El angel sin luz Capítulo 1: Luz cegadora Esta es la historia de - TopicsExpress



          

El angel sin luz Capítulo 1: Luz cegadora Esta es la historia de Thala Kasei, un excepcional jovencito de tan solo apenas 14 años de edad, quien vivía pacíficamente detrás de las montañas con su padre Kenji, en un hermoso aunque misterioso lugar llamado Jinzi. Casi constantemente cubierto por una densa capa de niebla, nubes y lluvia todo el año, geográficamente el bosque Jinzi, también conocido como el jardín de Lilith, no se encuentra ubicado en ningún mapa, sin embargo, se dice que para llegar hasta allá, primero se debe cruzar por las peligrosas montañas para después atravesar por el valle de la muerte; 樹海 Jukai. Su superficie está formada principalmente por una espesa capa de roca volcánica, y debido a la densidad de árboles que bloquean el viento y a la ausencia de fauna, el bosque también es conocido por su tranquilidad. También se cuenta que pocos son los que han logrado llegar y adentrarse en lo profundo de este bosque, pero ninguno ha regresado jamás, ya que se cree, según una leyenda, que en el bosque habitan algunos demonios sedientos de sangre humana y cuando encuentran a un excursionista vagando por su hogar, lo pierden para devorarlo. Este relato inicia cuando un grupo de jóvenes habían decidido adentrarse en lo profundo de este lugar, pero después da varias horas de andar caminando y no poder salir del bosque, se dan cuenta de que algo andaba mal, pronto caería una tormenta, estaba por obscurecer y aun no tenían idea de en donde se encontraban, ya que, debo aclarar que el bosque Jinzi cuenta con 120 km2. así que debían buscar pronto un lugar donde acampar, encontrándose así, con una hermosa, enorme y confortable mansión ubicada en lo profundo de una ladera, lo cual, era algo realmente extraño, pues se supone, según lo que cuentan, que El bosque Jinzi es un lugar bastante solitario y apartado de la civilización. Sin poderse imaginar que dentro de poco vivirían la experiencia más aterradora de sus vidas y, tal vez la última, los jóvenes deciden ir a la mansión a pedir ayuda, allí, son recibidos por una extraña, aunque amable viejecita quien supuestamente resultaba ser el ama de llaves. La anciana los atiende y les explica que su amo, El joven Yuri, se encontraba de viaje, y que ella lo representaba durante su ausencia, sin embargo, según la anciana, no habría problema alguno con su amo si los dejaba quedarse, sin importarles cuan raro pareciera aquello, los muchachos aceptan con gusto la hospitalidad de la mujer, quien, por si fuera poco, también les había preparado un delicioso banquete antes de dormir. Exhaustos, los pobres muchachos deciden retirarse a dormir, cada uno, a la respectiva habitación que les había asignado la anciana, perdiéndose en el sueño sin saber de los horrores que le haría sufrir su destino a manos de aquella mujer. Horas más tarde, Ameyali, una de las muchachas, se despierta bastante confundida y mareada, sin recordar cómo es que había llegado hasta aquel viejo cuarto lleno de goteras y de telarañas en el que descubrió con horror que tres de sus amigos estaban completamente abiertos desde el pecho hasta el tórax y sus órganos habían sido removidos, el corazón, los pulmones, los intestinos, ya no estaban y había sangre regada por todas partes. De pronto, unos escalofriantes gemidos llenos de intenso y profundo dolor, helaron la sangre de la joven, se trataba de Kira, su mejor amiga, quien, aun atreves de una vieja y sucia cortina, Ameyali podía contemplar cómo era lentamente devorada por esa cruel y sanguinaria anciana que se deleitaba con la carne de la joven. Desesperada por huir cuanto antes de ese maldito lugar y buscar ayuda, Ameyali intenta luchar por arrastrarse hasta la salida, pero mayor se vuelve su desesperación al descubrir que por más que lo intentara, su cuerpo no reaccionaba, no podía gritar ni tampoco moverse, tan solo escuchar y mirar aterrada como la vida de su amiga era consumida sabiendo que quizás sería la siguiente, era como estar atrapada dentro de una pesadilla viviente, pues lo que sucedió fue que no se dieron cuenta de que la anciana los había drogado mientras cenaban con unos hongos especiales que solo crecían en las montañas y sirven para inducir un sueño profundo en las personas, además de usar algunas especias para inmovilizarlos en caso de que los efectos del hongo llegaran a pasar. En ese momento, Tsukune, quien era el único de todos que no había ingerido nada de lo que a la anciana les había preparado, toma a Ameyali en sus brazos y sin pensarlo, sale corriendo a toda prisa de la mansión con la joven, pero, por desgracia, la anciana se da cuenta de esto y de inmediato se transforma revelando así su verdadero ser y manda a una de sus criaturas tras ellos, la cual sale volando por una ventana. Por fin los efectos de la droga están por pasar y Ameyali poco a poco empieza a recuperar la movilidad y el habla, sin embargo, ella aun seguía bastante débil como para correr, por lo que Tsukune la llevaba cargando en medio de la lluvia, pero en la profunda obscuridad del bosque y debido a la humedad del suelo, Tsukune resbala y casi terminan cayendo por un precipicio al cual no se le veía fondo, pero por suerte, el joven alcanza a sujetarse de la gruesa raíz de un roble y aferrándose firmemente a esta, intenta subir, pero de pronto, descendiendo desde lo alto del cielo, la criatura atrapa a Tsukune con sus enormes garrotas y levanta el vuelo con el joven provocando que Ameyali se le resbalara y cayera dentro del precipicio. Afortunadamente, resulta que en el fondo cruzaba un rio el cual era muy caudaloso y Ameyali cae a salvo dentro del agua, lastimada por el impacto del golpe al caer, la joven queda inconsciente y es arrastrada por la corriente rio abajo. A la mañana siguiente, Kenji, quien era un pescador, se dirigía al rio como siempre para empezar a hacer su labor, cuando encuentra a una persona yaciendo inconsciente al otro lado de la orilla y sin pensarlo, acude a ver si todavía podía rescatarla, se trataba de Ameyali, y si, aún seguía con vida, pero estaba muy mal herida, así que sin perder más tiempo, Kenji se la lleva de inmediato a su casa en medio del bosque para atenderla, es aquí, donde Ameyali conocerá al hermoso y guapo Thala Kasei, el hijo de Kenji. Ambos, eran hasta ahora las únicas personas que vivían dentro del bosque, en una humilde pero bonita cabaña, sin embargo, Kenji en realidad no era el verdadero padre del joven, sino que hace tiempo, él lo adopto y se ha hecho cargo del joven desde que su verdadera madre falleció de forma trágica cuando él apenas era solo un bebe, por otra parte, jamás han sabido nada sobre su padre biológico. Pese a todo esto, Thala es muy feliz viviendo con Kenji, ya que posee una gran fuerza interior que lo motiva a continuar y a seguir adelante. A pesar de que por su hermosura parece ser tan delicado, Thala es aprendiz de artes marciales; kempo, wu-shu, quick boxing, full contact, etcétera, Kenji se encarga de adiestrarlo y, aunque aún le falta mucho por aprender a este joven, no cabe duda de que algún día será un excelente peleador, pues son su dedicación y tenacidad lo que lo definen. Después de recuperarse, Ameyali le platica a los dos lo que había sucedido con ella y sus amigos, les conto como habían sido asesinados y como ella logro escapar de las garras de aquella mujer, con lo que Kenji supuso que quizás se trataba de Yama-uba o Yamamba; mujer de la montañas, un espíritu o demonio que habita en los bosques profundos de Japón, a veces cambia su aspecto al de una mujer muy hermosa o al de la persona amada de alguna de sus víctimas, o mantiene su forma real y se hace pasar por una amable viejecita. También puede ofrecer ayuda al viajero perdido y después conducirlo hasta su muerte, así como ofrecer alojar a la víctima en una choza o mansión y una vez ganada su confianza los atrapa y se los come. Además, Yama-uba es experta en las artes de la brujería y de las pociones, por lo que Kenji le recomienda a la joven quedarse con ellos para que la puedan proteger, o de lo contrario, este ser podría encontrar a Ameyali, pues una vez que Yama-uba ha escogido a su presa, no descansa hasta matarla. Ameyali acepta quedarse con ellos, ya que tampoco tiene a donde ir, así que Thala se ofrece para cuidarla, sin nada que esperar cuando ella y sus amigos habían decidido visitar El bosque Jinzi, a medida que pasaba el tiempo y a medida que se iban conociendo más y más, comenzó a crecer cierto sentimiento de amor entre ambos jóvenes. Ameyali cerraba un capitulo en su vida, dejaba atrás años de tristeza y alguna que otra alegría, al lado del que alguna vez fue su compañero, su amor, el que creía que era el amor de su vida, se había jurado una y otra vez, que no se volvería a enamorar jamás, ya que había dejado de creer en el amor, pero un viaje a este bosque, termino por cambiar su vida y su corazón. A pesar de parecer un lugar bastante tétrico y solitario, y de todas las cosas horribles que se hablan, El bosque Jinzi fue el escenario perfecto para dar inicio a lo que parecía ser, una historia de verdadero amor, ella, junto con sus amigos, habían estado preparando ese viaje todo el año, anhelaba sentir la tranquilidad de aquel lugar, la libertad, escapar de su pasado, un pasado que le hacía sentir que valía menos que la hermosura de su cuerpo, lo cual, le ocasionaba cierto dolor y tristeza, pues no se sentía totalmente segura en su corazón de querer comenzar una nueva historia, una nueva vida, y de querer compartir esa vida con alguien más, la habían lastimado demasiado. Esa noche, mientras Ameyali, Thala y Kenji dormían, lejos de allí, en la mansión, la anciana preparaba a Tsukune quien aún seguía con vida, para la llegada de su amo, que sería dentro de seis noches, y decide enviar a otra criatura para encontrar a Ameyali. La historia da un giro inesperado para Ameyali cuando, una noche, mientras se bañaba en el rio, comenzó a sentir que alguien o algo la espiaban, pronto, la joven sale del agua, toma su toalla, se viste y se va de allí, camino de regreso a la casa de Kenji, empezó a sentir que la venían siguiendo, temiendo que pudiera tratarse de Yama-uba, le llama a Thala para ver si se encontraba por allí, pero nadie le contesta y sigue caminando, preocupada de que la fueran a capturar, Ameyali empieza a correr, pero más adelante la joven tropieza cuando algo le sujeta el pie. Se trataba de unas horrendas sombras que tenían la intención de convertir a la joven en su víctima, de inmediato, estas criaturas empezaron a rodearla para así, abusar de ella inmovilizándola totalmente para evitar que se escapara mientras una de ellas le cubría la boca para que no fuese a gritar, Ameyali, aterrada, solo podía sentir como le acariciaban las piernas con esas frías y ásperas manos, subiendo poco a poco por los muslos hasta llegar a su entrepierna, pero en ese momento, cuando Ameyali creía estar perdida, Thala aparece de la nada y le ordena a las criaturas liberar a la joven, estas, al verle, se molestan y se dejan ir contra él, quien desaparece apenas en milésima de fracción de segundo, dejando a las criaturas y a Ameyali confundidas. Thala aparece detrás de las criaturas y empieza a emitir una especie de luz potente de la palma de su mano derecha, logrando así, que estos seres se evaporaran. La joven, sin saber que decir o que pensar sobre lo ocurrido, intenta asimilar la situación, pero, de pronto, Thala se voltea hacia ella y antes de darle oportunidad a reaccionar, le apunta con su mano a la cara y nuevamente emite la misma luz cegadora, entonces, Ameyali se despierta a mitad de la madrugada bastante confundida por lo que paso, sin poder recordar si quiera cómo es que había llegado hasta su cama y, aunque todo parecía tratarse de un simple sueño, algo en su interior sabía muy bien que todo había sido real. Incapaz de volver a conciliar el sueño, los siguientes días, Ameyali comenzaba a preguntarse; ¿Quién era Thala realmente?, ¿Acaso todo lo había soñado, las sombras, el rio, la luz?, ¿Qué significaba todo eso?, plantando así, una semilla de duda en su corazón, sin atreverse a decirle nada a Thala respecto a lo que sentía, sin embargo, esa tarde, mientras Kenji preparaba de cenar, Thala terminaba sus deberes como siempre y, trabajando en el viejo cuarto detrás de la casa, es entonces, cuando al levantar una vieja madera de roble de aproximadamente unos 220 kilos, la cadena con la cual la iba subiendo a través de una polea, se truena y esta termina desplomándose sobre Ameyali quien iba entrando al cuarto para ver a Thala. El joven, al darse cuenta de esto, suelta la cadena y baja corriendo para proteger a la joven, todo esto sucede, apenas en una fracción de segundo, Thala sujeta a Ameyali y ambos se tiran al piso, cubriéndola él con su cuerpo a modo de escudo, de esta manera, la madera se impacta sobre la espalda del joven estrellándose como si hubiese caído sobre un barril de acero, Ameyali, desconcertada, solo se queda allí, recostada, sin saber cómo reaccionar, nubes de tormenta habían comenzado a formarse en el horizonte, Thala, al ver la expresión en la cara de Ameyali, decide contarle todo sobre sus habilidades, por lo que la joven, confundida después de escuchar la verdad sobre él, lo hace sentir mal comparándolo con las demás criaturas del bosque Jinzi y tras derramar una lagrima, sale corriendo de inmediato, en ese momento, Kenji, quien se había dejado venir al escuchar tremendo golpe, encuentra la madera azotada en el piso, la cadena partida en pedazos y a Thala muy asustado y, preguntándole a su hijo lo que había pasado, este le cuenta todo lo ocurrido, preocupado por lo que pudiera sucederle a Ameyali, Kenji le ordena a Thala salir a buscarla antes de que Yama-uba la encuentre, por otra parte, cerca del rio, Misuno iba corriendo sin atreverse a mirar atrás, lastimada, confundida respecto a lo que sentía por Thala, gruesas gotas de lluvia habían comenzado a caer. Por desgracia, Ameyali es descubierta por el monstruo que la anciana había enviado y, desde los aires comenzó a perseguirla sin que la joven se diera cuenta, lejos de allí, Thala iba corriendo a una gran velocidad entre los arboles tratando de ver si lograba divisar a Ameyali por algún lado, sin embargo, al otro lado del bosque la criatura ya había alcanzado a la muchacha y bloqueándole el paso, le ordena venir con ella, mas Ameyali se reúsa a obedecerle y arrojándole una pedrada al monstruo, intenta salir huyendo pero este, alargando repentinamente su brazo como si fuera de goma, la sujeta del tobillo derecho y la hace tropezar. Mientras tanto, Kenji, sintiéndose en parte responsable, toma su vara y también sale a buscar a la joven. Consciente de que Ameyali se encontraba impotente ante su poder, la criatura lentamente comienza a encoger su brazo a su tamaño original, arrastrando a la joven que en su desesperación empieza a gritar y a suplicar auxilio. Al otro lado del bosque, Thala alcanza a escuchar los gritos de Ameyali y de inmediato sale corriendo a su rescate. Llegando a donde la joven en cuestión de segundos, golpea al monstruo para que soltara a su amiga, lanzándole con una poderosa ráfaga de aire a presión que sale expulsada de la palma de su mano, expulsándolo a mas de 20 metros contra los arboles, Thala, apresurándose, corre a levantar a Ameyali del suelo, quien al verle, no podía creer que él estuviera allí y la defendiera, por su parte, la criatura, bastante confundida con la forma en la que Thala apareció de repente y preguntándose cómo fue que la golpeo sin tocarla, se incorpora muy enfurecida con la intención de enfrentarse al joven. Conociendo bien lo que sucedería, Ameyali hace por alejarse fuera de aquel peligro, sin embargo, la bestia, al no estar dispuesta a dejarla escapar, se deja ir contra la muchacha, de inmediato, Thala, colocándose en guardia, también se le deja ir a la criatura con gran velocidad y sujetándola firmemente, ambos terminan impactándose bruscamente contra la base de un risco obligando a Ameyali a detenerse ante el poderoso estruendo que hizo sacudir la tierra, al tiempo que un fulminante rayo azotaba entre los árboles. A medio kilometro del rio, Kenji alcanza a sentir el temblor, y al instante sabe que los muchachos están cerca y que lo más seguro era que su hijo estuviese peleando. Efectivamente, intentando someter a la criatura, esta logra ganarle y Thala es arrojado contra los arboles partiéndolos en pedazos como consecuencia del impacto, Ameyali, preocupada por lo que pudiera sucederle al joven, se rusa a dar un paso más, aun a pesar de estar consciente de la descomunal fuerza que posee. Creyendo haber vencido, la bestia se vuelve a enfocar en Ameyali, pero, justo en ese momento, ante el asombro de la muchacha y del monstruo, Thala se pone de pie como si nada y sin darle oportunidad a reaccionar, aparece detrás de la criatura en fracción de segundos. Sabiendo bien que el chico no le permitiría llevarse a la joven así de fácil, el monstruo decide olvidarse de Ameyali por un rato para eliminar primero a Thala, quien, colocándose en guardia, le ordena atacar. Entonces , Kenji llega al campo de batalla y al observar la situación, trata de sacar a Ameyali de allí, mas ella, arrepentida por las cosas que le había dicho a Thala, se niega a dejar a su amigo con esa bestia, así que Thala le pide a Ameyali huir con Kenji lo más lejos posible y ponerse a salvo, por lo que, tomándola de la mano, el señor se la lleva corriendo de aquel lugar y, sin saber del peligro, optan por acortar camino a través de un área completamente abierta del bosque, provocando que fuesen más fáciles de ubicar para Yama-uba. Por su parte, Thala y la criatura comienzan a pelear al compas de los relámpagos dándose duro el uno al otro, de repente, un poderoso estruendo sacude nuevamente la tierra y Thala sale arrojado a mas de 30 metros contra los arboles tras recibir tremendo puñetazo por parte del monstruo, lejos de allí, Kenji y Ameyali iban corriendo cuando, de pronto, el señor se detiene y coloca a Ameyali detrás de él al advertir la presencia de la anciana. Armado con su vara en la mano y preparándose para defender a la joven, Kenji espera pacientemente el ataque de Yama-uba, quien, descendiendo frente a ambos al igual que un horrendo pájaro con ojos rojos, le pide al padre de Thala entregarle a Ameyali, mas él, se reúsa a dejar que la anciana se lleve a la muchacha, así que, esta, enfurecida, deja ir su ataque contra él. Cercas del rio, Thala, aun adolorido por el impacto del golpe, intenta ponerse de pie, pero, antes de poder lograrlo, la bestia lo sujeta bruscamente por el cuello y alzándolo con una sola mano, lo estrella de espaldas contra el suelo tratando de hacerlo pedazos, luego, alargando nuevamente su brazo, el joven es arrastrado 15 metros hasta impactar su cabeza contra una enorme piedra, para finalmente, regresando su brazo otra vez a su tamaño original, golpearlo varias veces en la cara colocándolo contra los troncos de los arboles que habían sido derribados durante la pelea, en ese momento, haciendo un gran esfuerzo, Thala alcanza a esquivar aquel puño y zafarse de las garras del terrible monstruo colocándose detrás de él, desgraciadamente, la criatura se deshace del joven impactándole un codazo en plena cara y como si se tratara de un bebe, lo vuelve a levantar y termina estrellándolo contra el suelo, Thala ya no se levanta esta vez así que la criatura se prepara para matarlo. Mientras tanto, Kenji hacia lo que podía peleando contra Yama-uba, sin embargo no sería capaz de resistir mucho tiempo más, la única esperanza radicaba en que Thala venciera pronto al monstruo y viniera a ayudarles, Ameyali, al ver como Thala y Kenji arriesgaban sus vidas para protegerla, comprendió entonces que había hecho mal en juzgar a Thala y que no importaba quien o lo que fuese ese muchacho, él la quería de verdad y jamás permitiría que nada la lastimara, así tuviera que sacrificarse. Una lágrima se deslizo por la mejilla de la joven y postrándose de rodillas suplico al cielo un milagro, en ese momento, lejos de allí, Thala, pensando en lo que podría ser de su amiga y de su padre si no lo intentaba, hace por levantarse nuevamente, había perdido bastante sangre, estaba débil y ya casi no tenia energías, valiéndose de esto, la bestia, sin perder más tiempo, deja ir con todas sus fuerzas su último golpe contra el joven, quien, repentinamente, logra ponerse de rodillas y bloquear el ataque con ambas manos sujetándole el puño, la criatura, ejerciendo más presión sobre su golpe, no alcanzaba a comprender como es que Thala había comenzado a recobrar sus energías repentinamente. De pronto, Thala se recupera sanando por completo de sus heridas y arroja a la bestia varios metros de un solo golpe, el monstruo, sin tener idea de lo que había pasado, no lograba entender como era eso posible. Thala se levanta del piso, y se le deja ir, golpe tras golpe, la criatura había comenzado a perder sus fuerzas, parecía como si el joven, en lugar de cansarse, hubiese ganado más fuerza de la que tenia al principio, bastante confundida respecto a su asombrosa recuperación, la bestia hace su último esfuerzo por vencerle, pero, Thala esquiva su golpe con demasiada facilidad agachándose, girándose y regresándole semejante puñetazo, todo, apenas en fracción de segundo. La criatura sale disparada tras una estruendosa onda de impacto quedando así, fuera de combate, poco a poco la lluvia empieza a disiparse, dejando solamente nubes grises en el cielo, Thala, consciente de que el monstruo ya no podía hacer nada, sale corriendo de inmediato a gran velocidad para ayudarle a Kenji y a Ameyali, llegando en segundos, el joven, al ver que su padre ya no podía defenderse más, interfiere en la pelea, golpeando a Yama-uba con una poderosa ráfaga de viento, la anciana, al enterarse de que fue Thala quien venció a su más poderosa criatura, decide dejarlo así y salir huyendo, al ver esto, Thala corre a donde Ameyali quien se encontraba llorando de rodillas, por lo que él le conforta diciéndole que ya todo acabo y que Yama-uba se ha ido y que no regresara jamás, no mientras el este para protegerla. Ameyali lo abraza con todas sus fuerzas y le pide perdón por las cosas malas que le dijo, a lo que el joven, acariciándola tiernamente, le responde que no hay nada que perdonar y que mejor lo olvide. Con Ameyali a salvo y Yama-uba derrotada, los tres se disponen a regresar a la cabaña, sin embargo, no todo ha terminado, pues Yama-uba logro escapar y ahora que sabe sobre la existencia de Thala y lo que puede hacer, su venganza será mucho peor, la hora de despertar a su amo ha llegado y con la sangre virgen de Tsukune y la luna llena en su punto máximo, la anciana obtiene éxito en traer a su amo de vuelta a la vida. La fría noche, obscura y tormentosa, habitaba en su alma, eterna, necesitaba alimentarse, después de siglos y siglos sin vida, era hora de salir y vagar entre las sombras, dando así, inicio a esta nueva historia de amor; El ángel sin luz.
Posted on: Sun, 11 Aug 2013 21:49:56 +0000

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