Han llamado a un hombre para que vaya a revisar su declaración de impuestos. Cuando entra en la oficina, el inspector de AFIP le dice : - Pues vera, es que a usted le ha salido negativa, y sin embargo en nuestros archivos consta que usted tiene quince pisos en varios edificios de Capital Federal y numerosas acciones de todo tipo, así que pensamos que tiene que haber algún error. - No, que va, señor inspector, lo que ocurre es que todo ese dinero me lo he ganado apostando. - Apostando ? Venga ya ! Pero si el año pasado se compro usted un yate que ni el ex presidente !lo ha comprado.- - Que si, que si, que lo he ganado todo apostando. Mire, se lo explicare con un ejemplo. Le apuesto cincuenta mil pesos a que me muerdo un ojo. - Pero hombre, eso es imposible ! - Que si, venga, apuesta ? - Pues bueno, ganare cincuenta mil pesos. Entonces el hombre, se saca un ojo de vidrio y lo muerde, así que el inspector le paga los cincuenta mil pesos. - Bueno, esto me parece muy bien, usted se puede ganar un dinerillo de vez en cuando con este truco, pero no pretenderá usted justificarme esta cuenta bancaria de quinientos millones de pesos con una cosa así. - Ya, pero es que hago muchas apuestas y... mire, por ejemplo, le apuesto cien mil pesos a que me muerdo el otro ojo. - Pero hombre, eso si que es imposible, usted no es ciego, así que no puede tener otro ojo de vidrio; pero si quiere, yo voy con la apuesta. Entonces el hombre se saca la dentadura postiza, se la lleva hasta el otro ojo y se lo muerde. Y el inspector le paga los cien mil pesos. - Pero mire, de todas formas yo no me creo que con estas cosas usted haya podido construir estas urbanizaciones en Buenos Aires; usted no puede ganar tanto a base de apuestas. - Que si, de verdad, todo depende de la cantidad de dinero que apostemos. Por ejemplo, le apuesto doscientos mil pesos a que tengo los huevos cuadrados. - Bueno, eso si que ya es demasiado, nadie puede tener los huevos cuadrados, así que le acepto la apuesta. - Pues toque, toque. Total, que el inspector se los toca y resulta que son normales y mas bien redondos, así que el hombre le paga los doscientos mil pesos al inspector. - Pues ve lo que le digo ? Usted no puede ganar todo ese dinero haciendo apuestas, entre otras cosas porque de vez en cuando tiene que perder. - Ya, pero es que si se compensa... por ejemplo, ve usted a toda esa gente que se esta muerta de risa al otro lado de la ventanilla ? Pues me he apostado con ellos un millón de pesos a que usted me tocaba los huevos.
Posted on: Wed, 14 Aug 2013 23:03:49 +0000