FUENTE: WIKIPEDIA Marcel François Lefebvre Arzobispo-Obispo - TopicsExpress



          

FUENTE: WIKIPEDIA Marcel François Lefebvre Arzobispo-Obispo emérito de Tulle Fundador y 1er Superior General de la FSSPX Obispo de Tulle Predecesor Aimable Chassaigne Sucesor Henri Clément Victor Donze Ordenación 21 de septiembre de 1929 por Achille Liènart Consagración episcopal 18 de setiembre de 1947 por Achille Liènart Otros títulos Ver lista[mostrar] Nacimiento 19 de noviembre de 1905 en Tourcoing Fallecimiento 25 de marzo de 1991 en Martigny (85 años) Et nos credidimus caritati Marcel-François Marie Lefebvre C.S.Sp. (Tourcoing, Francia, 29 de noviembre de 1905 - Martigny, Suiza, 25 de marzo de 1991), arzobispo católico francés conocido por sus posturas integristas contrarias a la enseñanzas del Concilio Vaticano II. Tras una dilatada carrera como misionero espiritano en el África francófona, tomó el liderazgo del movimiento ultramontano europeo, dentro de la Iglesia católica, enfrentándose con sus compañeros en el episcopado y llegando a desobedecer al papa Juan Pablo II por las reformas doctrinales y disciplinares introducidas en la Iglesia tras el Concilio Vaticano II que, a su parecer, rompían con la tradición bimilenaria de la Iglesia católica e impulsaban el modernismo dentro de su doctrina, acto condenado[cita requerida] por Pío XNota 1 y Pío XII.Nota 2 . En noviembre de 1970, Lefebvre fundó la Hermandad Sacerdotal San Pío X y en 1988, contra la prohibición expresa de Juan Pablo II, Marcel Lefebvre consagró cuatro obispos. Inmediatamente la Congregación para los Obispos vaticana emitió un decreto declarando que la consagración era un acto cismático y que, en consecuencia, tanto Lefebvre, como otros obispos participantes en la ceremonia, habían incurrido en la excomunión automática,1 2 de acuerdo con el derecho canónico católico. Marcel Lafebvre nació en Tourcoing, una ciudad francesa cercana a la frontera belga, el 29 de noviembre de 1905. Hijo de un matrimonio piadoso formado por un fabricante textil llamado René Lefebvre y su mujer Gabrielle, Marcel es el tercero de ocho hermanos, cinco de los cuales entraron en religión:4 René y Marcel, con los padres espiritantos, Jeanne, en las religiosas reparadoras, Bernadette, futura fundadora de la hermanas de la Hermandad San Pío X y Christiane con el carmelo reformado. Marcel cursó estudios en el Colegio del Sagrado Corazón de Tourcoing. Padeció la invasión alemana de su ciudad durante la Primera Guerra Mundial. Su padre debió huir en 1915 por ayudar a los prisioneros ingleses y franceses a pasar las líneas, por lo que la familia sufrió mucho su ausencia agravada con la escasez de bienes básicos. Sacerdote, religioso y obispo[editar] La familia Lefebvre en 1908. El futuro obispo Marcel está situado a la izquierda. Cursó sus estudios de Filosofía y Teología en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma. Fue ordenado sacerdote en 1929 por Achille Liénart, arzobispo de Lille. Habiendo madurado en él la idea misionera y siguiendo los pasos de su hermano René, se unió a la Congregación del Espíritu Santo. Tras su noviciado, de sólo un año de duración, hizo su profesión religiosa el 8 de septiembre de 1932. Posteriormente fue enviado a África, más concretamente a Gabón, donde se desempeñó como misionero en diversos lugares. En 1939 regresó a Francia, pero durante el trayecto se declaró la Segunda Guerra Mundial. Al poco de desembarcar fue movilizado y enviado, esta vez como soldado, a África. Así con el tiempo justo para despedirse de su padre, al que no volvería a ver: arrestado en abril de 1942 por pasar información a Gran Bretaña, murió en el campo de concentración de Sonnenburg. Episcopado[editar] Pío XII lo nombró obispo de Dakar, cargo que ejerción entre 1948 y 1962. El mismo Pio XII lo elevó posteriormente al rango de arzobispo y lo designó legado apostólico para toda el África francófona. A la muerte de Pío XII cesó como legado apostólico conservando el arzobispado de Dakar. Con motivo de la promoción del clero nativo que impulsó Pío XII, Lefebvre dejó la cátedra de Dakar a su discípulo Hyacinthe Thiandoum. Las presiones de los obispos y cardenales franceses obligaron al papa Juan XXIII a dar a Lefebvre una pequeña diócesis[cita requerida], la diócesis de Tulle, en lugar de un arzobispado aunque reconociéndole su dignidad de arzobispo. Las otras condiciones fueron que no podía pertenecer a la asamblea de los cardenales y arzobispos franceses (germen de la futura Conferencia de obispos de Francia) y que estas condiciones no creasen un precedente o una costumbre para los futuros obispos de Francia.5 Concilio Vaticano II[editar] En calidad de Superior General de los Padres Espiritanos, fue llamado por Juan XXIII para formar parte de la Comisión Central Preparatoria del Concilio Vaticano II. Durante el Concilio, fundó junto a Dom Antonio de Castro-Mayer, obispo de Campos (Brasil), Geraldo Proença Sigaud, obispo de Diamantina (Brasil) y Carli, obispo de Segni (Italia) el Cœtus Internationalis Patrum, al que adhirieron 250 obispos, con el objeto de defender en el aula conciliar la doctrina y disciplina tradicional de la Iglesia. Esto le valió la oposición y enemistad con los obispos franceses y germanos. La Fraternidad Sacerdotal San Pío X[editar] Artículo principal: Fraternidad Sacerdotal San Pío X. Después de renunciar a su cargo de Superior General de su congregación en 1968 y a iniciativa de un grupo de seminaristas descontentos con la orientación que habían tomado los seminarios a los que concurrían, en particular, el Seminario Francés de Roma, a cargo de los Padres Espiritanos, fundó en 1971 en Friburgo (Suiza), con la autorización del obispo del lugar, Mons. François Charrière, la Fraternidad Sacerdotal San Pío X. La casa de formación que primero funcionó en la Rue de la Vignettaz fue posteriormente trasladada a Écône (cantón del Vales, Suiza), donde la congregación tiene su principal instituto de formación sacerdotal. Debido a la creciente concurrencia de jóvenes deseosos de recibir una formación tradicional en el sacerdocio, rápidamente se granjeó la enemistad del episcopado francés, que llamaba al Seminario de Écône «seminario salvaje». Vencido el término de 5 años, durante el cual la existencia de la congregación es puesta a prueba de acuerdo con las normas canónicas, el sucesor de Mons. Charrière en la sede de Friburgo, Mons. Pierre Mamie, tras recibir una solicitud de Roma, no renovó el permiso para que la misma subsistiera, acto que posteriormente fue refrendado por una comisión de 3 cardenales nombrada por Pablo VI. En ese estado, Lefebvre interpuso un recurso suspensivo ante el Tribunal de la Signatura Apostólica, pero su presidente, el cardenal Dino Staffa, se negó a darle trámite respondiendo -según parece- a un pedido del Cardenal Jean-Marie Villot, entonces Secretario de Estado de Pablo VI. Dado que el recurso suspensivo de supresión estaba pendiente, Lefebvre consideró que, a falta de pronunciamiento sobre un recurso suspensivo, la medida de suprimir su congregación quedaba pendiente de resolución, y por lo tanto, su congregación continuaría existiendo hasta tanto la Santa Sede no se expidiese sobre el fondo del asunto. Con ese razonamiento, no secundó el pedido que se le hiciera de cerrar el seminario y dispersar a los seminaristas, a los cuales prosiguió formando hasta las puertas del sacerdocio. En 1976 recibió una monición canónica para que no procediera a la ordenación de la primera tanda de jóvenes formados en Écône, la cual desoída, hizo recaer sobre él la suspensión a divinis el 22 de julio de 1976. El 29 de agosto de 1976, Mons. Lefebvre celebró la Misa de Lille6 donde declaró: "no se puede dialogar con los masones o con los comunistas, no se dialoga con el diablo!"7 Excomunión[editar] Consolidándose la situación en el tiempo, y por interposición de otros factores, tal el caso de la reunión ecuménica de Asís de 1986, Lefebvre, ya octogenario, avizora que se le acaba el tiempo para nombrar un sucesor en el episcopado que garantice la prosecución de su obra de sostén de la Tradición. Tras una serie de reuniones con autoridades romanas, durante cuyo transcurso se le aseguró que el Papa Juan Pablo II no se oponía, en principio, a darle un sucesor, se bosquejó un proyecto de acuerdo. Pero tan pronto como estampó su firma en el documento, el entonces cardenal Ratzinger le envió un subalterno para solicitar de él una carta pidiendo perdón al Papa por lo que había hecho. Tras su negativa a hacerlo, en el entendimiento que no se ha de pedir perdón por «hacer lo que debe hacerse», se desdice del acuerdo y poco después, remitiéndose a aquella seguridad que se le había dado de que el Papa no se oponía a darle un sucesor, decide consagrar 4 obispos escogidos de entre miembros de su congregación: los padres Alfonso de Galarreta (hispano-argentino), Bernard Fellay (suizo), Richard Williamson (inglés, converso del anglicanismo) y Bernard Tissier de Mallerais (francés). Los puntos centrales de la controversia entre Lefebvre y el Vaticano son esencialmente cuatro: La protestantización del nuevo ritual de la Misa, el ecumenismo, la libertad religiosa y la colegialidad. Lefebvre fue excomulgado pública y formalmente por el papa Juan Pablo II, el cual en su carta Apostólica "Ecclesia Dei", escrita el 2 de julio de 1988 en forma de motu proprio, decía: "Al realizar ese acto, a pesar del monitum público que le hizo el cardenal Prefecto de la Congregación para los Obispos el pasado día 17 de junio, el reverendísmo mons. Lefebvre y los sacerdotes Bernard Fellay, Bernard Tissier de Mallerais, Richard Williamson y Alfonso de Galarreta, han incurrido en la grave pena de excomunión prevista por la disciplina eclesiástica" (Código de Derecho Canónico, can. 1.382). La posición oficial de la Iglesia católica en lo referente a la situación canónica de la Fraternidad San Pío X, recogida en las declaraciones del cardenal Darío Castrillón Hoyos, prefecto de la Sagrada Congregación para el Clero y presidente de la Comisión Pontificia Ecclesia Dei, en entrevista a la revista 30 Giorni,8 es que «no se trata de un cisma formal». De igual manera, en entrevista concedida al canal 5 de Italia el 13 de noviembre de 2005 indicaba: No se puede decir en términos correctos, exactos y precisos, que existe un cisma. Hay una actitud cismática en el hecho de consagrar obispos sin mandato pontificio. Ellos están dentro de la Iglesia. Existe únicamente el hecho de que una total, más perfecta comunión está faltando —como quedó afirmado durante la reunión con el Obispo Fellay— una comunión más plena, porque la comunión existe.9 El hecho de que no exista cisma formal no significa que las excomuniones no sean válidas, sino que no existe la intención de separarse de Roma, intención que es necesaria para que se declare un verdadero cisma. La posición de la Fraternidad San Pío X ha sido siempre de obediencia y sujeción al Romano Pontífice en todo lo que es magisterio infalible, aunque resisten las orientaciones pastorales que se han realizado después del Concilio Vaticano II, cosa que por sí misma no constituye negación de ningún dogma de fe. El problema entre la Santa Sede y la Fraternidad San Pío X es, por tanto, de materia disciplinar, no dogmática. Marcel Lefebvre en una visita a una de las capillas de la Fraternidad San Pío X, en Córdoba, Argentina Con todo, las excomuniones a los cuatro obispos ordenados por Lefebvre sigueron en pie hasta el 24 de enero de 2009, cuando el papa Benedicto XVI levantó la excomunión a los cuatro obispos. Benedicto XVI, según un comunicado del Vaticano, decidió levantar la excomunión a los cuatro obispos tradicionalistas "tras un proceso de diálogo" y después de que el pasado 15 de diciembre el obispo Bernard Fellay SPX, en su calidad de Superior General de la congregación, enviase una carta al Vaticano, en nombre propio y de los otros tres prelados, en la que le expresaba el deseo de permanecer fieles a la Iglesia romana y al Papa.10 Marcel Lefebvre falleció el 25 de marzo de 1991, durante la Semana Santa. Sus restos se hallan inhumados en el Seminario de Écône, bajo la leyenda que él mismo deseaba fuese escrita sobre su tumba: Tradidi quod et accepi ("he transmitido lo que recibí"). Su obra y escritos[editar] En opinión de Monseñor Lefebvre, hay tres posturas que se abren paso dentro del catolicismo a través del Concilio Vaticano II y que hasta ese momento no sólo contradecían la doctrina uniformemente profesada por la Iglesia católica, sino que incluso estaban condenadas: El ecumenismo: todos los credos —incluso los no cristianos, animistas o paganos— son iguales y agradan al único Dios, principio base de la Reunión de Asís 1988 y sus secuelas. El conciliarismo: La Iglesia no es ya una monarquía, sino una democracia donde la voluntad de la mayoría gobierna a través de un estado de «concilio permanente». La libertad religiosa: La Iglesia abandona su bimilenaria vocación misionera y desalienta en sus miembros la labor proselitista, por lo que se recomienda a los potenciales conversos a permanecer en su fe. El 21 de noviembre de 1974 hace una declaración Nota 3 que puede considerarse[¿por quién?] como el manifiesto que guio a la hermandad.[cita requerida] Notas
Posted on: Fri, 12 Jul 2013 04:39:33 +0000

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