El sistema representativo se sirve del romanticismo de nuestra cultura. La idea de un Gandalf volviendo con ayuda al salir el sol, de un Superman luchando por nosotros (mientras en cada una de sus películas los humanos –comunes- no somos más que débiles cucarachas en comparación a él y sus enemigos –nuestros enemigos-, a él, que es la elite, lo mejor de nosotros proyectado fuera de nosotros debilitándonos), de Neo, el más libre entre los libres, de un Jesús sacrificándose por la humanidad y siendo todo lo noble que nosotros no nos animamos a ser. Vivimos esperando al Che, a Gandhi, o vaya a saber cuál otro representante nuestro, (los adventistas creen en la vuelta del mesías) dispuesto a hacer la revolución que nosotros no nos atrevemos. Estamos solos, entendámoslo, papá y/o mamá no vendrán a defendernos del compañerito abusivo, siempre es lo mismo: tenemos que enfrentarlo nosotros mismos. Creo que uno de los motivos por el cual dejamos nuestro poder de lado es por haber leído y escuchado tanto sobre poder que se usa solamente para destruir, incluso en nuestros días, se me hace que está la sensación de que somos destructivos o débiles Dios existe como nombre de aquellas maravillas que ignoramos y existen por una fuerza sobrenatural (o re natural), en su rol de Padre: estoy de acuerdo con que Dios a muerto, es mejor así
Posted on: Sun, 28 Jul 2013 20:29:31 +0000