Cartas Marcadas Por Alfredo Guzmán • ¿El infierno tan temido? Para el lobo estepario de Herman Hesse, abrir puertas y encontrar nuevas alternativas de vida y aventura, era parte de la novela. Esa novela leída a los 12 años, me marcó, pero verla repetida ahora con el gobernador del estado de Guerrero, Ángel Heladio Aguirre Rivero, quien como jugando con algo que desconoce, busca con afán, establecer un sino, que no entiende, ni establece propósito. Simplemente, busca aventura, quiere abrir puertas, cerrarlas, volver a abrirlas y buscar encontrar sorpresas, sólo establece que su infancia, fue fallida, como muchos procesos, que aún no cierra. Es decir, quiere hacer travesuras, como si el horno no estuviera para bollos. Lo ocurrido ayer en Tixtla, pudo haber sido un terrible hecho, derivado de una acción, para algunos, heroica, pero sinceramente, fue un despropósito. En este momento, estuviéramos lamentándonos de haber ocurrido una o varias muertes de gente inocente. Ayer entre las doce y la una de la tarde, un grupo de policías de autodefensas de Tixtla, esos que asesinaron a un joven, que realizaba su mudanza y que al ser detenido con acusaciones falsas, lo internaron en una cárcel, quien al ver que podría huir, al estar siendo imputado de algo inventado, fue asesinado por la espalda. Y de eso, nadie está preso. La impunidad total. Esos policías que acuden a un lugar buscando a su comandante Nestora y que hieren a otros policías, a quienes desarman, humillan, golpean y atacan, sin observar que esa situación, se les pudo salir de control, al dispararse una sola bala de los municipales, quienes al ser humillados, pudieron reaccionar con violencia, por fortuna no ocurrió. Los policías municipales de Tixtla, se replegaron, lo cual es aplaudible, mientras que los policías de autodefensas, jugaban a la guerra, tirándose al suelo y simulando disparar. Mientras mujeres policías envalentonadas por el apoyo obtenido de sus compañeros, desarmaban a otros policías municipales, apuntándoles a la cara a los municipales. Pero estos abusos siguen por todos lados, por donde se paran los comunitarios, quienes amparados por el gobernador del estado de Guerrero, Ángel Heladio Aguirre Rivero, quien los armó, financió sus unidades, entregó uniformes, credenciales, les paga salarios y entrega camionetas blindadas a su jefe, Bruno Plácido Valerio, quien ahora es el principal negociador con algunos municipios, a quienes chantajea, como al de Tierra Colorada, al que apresó a su edil, la obligó a que le entregaran programas municipales y el control de la seguridad. ¿Qué sigue, qué hace falta, qué buscará el gobernador de Guerrero, quien es el principal promotor de este tipo de policías, a los que quiere usar para su beneficio, en busca quizá de que le cuiden territorios, en la Costa Chica y la Montaña? ¿Hasta dónde quedará o termina la desmesura de un gobernador que juega con lumbre, sabiendo que no sólo se puede quemar él, sino quemar el estado de Guerrero, por su imprudencia, por su incapacidad de establecer límites a sus juegos, por su necedad de buscar en todo, hacer negocio, hasta vendiendo piedras o reinventando la violencia, buscando que los guerrerenses se maten entre sí? En verdad no entiendo qué busca Ángel Heladio Aguirre Rivero, al provocar enfrentamientos entre la sociedad guerrerense. Hasta cuándo terminará su juego perverso y oscuro, de pretender enfrentar a los ciudadanos, primero con las autoridades, luego con las policías, posterior, con grupos negativos y al final, con el gobierno federal, al andar coqueteando políticamente con un partido, con otro, con una posición social y luego inventar otros frentes, para que al final de cuentas, buscar desbarrancar al estado de Guerrero y sus ciudadanos. Al tiempo. Gracias. Comentarios: subalterno1234@hotmail Y [email protected]
Posted on: Tue, 27 Aug 2013 01:20:16 +0000
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