DENUNCIA POR DISCRIMINACION EN LA DIRECCION DE TRANSITO Tengo una discapacidad auditiva severa desde mi nacimiento ,sin embargo mi sordera no ha sido obstáculo alguno para poder desarrollarme en mi vida personal, social y laboral. Trabajo desde hace mas de 20 años como empleado administrativo en un Organismo Gubernamental Nacional, estoy casado y tengo dos hijos. Manejo desde los 18 años de edad; es decir hace 31 años!. Hace 19 años me radiqué en Santa Rosa, ya que antes vivía en Buenos Aires, donde jamás he tenido problemas para sacar ni renovar mi registro de conductor. No tengo antecedentes de accidentes, multas ni deudas por patentes. Mi auto tiene , tal como se estipula en el Reglamento, dos espejos retrovisores y uno central. Uso audífonos, que están indicados en mi carnet de conducir. Es decir, llevo la misma forma de vida que cualquier otro ciudadano, con las mismas obligaciones y los mismos derechos. Al vencer mi registro de conductor en el mes de Junio , he solicitado turno para la renovación del mismo, siendo para el 24 de Junio. En el día establecido para la renovación, me presento para el apto médico con todos los requisitos requeridos , dispuesto a rendir los exámenes teórico y práctico. Me toca ser atendido por el Doctor Marco a. Valdivieso, a cargo de la evaluación médica, a quien le anticipé que era sordo y me manejaba con la lectura de labios. Le anticipé al médico que era una persona sorda y que me manejaba con la lectura de labios. No sólo me atendió de mal modo sino que me tomó pruebas absolutamente ridículas y humillantes como la de taparse los labios con un papel o pedirme que cerrara los ojos mientras hacía chasquidos con sus dedos o estrujaba un papel , para verificar si escuchaba sus palabras o los ruidos. lo cual era imposible para mí. Estas “pruebas audiológicas” no hicieron mas que someterme a una situación degradante, a pesar de ratificarle varias veces que era sordo y me dificultaba entenderle porque su modulación labial era nula, ya que tenía una forma de hablar muy extraña . No me dio la posibilidad de replicarle su trato a mi persona, ya que a través de una nota despectiva me echa en cara que no escucho y que debo recurrir a un diagnostico audiológico. para verificar mi perdida auditiva y corroborar si estoy apto para conducir. Consecuentemente, no pude rendir el examen teórico ni práctico por haberme denegado el apto médico. Luego de esto, recurro a mi médico otorrinolaringólogo quien me da el diagnóstico con el consabido “apto para conducir”. Ante tal indignación, no solo por la negativa de otorgarme el apto médico por mi sordera sino por el maltrato del Dr. VALDIVIESO he presentado la queja correspondiente por DISCRIMINACION a la Municipalidad de Santa Rosa. Luego de esta queja, el día viernes 25, concurrí nuevamente a la Dirección de Tránsito para entregar al Dr. Valdivieso el certificado de mi médico y lograr mi apto médico. Con la presencia de mi esposa, el asistente de mi abogado y el Subdirector de Tránsito como testigos presenciales de esta nueva entrevista. Luego de una conversación tensa y muy dura, se me otorga el apto médico y consecuentemente la renovación de mi licencia de conductor por 5 años. Sin embargo, mas allá de estos hechos desafortunados que derivaron en un claro daño moral , quiero hacer pública mi queja por la conducta discriminatoria del Dr. Marco a. Valdivieso no sólo por el maltrato humillante hacia mi persona, sino porque a raíz de lo sucedido me he enterado de casos similares hacia otras personas sordas atendidas por este mismo médico, que no se han animado a denunciarlo por temor a que no le renueven el registro.- Espero que tanto la Dirección de Tránsito como el Sr. Intendente tomen las medidas pertinentes para evitar que se repitan estas situaciones desagradables y cumplan con la promesa de una “sociedad inclusiva” para las personas con discapacidad, empezando por las buenas prácticas.
Posted on: Sun, 30 Jun 2013 21:08:08 +0000
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