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CASO DE ESTUDIO PINTURAS ANYPSA HERMANOS TORVISCO ANYPSA se ha convertido en la empresa líder en la fabricación de pinturas líquidas y en polvo, logro que se ha ido fortaleciendo gracias a una política basada en el mejoramiento continuo, la calidad total y la capacitación constante del personal. Ésta es su historia. La primera oficina de Anypsa estaba equipada con: cuatro esteras, las más baratas, dos baldes de pinturas- que servían de sillas- y una máquina de escribir obsequiada. Una realidad que ahora se contrasta con una computadora personal con pantalla de plasma y un confortable sillón gerencial en el quinto piso de un edificio propio de los Hermanos Torvisco, oriundos de Apurímac. El éxito de los tres hermanos, cuyas iniciales dieron el nombre a la empresa, Alejandro, Nemecio y Prudencio; no es producto de la suerte, es de un trabajo ininterrumpido a lo largo de los años. Ellos decidieron hacer empresa en el Perú y lograron forjarse en la lid competitiva del mercado. Todo tiene un inicio Si a Alejandro, que empezó trabajando en una llantería, le hubieran aumentado el sueldo al llegar a la mayoría de edad otra hubiera sido la historia de los tres hermanos. Él trabajaba en una empresa de pinturas desde los 13 años, pero al cumplir 18 años creyó que su sueldo se incrementaría, pero no fue así. Él siempre había trabajado en el campo con sus hermanos y su madre, labrando la tierra para beneficio suyo, así que no era imposible generar su propio empleo. Entonces habló con sus dos hermanos: Nemecio y Prudencio; el primero laboró vendiendo golosinas en un lugar que ya no existe- Cine Riva Agüero, El Agustino- y en un taller de carpintería; el segundo en labores de construcción, un obrero. Reunidos los tres constituyeron Anypsa, la empresa de fabricación de pinturas, la que es una recopilación de las iniciales de los tres nombres. Volvían a estar juntos. Tal como se lo habían prometido de pequeños en Abancay, su tierra, ya con los ahorros de los tres compraron su primer motor eléctrico en la calle Pachitea, para luego ir al Jirón de la Unión para crear el logo de la empresa. Empresa creada El primer local que alquilaron, de cien metros cuadrados, resultó una pésima inversión, fueron estafados, pues quien les alquiló el local no era el verdadero dueño. Se recuperaron y continuaron con el proyecto. El 11 de septiembre de 1991 a las 11 de la noche comenzaron a elaborar las pinturas. El local de Santa Anita era apenas un espacio cuadrado donde el techo era una ilusión, dos de los hermanos tuvieron que sostener un plástico que fungía de techo durante de toda la noche, para que la lluvia no arruine la preparación de las pinturas. Pronto el local inicial no era lo suficientemente grande para la empresa, por lo que se mudaron a otro de 500 metros cuadrados en Naranjal. También ese quedaría pequeño ante el crecimiento vertiginoso de Anypsa. Sus operaciones y ventas crecieron con el transcurso de los años, y ahora tienen una moderna planta de pinturas de 45 mil metros cuadrados, Trapiche, Carabayllo, en la que operan 280 trabajadores, que en su mayoría proviene de Abancay. También cuentan con una flota propia de 34 camiones de reparto. Su trabajo y sus planes no cesan. “Queremos aumentar nuestra capacidad de producción y exportar a Ecuador, Bolivia y Chile”, afirma el menor de los hermanos Torvisco, Nemecio Por ahora los hermanos intensifican la producción para la exportación a países vecinos, aún recuerdan como una bicicleta vieja los ayudaba a transportar los baldes de pintura en diferentes puntos de Lima. Aún recuerdan el 11 de septiembre de 1991 cuando nació Anypsa, la recopilación de las iniciales de los hermanos Torvisco, aún recuerdan Abancay, esa tierra que les enseñó a no caerse, a trabajar arduamente y a creer en los sueños. Aún hay tiempo para soñar.
Posted on: Mon, 19 Aug 2013 01:49:12 +0000

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