COMPARTIMOS CON USTEDES EL COMENTARIO AL EVANGELIO DEL DOMINGO 1ro. DE SEPTIEMBRE: Lc. 14, 1-7.14 VIGÉSIMO SEGUNDO DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO Los fariseos consideraban como un honor que importantes maestros de la ley aceptasen la invitación a participar en su mesa en las celebraciones festivas del sábado. En el evangelio de hoy Jesús acepta la invitación de "uno de los principales fariseos". En esta ocasión, como en otras, le observaban minuciosamente para ver si se ajustaba a las normas de la religiosidad farisaica. La conclusión siempre será la misma: no puede ser un profeta de Dios. Jesús no responde a sus expectativas y a su doctrina. Ellos consideraban su camino, su exposición de la ley, sus tradiciones, como el único camino querido por Dios. Durante la comida Jesús notó que los invitados escogían los primeros puestos. Y, aprovechado esta conducta social, establece una relación con el Reino de Dios: Buscar los primeros puestos es un modo de proceder que indica una falta de educación como norma de conducta social, pero además, y es lo principal que enseña Jesús, esa actitud es inadecuada para entrar en el Reino de Dios que Él anuncia. Los fariseos estaban convencidos de tener derecho a los primeros puestos en todos los sitios. Pero lo peor era que, de la misma forma, creían que también en el Reino de Dios les correspondían los primeros puestos. Ante tan ridícula pretensión, Jesús afirma la humildad como actitud del que quiere entrar en el Reino de Dios. “Porque todo el que se enaltece será humillado, y el que se humilla será enaltecido”. Jesús dijo al que lo había invitado: “Cuando des una comida o una cena, no invites a tus amigos, ni a tus hermanos, ni a tus parientes, ni a los vecinos ricos, porque corresponderán invitándote y quedarás pagado. Cuando des un banquete, invita a pobres, lisiados, cojos y ciegos; dichoso tú, porque no pueden pagarte; te pagarán cuando resuciten los justos”. Jesús rechaza el cálculo egoísta de la conducta humana que da para que le den, que ama por interés. Lo original y sorprendente de las actitudes recomendadas por Jesús, se observa fácilmente si tenemos en cuenta que nuestras actitudes suelen ser totalmente distintas: nadie pretende ser el último y, menos aún, a nadie se le ocurre invitar a un banquete a los pobres, a los lisiados y a los ciegos. Pero el Reino de Dios, que Jesús anuncia tiene una nueva jerarquía de valores. Jesús hoy destaca: La Humildad: Frente al orgullo y al interés personal, Jesús proclama que la humildad es uno de los grandes valores del Reino. Se trata de reconocer nuestra verdad de criaturas, dependientes de Dios y a vivir en consecuencia. La gratuidad, muy unida a la humildad. Actitud difícil de comprender y practicar en un mundo en el que las relaciones se basan en el intercambio, en el mercadeo y nadie da ni hace nada gratis. Difícil actitud en nuestra vida, pero necesaria para entrar en el Reino de Dios, que es don gratuito. El Reino de Dios está construido sobre una lógica diferente, la lógica de la humildad y de la gratuidad.
Posted on: Sun, 01 Sep 2013 00:14:43 +0000
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