EL LLANTO DE LOS NEONATOS/ LA LEY DE LÓPEZ (PRIMERA PARTE) La - TopicsExpress



          

EL LLANTO DE LOS NEONATOS/ LA LEY DE LÓPEZ (PRIMERA PARTE) La última vez que estuve en la guerra, hace exactamente diez años, me retiraron del servicio tras pasar ocho meses y medio en la jungla. El capitán Kellermann, jefe de mi compañía me hizo llamar y me dijo: “López, quiero que sepa que aquí todos le valoramos mucho y le tenemos en gran estima”.- A ver… Yo no soy muy inteligente, es más seguramente soy un animal porque le he hecho muchas cosas malas a mucha gente. He torturado y asesinado, he matado a varios hombres, a algunas mujeres e incluso a algunos niños. Intenté no ser nunca cruel y a las personas a las que ejecuté lo hice con la mayor rapidez posible, eso tal vez es lo único que podría salvarme, aunque no trato de justificarme, ya que a los prisioneros enemigos… A esos si que les hice alguna putada, pero fue para sacarles información, no por malicia si no para mantener con vida a los míos. A ver… como habría dicho mi madre, lo que yo hice en la guerra: “no lo haría un buen cristiano”, pero es que ellos le hacían lo mismo a los nuestros cuando nos tomaban prisioneros, y aunque eso no me justifique, creo que todo lo que le hice a otros seres humanos lo hice para mantener con vida a los míos y los pecados que cometí en la guerra quedan para que al final de mi existencia tenga que rendir cuantas por todos ellos, pero sólo ante mi creador. Decía que yo no debo de ser muy listo y que cuando alguien como el capitán Kellermann te dice algo como eso de que “te valora mucho” y que “te quiere mucho como la trucha al trucho” es que o bien te va a dar una mala noticia o es que te quiere poner a cuatro patas y meterte el rabo hasta la garganta. A ver… Ya he dicho que yo soy un animal, nunca destaqué en la escuela por tener un gran cerebro si no porque a menudo me partía la cara con todo el mundo y a menudo con chicos de cursos superiores que se mentían conmigo por mi acento español… Y aclaro lo del acento porque yo si no abro la boca y no se fijan en mi apellido, paso perfectamente por un gringo. Es más algunos de mis compañeros de colegio creían que López era un nombre de origen francés, porque para la mentalidad del anglosajón medio un hispano no puede tener la piel y el color del cabello tan claros (o en algunos casos aún más) Que ellos… Aunque reconozco que hay una pequeña trampa porque yo soy hispano, pero mis padres nacieron en el viejo continente, en España, concretamente en un lugar llamado: Zamora. Ellos eran de diferentes pueblos de Zamora y no se conocían… Lo hicieron cuando ambos emigraron, primero a Hispanoamérica, donde yo nací y luego, un poco más tarde a los Estados Unidos. Mi padre se llamaba: Viriato, y mi madre: Ana, pero los dos ya murieron hace tiempo, poco después que yo me alistase en el ejército y me enviaran por primera vez a Vietnam… Y digo por primera vez, porque me hice profesional serví cuatro veces en Vietnam. Aquella vez que me retiraron, cuando llevaba ocho meses y medio era la cuarta y última y pensé que el huevón del capitán Kellermann me estaba soltando una sarta de mentiras y que algo malo pasaba porque cuando un jefe te dice eso es que te van a mandar a la puta calle… o al menos eso es lo que pasaría en una empresa civil. Pensé: “¡Carajo, lo mismo estos huevones me van a expulsar del ejército por no haber matado a suficientes seres humanos! ¡Nos ha jodido Ho Chi Minh con las flores del 1º de mayo!¡Encima ahora querrán que los soldados les rellenemos hojas de productividad… No sé que pensaría el Charlie de todo esto! Me refiero a Marx… a Charlie Marx… No creo que haya ninguna plusvalía entre las personas que he matado y el beneficio bruto recibido por ello. Durante mi tercer servicio de ultramar en Vietnam (que por cierto fue el más aburrido porque me tocó en la policía militar de Saigón y no tuve la ocasión de matar a nadie… Ni si quiera matar a nadie un poquito, aunque eso si di muchas palizas con la porra a los marines de permiso que se emborrachaban para liarla parda y eso fue divertido, sobre todo cuando eran oficiales anglosajones) Decía que la tercera vez que estuve en Vietnam me hice amigo de un cabo de oficinas, el cabo Eppstein. Eppstein era un judío de Brooklyn que terminó de auxiliar administrativo en un despacho en Vietnam porque el tío sabía mucho de números, se hacía el tonto con los oficiales intermedios y cuando destacaba lo hacía siempre delante de los altos oficiales para que quisieran tenerle cerca por su gran valía y no le mandaran a la jungla a pegar tiros, porque Eppstein no era un pelota, sino un superviviente. Era tan bueno con los números que una tarde y de coña me calculó lo de la plusvalía de la guerra a lápiz y papel. Calculó que yo había ganado 217 dólares con 23 centavos por cada ser humano que había abatido en mis dos primeros servicios en Vietnam. Me explicó que se suponía que cuanto menos ganaba un soldado por cada enemigo muerto (él lo llamó: “chinómetro” o contador de “chinos muertos o matado por cada soldado americano en Vietnam”) Cuanto menos se ganaba por muerto, ese soldado concreto era teóricamente más productivo para el ejército. Luego, por pasar el rato (por puro aburrimiento en mitad de la guerra de Vietnam) También calculo el coste de producción de la bomba atómica arrojada sobre Hiroshima respecto a la teórica plusvalía que debería de corresponder a los tripulantes del Bombardero Enola Gay que arrojaron la bomba sobre la ciudad. Eppstein afirmaba que era de unos 17 dólares con 47 centavos por cada japonesito de Hiroshima convertido en polvo, sombra o ceniza… Por lo que dedujo que la construcción de la bomba atómica debió de costar entorno a 6.114.477 dólares y 19 centavos. En dólares de 1945, es decir: hoy en día, en 1982 serían entre 30 y 60 millones, que aunque parezca mucho dinero, no es demasiado teniendo en cuenta el Producto Interior Bruto de aquellos países que podrían desear tener una bomba atómica al menos tan potente como la arrojada sobre Hiroshima. Pero ese no es el problema de las armas nucleares, el verdadero problema no es construirlas sino ¿Qué hacer con ellas? Pues si la producción es factible para cualquier estado medio (aún con algunos inconvenientes tecnológicos) El almacenamiento y el uso de las mismas es el gran problema. De todas formas en Vietnam no usamos la bomba… Al menos que yo sepa. Aunque no fue por falta de ganas porque Dick llegó a insistir mucho en ello. Dick se lo decía a su perrito que se llamaba: Checkers… Le decía: “Checkers, sólo tú me comprendes, querido perrito mío… ¡Vamos a arrojar la bomba sobre esos malditos chinorris de mierda y así les enviaremos de vuelta a la puta Edad de Piedra!”.- y Checkers movía la colita y ladraba satisfecho.- “¡Guau, guau, guau!”.- Decía Checkers a su amo y luego dejaba colgando la lengua mientras Dick le acariciaba detrás de las orejas y Dick, es decir: Richard M. Nixon no decía nunca esto en público, porque todo un señor presidente de los Estados Unidos que era no utiliza nunca en público expresiones como: “chinorris de mierda” o “devolver a alguien la puta Edad de Piedra” ni tampoco utiliza otras expresiones vulgares como: “Cojones, joder, coño, polla… Espionaje… Watergate, etc,etc…”.- Además a Dick todo se la pelaba y él quería lanzar la bomba, como hubiese hecho el anterior presidente Johnson si no hubiese muerto prematuramente y no hubiese estado demasiado ocupado en preparar a los astronautas para llegar a la Luna y sobre todo encubrir su participación en el asesinato de J.F.K. cuando él era vicepresidente. Pero Dick estaba obcecado y quería lanzar la bomba de una puta vez sobre Saigón y terminar así con todos esos malditos y pérfidos comunistas chinorris del sudeste asiático que estaban matando a sus valerosos y jóvenes marines blancos y/o anglosajones (lo de los soldados hispanos y los negros era una forma más de retirar elementos indeseables de las calles) Pero llego su secretario de estado, un tal: Henry A. Kissinger y le explicó pacientemente, como si el presidente de los Estados Unidos fuese un niño de 8 años que Saigón era la capital de Vietnam del Sur y que los sudvietnamitas eran aliados de América y el motivo por el que estaban allí haciendo la guerra en la jungla. FIN DE LA PRIMERA PARTE CONTINUARÁ…
Posted on: Mon, 26 Aug 2013 09:08:18 +0000

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