A raíz del mal entendido que se dio entre dos bailarines en relación con uno de los salones de la Compañia Nacional de Danza, me interesa expresar el malestar y la cólera que me causó la mala decisión que tomaron algunos funcionarios de Cultura de convertir a uno de los salones de ensayos de la CND en bodega, la que lleva el nombre de Mireya Barboza en honor a la pionera de la danza moderna en Costa Rica. Es lamentable ver este salon, equipado con piso de madera y espejos, lleno de estanterías con llantas de carro (entre otras cosas) que desde el primer día quebraron las ventanas del salón y que todavía hoy permanecen tapadas con cartón. Este salón desde hace ya rato junto con el otro bautizado con el nombre de Marco Lemaire, otro excelente bailarín de grata memoria, eran prestados por la dirección de la CND para que grupos independientes a partir de las 3 pm los utilicen para sus clases, ensayos, proyectos. Ahora el medio independiente cuenta con un solo salón para este menester. Considero que hemos sido indolentes todos los bailarines ante este hecho, la política debe ser abrir más espacios y no cerrar un espacio a cambio de otro. Es importante tomar acción en lo que nos afecta, no debemos permitir este tipo de acciones, malas decisiones que se traen al traste esfuerzos de años. Abramos la discusión, crezcamos como ciudadanos, no seamos indiferentes...
Posted on: Sun, 29 Sep 2013 13:59:19 +0000
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