Algo duro está pasando en las alturas del poder, aunque el tema - TopicsExpress



          

Algo duro está pasando en las alturas del poder, aunque el tema solo alcance para especulaciones sin mucha base, pero que como opinión al fin y al cabo, vale. Lo primero que llama la atención es la semana de los militares que está a punto de terminar. Todos los días, salvo el del gripón, estuvo Maduro rodeado de militares. De la Guardia, de la Armada, del Ejército, de la Milicia, de la Aviación. Ni Chávez, aunque el difunto en sí mismo era militar, lo hacía de esa manera. Rumores de todo tipo se escucharon la semana previa a esta jornada castrense que ha visto todo el país a través de los canales propiedad del gobierno. Que si está a apunto de caer la mafia de las drogas, que los carteles del narcotráfico están apretando para que el gobierno frene a Estados Unidos y los aleje de aquí, que se cansaron los militares de tener la bota cubana como almohada, que el desorden con las divisas y la economía puso en alerta a los militares que todavía quieren algo al país. De todo se ha escuchado desde que Maduro suspendió el viaje a Nueva York, de regreso del fracaso en la operación mendigos socialistas que se tiraron hasta la Gran Muralla, y que también significó dejar atrás el plan de ir a visitar a varios dictadores amigos en el Medio Oriente y por esos lados. Hoy mismo anda por Campo Carabobo no importa en qué o para qué. Es lo mismo. Militares diciéndole comandante en jefe a grito pelado y Maduro disfrazado de cualquier cosa, militares jalando mecate de la manera más grotesca y Maduro exhibiendo la semana del reforzamiento de la autoridad, bastante magullada a punta de disparates. Muy mal se observa todo y es lo que debería preocupar al país. No los rumores, que como decimos, cada uno es más loco que el otro. Dicen incluso que la conspiración arranca desde la costa, desde la playa y se mete hasta el último rincón del llano. De hecho algunos afirman que el aumentico de 90% de salario que les hizo Maduro a los militares sin tener que ir a huelga o poner un cartel de protesta, tiene qué ver con esto. También afirman que los últimos carros que regaló a los oficiales tiene más de bozal de arepa que de mejoramiento del bienestar particular. Curiosa forma de imponer el socialismo. Con billete y con carros. Pero hay asuntos más delicados y serios que efectivamente no son rumores. El país está corrompido de punta a punta. No hay un capo o dos capos, dicen los expertos. Es una mafia total y horizontal. A partir de ese desmadre viene todo lo demás: drogas, secuestros, asesinatos. No hay conciencia del orden ni respeto a las leyes. Anomia total. Y a las puertas de un desastre económico que se palpa a diario, pero que apenas asoma la nariz. Esa es la verdadera conspiración. La llamada guerra económica que Maduro insiste en mantener en la leyenda urbana, mientras expulsa a los funcionarios del imperio, el mismo imperio que sirve de refugio a los malandros chavistas y maduristas que se van escapando con sus robos a cuestas para entregarse a la DEA y soltar la lengua para salvar cobardemente lo que puedan. Eso no es un rumor. Cuando Estados Unidos decida hacer pública las andanzas de la súper mafia que gobierna a Venezuela, a partir de los cuentos de los propios delincuentes que se han escapado hasta allá, es mejor para la banda estar peleados con el imperio. Así será más fácil decir que es mentira y que se trata de una conspiración que persigue sacarlo del poder. Rumores y verdades juntos se convierten en una merengada muy peligrosa. No solo para la banda sino para todo el país. Por lo pronto anda arropado con la cobija de los militares. Veremos, pues.
Posted on: Mon, 07 Oct 2013 10:44:41 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015