POR QUE ESTA VIVO USTED Muy interesante esta pregunta, y lo más seguro es que usted nunca se la ha auto formulado. Realmente ¿qué hace Ud. aquí, de donde viene y hacia dónde va? Le voy a decir algo que espero no lo ofenda. Usted vino aquí por un propósito de Dios. Dios tiene un programa contigo desde antes de la fundación de los siglos, y no descansará hasta que lo lleve a cabo, a no ser que usted no lo entienda, o no se deje dirigir por él. Hace unos días, escuché a un predicador desubicado que vociferaba diciendo: Que bueno que estuviera con nosotros el profeta Elías, para que hiciera los milagros que se hicieron en su tiempo. Pregunto: ¿Sera difícil para Dios resucitar a Elías? Sencillamente no. Pero el tiempo de Elías ya pasó, lo que Dios quiso hacer por medio del profeta ya lo hizo. Entonces! Dios no va a resucitar a Elías, para eso lo resucitó a usted. Dios no trabaja solo. Por eso lo llamó a usted. Ahora ya no es el tiempo de los profetas, no y mil veces no. Ahora es el tiempo, la oportunidad suya, ahora Dios quiere usarlo a usted, sea mujer o sea hombre, lo que Dios necesita, es que usted se coloque en las manos de mi Dios de una manera especial. Regresemos a la pregunta inicial: ¿Por qué está vivo usted hoy? Hay dos respuestas: La primera es; Porque con amor eterno te he amado, por tanto te prolongué mi misericordia. Si usted y yo estamos vivos, es por su bendita y santa misericordia, no es por más. Yo sé que en su familia murieron algunas personas, pero usted sigue vivo. Esa bala perdida que les arrancó la vida a otros, no lo alcanzó a usted. Esa enfermedad que se llevó a otros a la tumba, a usted lo respetó. Ese accidente que destrozó a otros, a usted no lo mato. ¿Por qué? He aquí la segunda respuesta: Porque Dios te necesita, Él cuenta contigo, quiere ayudarte, quiere usarte de una manera especial. Si logras entender este sencillo mensaje, ponte en seguida en las manos de Dios. Si no lo entendiste, o no lo quieres creer, no te preocupes, El sabio Dios, llamará a otros, mejores que tú. Yo estuve tres veces en las manos de la muerte. En la última, mi madre llegó vestida de luto. Los médicos no dieron más esperanzas. Pero el que quita la vida y la da; me restauró para que lo sirviera. Y lleno de gratitud le sirvo desde hace cuarenta años. Los mejores cuarenta años de mi vida, los he vivido en Cristo, no cambio esto por nada con su ayuda y su gracia. Dios te de entendimiento en todo para que entiendas esto. Dios necesita hoy, hombres y mujeres de valor. El que no vive para servir, no sirve para vivir.
Posted on: Mon, 25 Nov 2013 00:39:39 +0000
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