C O N C I E R T O Disfruté extasiado de un dorado atardecer de increíbles arreboles y contrastes. Con predominio de un rojizo anaranjado, con el fondo de un cielo azul fascinante y un blanco elegante con tintes de nacarado. Culminando tal belleza con un magistral concierto de luz y sombras que me dejó… Embelesado. Y profundamente arrobado, se me pasaron las horas contemplando tal belleza en grado sumo exaltado. Fue entonces que se elevó mi alma y se transportó al infinito y me olvide por un momento de mis quejas y flaquezas y de que soy un mortal… Torpe, frágil y finito. Y ante tanta maravilla volé con la imaginación para liberarme otro poquito, me traslade en una nube por la extensión de la anchura, contemplé la profundidad, volé por las alturas, aprecié la bastedad, respiré la inmensidad, toqué el cielo y me sentí. Así… Muy chiquito. Testigo fui de tal portento de poesía y de esa alegre algarabía que la naturaleza a diario tributa agradecida al soberano creador. Y en ese sublime momento extasiado y muy contento me integré a ese concierto, y elevé del fondo de mi corazón al eterno Dios… Una oración
Posted on: Sat, 10 Aug 2013 20:10:16 +0000
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