El 20 de diciembre de 2001 en Buenos Aires, cuando peleábamos con la policía, las barricadas ardían, ardían los ojos, se respiraba el humo del fuego de París, del cordobazo, de génova, el no pasarán... quien vivió ese momento conoce esa sensación de tener un marcapasos que sostiene el corazón aunque sientas que te mueras, es la libertad que te circula por el cuerpo, y el cuerpo no es tuyo, es un cuerpo de miles. Ese momento parece que se terminó pero es eterno. Hoy late en Turquía, en San Pablo. No estoy ahí pero lo sé, lo siento: estuve ahí por anticipado. y lo leo en este testimonio de abajo.
Posted on: Sun, 16 Jun 2013 01:00:23 +0000
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