Entrelíneas… ** Así se engaña a la vieja araña JACINTO ADRIANO GOMEZ El conflicto entre la Alianza Magisterial y el gobierno de Arturo Núñez Jiménez, sube de tono. Lejos de agudizar, dicho conflicto se agiganta, parece no tener fin; pareciera que el gobierno lo que quiere llevar al extremo, a que la cuerda tense más y cuando esté a punto de reventar por lo más delgado, ahora sí a intervenir para dar solución aún a costa de la cabeza del Secretario de Educación. Al menos eso es lo que evidencia el Jefe del Ejecutivo cuando abordado por los medios de comunicación respecto al tema, dijo no tener comentario alguno y sólo se concretó a responder “en su momento personalmente les daré información al respecto”. Todo parece indicar que el gobernador Núñez, tiene un Plan B. Sí, una estrategia bien cimentada, un as bajo la manga que le permita alzarse con el triunfo, demostrando al verdadero Arturo Núñez Jiménez, que todo Tabasco quiere ver; a ese animal de la política con colmillo retorcido, formado en la urbe capitalina, hecho al puritito estilo de un Fernando Gutiérrez Barrios, en su mejor momento. Y es que en medio de un “tuya, mía, te la presto”, surge una interrogante. Dicho Plan B, de casualidad consiste en matar dos pájaros de un tiro, es decir, solucionar el conflicto magisterial tumbando la cabeza de Rodolfo Lara Lagunas, para que los maestros regresen a las aulas a trabajar bajo nuevas negociaciones, sin más chantajes, sin dietas millonarias y otras prebendas a las que estaban acostumbrados, y de paso, quitarse de encima una de tantas piedritas impuestas en el calzado por Andrés Manuel López Obrador, así como romper todo compromiso que haya podido existir con Morena? La cuestionante puede que sea descabellada, pero no imposible en este oficio de la política, donde el “arte es comer estiércol y sin hacer gestos”, como dijera el maestro Jesús Reyes Heroles. José Fouché, el genio de la tenebra en tiempos de la revolución francesa, dejó al mundo entero todo un legado de lo que es el arte de la política y sus oscuros recovecos. No es descabellado que el propio gobierno haya fraguado todo este conflicto magisterial para después, acreditarse un diez por haber puesto solución a este movimiento en el que nuestros escolapios son los únicos afectados, aparte de nuestros bolsillos. A los tabasqueños en tiempos de Granier Melo, nos engañaron. Dijeron que la gran inundación del 2007 fue obra de la naturaleza, pero expertos aseguraron en su momento, que todo fue provocado. Otro ejemplo fue “Manuelito”, el niño chiapita humillado por un empleado de reglamentos, tema que dio vuelta al mundo, pero que tenía como objetivo, crear una cortina de humo para desviar la atención de la sociedad a la triste realidad que vive el estado en ser primer lugar en inseguridad y en desempleo según cifras del INEGI, ello aunado a las pifias unas tras otra del gobierno, un Congreso local sin materia gris, etcétera, etcétera. En Tabasco, ha habido émulos de Fouché, pero el más recordado es Don Manuel Llergo Heredia, que en tiempos del gobernador Enrique González Pedrero, se convirtió en una especie de “bombero atómico” para eso de apagar fuegos, pues desactivaba en un dos por tres, conflictos que él mismo creaba para poner en jaque al gobernador. Todo parece indicar que la estrategia es esa, y que el Rey Arturo, quede como el gran héroe; que con mucha sutileza se quite de encima, rémoras sembradas por quien lo llevó al poder, es decir, romper con AMLO sin exhibirse, utilizando el viejo truco de “así se engaña a la vieja araña”… Pero veremos dijo un ciego y lo llevaban jalando. Al tiempo. Y al final: la lista de comunicadores exhibida en las redes sociales, no es nada comparado con los jugosos negocios que hay entre Dolores Gutiérrez y “Chencho” Díaz Trinidad. Esos si son negocios que valen oro, es tema pendiente y salud aunque mal paguen ellas.
Posted on: Tue, 27 Aug 2013 20:53:31 +0000
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