por debajo de todo el mundo y al servicio de todo el mundo. Si podemos aspirar a esa humildad, alhamdulillah. Si no, saquémonos de la cabeza que somos humildes. Porque esa es la humildad. Ser humildes es estar por debajo de los demás, todos son superiores a notros y los servimos a todos. Por eso, nuestro Sheikh, mashallah, subhanallah, buena salud para él y la concesión de sus du’as Inshallah, tiene el rasgo de la humildad tan notable. Porque para él hay una sola palabra que cabe y es servicio. Nos ha servido a todos nosotros durante años, a algunos más y a otros menos. Pensando nada más que en servirnos. Nunca pensando en nada, en sacarnos una tajada, obtener algún beneficio, en pedirnos algo a cambio, nada, servirnos, servirnos y servirnos. Servirnos para que mejoremos, servirnos para que crezcamos, servirnos para que seamos más útiles como padres, como hermanos, como amigos, como hijos, servirnos para que crezcamos económicamente, servirnos, servirnos,servirnos. Por eso, para mí es el paradigma del servicio. Debemos buscar la humildad, y la humildad debemos buscarla en casa. El primer servicio que debemos tratar de hacer es con nuestra familia. Porque allí es donde tenemos más posibilidad de trabajar, salvo que seamos como Osman (hermano presenta en la reunión) y trabajemos 20 horas por día, todos los demás estamos mucho tiempo en casa. Entonces el servicio en casa, es la clave. Y ahí cuesta mucho. Por los egos hogareños. “Yo soy el padre y pongo la plata” – “yo soy la madre y trabajo todo el día” – “yo soy el hijo mayor” – “yo soy la más bonita”. Servicio, por debajo de todos los demás. Agarran la escoba y barran, y que los vean. La humildad hay que empezar a trabajarla en casa, y luego en el círculo inmediato. Y otra cosa que pueden hacer, dentro de las técnicas enseñadas por nuestro Maestro Mawlana Sheikh Nazim al Haqqani, para el cual pedimos la concesión de sus du’as y la devolución de sus piernas Inshallah, si nos cuesta mucho es irnos a lugares alejados para hacer servicio. Es lo que hace mucha gente en esta cosa moderna. Los cristianos tienen grupos de esto. Se van veinte días a trabajar a algún lado, y después vuelven y siguen siendo los mismos de siempre. Mawlana ha dicho que podemos ir a esos lugares para practicar el servicio, bien de abajo. Pero cuando volvemos debemos tratar de aprovechar esa energía y no simplemente sacarnos el traje de la humildad. Porque cuesta mucho ser humildes y servir a los demás. Siempre estamos pendientes de ser nosotros los servidos. El Santo Profeta Muhammad, la paz sea con él, nos pedía que hiciéramos servicio siempre. Por ejemplo, ¿Cuántos de nosotros nos detenemos a liberar un camino? Y hablo de cualquier camino. Aquí en la cordillera, es muy común que haya ramas en los caminos transitables a pie. En los caminos de ruta, piedras. Yo siempre que veo una piedra me acuerdo de este hadiz de retirar la piedra por el que viene atrás, y siempre encuentro el motivo para no detenerme. “Es peligroso, es una curva, estoy apurado, está lloviendo, bla bla” y sigo. Al menos recuerdo el hadiz, algún día voy a detenerme. Pero el servicio al que no conocemos, al que viene atrás… ¿quién es el que viene atrás? Nuestro tío, nuestro hermano, nuestro vecino, nuestro enemigo. Servicio neutro, alhamdulillah. Trabajen sobre la humildad sobre todos los aspectos recordando esto, no partan de la igualdad porque la igualdad es soberbia. Primero que no somos iguales a nadie. Somos una creación única. Nuestra igualdad está en la religión, en la hermandad religiosa. Pero no en lo que viene después. Nuestra igualdad se ve en el Hajj, donde uno puede estar parado envuelto en una toalla, sin ninguna joya que lo delate, sin nada, pelado. Y de repente está parado al lado de uno de los hombres más ricos del mundo que está exactamente igual que uno. Y nos vamos a prosternar en los mismos lugares, vamos a ir a los mismos lugares. Pero cuando salimos, y él va al hotel cinco estrellas que cuesta treinta mil dólares por día y uno va caminando 18 cuadras o diez kilómetros donde uno está parando, entonces la igualdad se acabó. Entonces trabajen en la humildad por debajo, es la única forma de trabajar. Bien por debajo, cuánto más por debajo vayan más beneficiados van a ser. Y es importante para la gente que empieza el camino espiritual, con sus padres, con su esposa, con sus hijos, con sus hermanos, con sus amigos, con sus vecinos, no adquirir el grado de soberbia de “yo pude ver esto y vos no”, porque es terrible la cantidad de problemas que trae en los matrimonios sobre todo. Siempre pónganse por debajo. El primer punto que debe trabajar alguien que ingresa a un camino espiritual es la humildad. Porque muy fácilmente, como se abren flashes de conocimiento, como la barakah que cae lo hace sentir fuerte, poderoso y distinto, muy fácilmente se cae en un pecado de soberbia gravísimo y se lastima gente que lo que queremos es que entre con nosotros y no que se lastimen. Pónganse al servicio por debajo, y eso llama la atención de todo el mundo, y todo el mundo quiere saber por qué.
Posted on: Wed, 24 Jul 2013 02:25:38 +0000
Trending Topics
Recently Viewed Topics
© 2015