Este es el retrato de una gran mujer y, muy atractiva, de irresistible belleza, poseedora de muchos encantos. De tez blanca, cabello oscuro, expresivos ojos marrones, una nariz pequeñita redondeada y sin hacer ejercicios lucía una hermosa silueta. Nació en Iquitos, de madre brasileña y padre peruano. Desde muy pequeñita quedó huérfana de madre quedando al cuidado de su padre y con su hermanito recién nacido. Fueron dos hermanitos de aquel matrimonio Cárdenas López. Por circunstancias de la vida fue llevada a Lima siendo todavía una niña y, jamás volvió a ver a su padre. Llevándose recuerdos de su único hermanito de padre y madre y de que su padre volvió a unirse a otra señora y tenía más hermanitos. No supo más de ellos hasta hace unos años atrás que un hermano de padre deseoso de conocerla llegó hasta ella, contándole muchas cosas de su familia. Trabajó mucho, sufrió mucho. Dios compensó a tanto sufrimiento y soledad, de familia, con la enorme dicha de convertirla en la madre de catorce hijos, uno de ellos fallecido ya, muchos nietos y biznietos. Todos sus hijos la aman. Ella es mi abuelita, la amo y es una gran señora, la señora Mery Cárdenas López. Tengo la fortuna de ser su nieta y de haber nacido el mismo día de su cumpleaños. Mi gran abuelita que en este junio, 5, cumplió 80 años y todavía sigue con vitalidad y entusiasmo.
Posted on: Sun, 20 Oct 2013 18:15:43 +0000
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