El PELIGRO DEL DESCUIDO ESPIRITUAL INTRODUCCIÓN: A. Parece ser que la frase: “Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde” es la enseñanza de toda la epístola a los Hebreos. B. El escritor a los Hebreos buscaba como alentar a los Cristianos de Jerusalén a no claudicar ante la terrible persecución (2:1; 3:12; 10:23). C. El autor presenta al cristianismo como el estado espiritual predilecto de todo hombre. Un estado que por ninguna circunstancia debía de perderse. D. Y para evitar que el creyente llegara a perder aquella condición espiritual tan privilegiada el autor hace serias advertencias importantes respecto al peligro del descuido espiritual. Texto: Hebreos 2:1-4 Título: “El Peligro del Descuido Espiritual” Hebreos 2:3 dice “¿Cómo escaparemos nosotros, si descuidamos una salvación tan grande?” I. LA PREGUNTA DEL AUTOR EVIDENCIA QUE EL CRISTIANO PUEDE DESCUIDAR SU SALVACIÓN. A. ¿Cómo puede suceder eso? La palabra “descuidar” generalmente se asocia a la “negligencia” lo cual denota a una persona descuidada o que se desentiende de algo. B. El diccionario Vine define a una persona descuidada como una persona que “no hace caso” (Mateo 22:1-5). La define también como a una persona que “se descuida” (1Timoteo 4:14), y como una persona que se desentiende (Hebreos 8:9). C. Los Cristianos no debían descuidar su salvación ni siquiera por la persecución, pues ahora gozaban de una mejor revelación (Hebreos 1:1-2), ya no por medio de los profetas, sino por el Hijo mismo Jesucristo (v.2). D. Jesucristo ahora merece toda nuestra atención (2:1). 1. Como cuando el capitán de una embarcación examina sus cartas de navegación para no perderse en el mar. 2. El Marinero mas experto podría sucumbir ante un mar embravecido (Hechos 27:18-20). II. LA PREGUNTA DEL AUTOR ESTABLECE QUE EL CRISTIANO QUE DESCUIDA SU SALVACIÓN SUFRIRÁ SERIAS CONSECUENCIAS. A. Aquellos Cristianos a quienes escribe el autor enfrentaban las adversidades propias de una terrible persecución. 1. Volver atrás podría parecer lo mejor, sin embargo por el contrario sería lo peor que podían hacer. Ellos ahora debían recordar las advertencias del Señor. a. Las advertencias y el ejemplo de Jesucristo. b. Las advertencias y el ejemplo de los apóstoles. c. Las advertencias y el ejemplo de muchos hermanos. 2. Lo mejor en tal caso sería ATENDER (cuidar) la palabra. 3. Aquello no era la opción, era el requisito, la exigencia, una obligación. B. El autor les recuerda que las palabras dichas por los ángeles como una sentencia firme se cumplieron contra los transgresores y los desobedientes (v.2). C. Quizás usted haya sentido el deseo de no seguir mas, el deseo de volver atrás, pero para los cristianos no hay opción, el camino al cielo es uno y no debe interrumpirse por nada. 1. No hacer caso de cuidar nuestra salvación, o desentendernos de ella nos pone ante: (a) El inminente peligro de PERDERLA (2:1) (b) El irremediable CASTIGO para los rebeldes (2:2) (c) La imposibilidad de eludir el JUICIO de Dios (2:3-4) 2. No hacer caso de cuidar nuestra salvación, o desentendernos de ella, nos lleva a retroceder y consecuentemente nos lleva al desagrado de nuestro Dios (Hebreos 10:38). D. Aplicación: La palabra de Dios es para todos los creyentes de todos los tiempos (1 Pedro 1:25). E. Quizás no enfrentemos la misma persecución que ellos enfrentaron pero enfrentamos nuestras propias luchas que en dado momento podrían llevarnos a una apostasía semejante. F. “El hombre que se aparta del camino de la sabiduría vendrá a parar en la compañía de los muertos”. (Proverbios 21:16) CONCLUSIÓN: A. Lo contrario a descuidar es CUIDAR, es ATENDER. Estamos cuidando nuestro estado espiritual, o lo estamos descuidando. Estamos atendiendo nuestro estado espiritual o lo estamos desatendiendo. B. ¿Estamos cuidando nuestra salvación? Dios nos exhorta a mantener aquella condición tan privilegiada que alcanzamos, “Guarda mis mandamientos y vivirás” (Proverbios 4:4). C. Juan 8:51 dice: “De cierto, de cierto os digo, que el que guarda mi palabra, nunca verá muerte”. D. 1 Juan 2:3 dice: “Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si guardamos sus mandamientos”. E. No descuidemos nuestra salvación sino mas bien como dice Pablo: “Ocupaos en vuestra salvación con temor y temblor” (Filipenses 2:12). Himno de Invitación # 296 “Mas allá del Sol”.
Posted on: Mon, 28 Oct 2013 03:31:42 +0000
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