Déjà vu o deja vu es un término francés que significa “ya visto”. El concepto describe la sensación que experimenta una persona al pensar que ya ha vivido con anterioridad un hecho que, en realidad, es novedoso. El responsable de acuñar el término fue Émile Boirac, un parapsicólogo francés que nació en 1851 y falleció en 1917. Frases donde aparece el término: “Tuve un déjà vu: siento que ya estuve antes en esta casa”, “Vi el noticiero y pensé que era un déjà vu”, “Dile a Claudio que no es un déjà vu: ya le dije como diez veces que tiene que leer el informe y hacer un resumen”. El déjà vu, también conocido como paramnesia, hace que el sujeto sienta que vive algo familiar pero que, a la vez, le resulta extraño. Por lo general, pese a la creencia de la gente, se atribuye la supuesta experiencia precedente a creaciones oníricas. En general, se divide a los déjà vu en dos clases: el déjà vécu (aquello que el individuo siente que ya vivió) y el déjà senti (algo que la persona ya sintió, aunque no forma parte del bagaje de su memoria). De acuerdo a los estudios desarrollados en torno a este concepto, un déjà vu se encuentra asociado a los recuerdos que una persona tiene (ya sea por algo que haya vivido, sentido o soñado) y es una experiencia que afecta sobre todo a jóvenes cuya edad ronda entre los 15 y los 25. Hay personas que padecen un déjà vu crónico, es decir que absolutamente todo lo que viven lo perciben como su ya hubiera ocurrido. Estos individuos son propensos a padecer depresión y disfunciones en la memoria. La mayoría de las personas con esta patología han padecido alguna lesión en la cabeza o afirmaron que durante un tiempo sentían un dolor crónico, síntomas posiblemente relacionados con una deficiencia física que provoca el déjà vu, un déficit en el funcionamiento del lóbulo temporal. Además es un trastorno que podría estar vinculado con altos niveles de estrés y cansancio, con alteraciones aleatorias de la memoria, crisis de epilepsia o fantasías oníricas o inconscientes. Según lo explicaron científicos de la Universidad de Leeds, aquellos que sufren déjà-vu crónico, tienen una sobre actividad en el circuito de procesamiento de la memoria; es decir que éste nunca se relaja, está recordando todo el tiempo. Agregaron que además la forma de almacenar los hechos es diferente a la de las sensaciones que dichos hechos le causan y se produce un desfasaje entre ambas acciones que en cualquier otra persona funcionan de forma conjunta. Cabe señalar que quienes padecen esta enfermedad tienen mucho miedo de quedarse solos, porque perciben que dicho fenómeno es más poderoso que ellos y no saben cómo afrontarlo; además, la repetición constante de la sensación que causa este trastorno, en muchos casos puede desencadenar una depresión. Un amigo programador me hizo una explicación absolutamente sencilla sobre este tema complejo, que me gustaría compartir. Imaginate que tu cerebro tiene un espacio para almacenar los recuerdos y otro donde analiza las experiencias que están teniendo lugar en el presente. Y que por alguna razón, antes de analizar el presente lo guardara como un recuerdo. En ese caso, el cerebro entendería el presente como un recuerdo. Sencillo de entender, ¿Cierto? Por último, cabe mencionar que el déjà vu es mencionado con frecuencia en la cultura popular o en obras artísticas. En el cine, la película Matrix muestra al déjà vu como un fallo que puede percibirse en el sistema. Por otra parte, Déjà Vu es el título de un filme protagonizado por Denzel Washington, donde el fenómeno es explicado como señales de advertencia que llegan desde el pasado o indicios para el futuro.
Posted on: Wed, 17 Jul 2013 22:55:34 +0000
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