FATUM6 Los días fueron transcurriendo y Víctor, consciente de la importancia que tenía el superar la maldita Oposición dedicaba más tiempo del previsto a verbalizar los temas; así repetía una vez tras otra los mismos y por la noche los reproducía escuchándose a sí mismo vomitarlos por el reproductor mp3….!Más no puedo hacer! Se decía. Sus Padres conocieron la noticia cuando estaba previsto y al fin entendieron que no era conveniente lanzar las campanas al vuelo antes de hora, que al final, lo único que contaba era si su hijo superaba la prueba Oral, prueba que entrañaba una dificultad considerable ya que tenía que competir con lo mejor; con el selecto grupo de elegidos entre los más de cuatrocientos aspirantes que iniciaron la andadura…!No se trata de hacerlo bien! Repetía hasta la saciedad a sus Padres, se trata de estar por encima del resto y en el mejor de los casos, los demás tenían , como mínimo, su nivel, con el añadido de que el ochenta por ciento de los mismos era el segundo o tercer año que se presentaban. ¡Por fin las cosas habían quedado claras! Y sus Padres comprendieron perfectamente que una cosa era lo orgullosos que podían sentir de su hijo y otra bien distinta el menospreciar al resto de opositores que debían competir con él. Llegada la víspera, y como en las anteriores ocasiones, Víctor tomó el Tren de las nueve de la mañana que le llevaría a Madrid. A las diez de la mañana del día siguiente comenzaban las pruebas orales y al ser individuales se había facilitado un listado por orden alfabético con lo hora aproximada de la exposición , siendo la de Víctor sobre las cuatro de la tarde del primer día; a las tres y media ya estaba en el lugar indicado; preguntó a los compañeros allí presentes y le comentaron quien era el que estaba examinándose….faltaban dos antes que él y siendo que cada intervención no solía durar menos de una hora se fue a la Cafetería a tomarse una infusión de manzanilla y así matar el tiempo de la mejor forma posible para que los nervios no hicieran mella en él. Es curioso como el tiempo, una medida inexorable y exacta, transcurre subjetivamente dependiendo de la situación en que nos encontremos, para Víctor cada minuto tardaba en transcurrir cinco como mínimo. Esa hora y media se le hizo interminable. Cuando llegó al Hall, el opositor que le precedía hacia apenas diez minutos que había entrado en la Sala por lo que hasta pasados cincuenta minutos, como mínimo, no le tocaría su turno. En ese momento una sensación extraña invadió a Víctor….nervios, ansiedad, lagunas mentales ( no recordaba absolutamente nada de los temas), desazón…..por un instante estuvo a punto de abandonar al Hall y dar la Oposición por perdida, pero tras unos ejercicios de respiración para relajarse, se fue al baño, se lavó la cara con agua fría y regresó a la zona donde debía esperar su turno….se sentía como un condenado a la silla eléctrica en espera de su ejecución; poco a poco se fue relajando….” A fin de cuentas lo peor que puede pasarme es que no recuerde nada y tenga que abandonar antes de tiempo” pensó, “Lo único cierto es que ocurra lo que ocurra esto de las Oposiciones es un auténtico suplicio, pero ya queda poco para finalizarlo”. Cuando más absorto estaba en sus cavilaciones se abrió la puerta de la Sala de la que salió el opositor que le precedía. ¿Cómo te ha ido? Le pregunto - Fenomenal, me ha tocado el tema que mejor llevaba preparado. A los tres minutos salió un Miembro del Tribunal y pronunció sus dos apellidos y el nombre; Víctor cual animal camino del Matadero se dirigió a la Sala. Le hicieron sentar en una silla frente al estrado donde detrás de una larga Mesa permanecían sentados los cinco Miembros del Tribunal. - Buenas tardes señor Salcedo, le dijo el Portavoz; le deseamos suerte y tranquilidad, ahora debe extraer una bola de la bolsa, nos la entregará, le diremos a que número de tema pertenece y dispone de cincuenta minutos para desarrollarlo con una prórroga de diez, por si desea extenderse mas. ¿Alguna duda? - Ninguna - Bien, pues procedamos. Le acercaron la bolsita, extrajo una bola y sin mirarla la entrego al componente del Tribunal quien dijo “Por favor, desarrolle el Tema número siete”. Una sensación de alivio invadió a Víctor, el Tema era de los que mejor había preparado, así que comenzó a declamarlo con dominio y precisión. A los cincuenta y siete minutos finalizó. - Muchas gracias,Señor Salcedo; dentro de cuatro o cinco días aparecerá en el Web de Internet la relación de los Opositores que han conseguido plaza de Juez. Víctor abandonó la Sala pletórico, estaba convencido que la Plaza tan deseada estaba cada vez más cerca, ni en sus mejores sueños hubiera imaginado que su exposición hubiera sido tan brillante. Hizo una llamada desde el móvil a Vero, le comento que todo había ido bien, que llamara a sus Padres y les dijera que aunque tarde, llegaría esa misma noche. Tomó un Taxi y se dirigió a la Estación de Atocha.
Posted on: Sat, 20 Jul 2013 05:55:12 +0000
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