Hay quienes no quieren la paz. Apoyados en las tendenciosas declaraciones del coreano Ban Ki-moon, en las que afirmó que “sin lugar a dudas se utilizaron armas químicas contra la población”, sin señalar directamente al Gobierno de la acción, pero sí punteando a Bashar Al Assad como responsable de actos en contra de la humanidad, lo que ciertamente no le consta. Pero hubo más, pues el tendencioso -o comprado, vaya Usted a saber- secretario general de la ONU, agregó que “La misión de expertos enviados, confirmó, de forma inequívoca y objetiva, que se han utilizado armas químicas en Siria”. Y dijo más: “Lo que es un crimen de guerra y una violación al protocolo de 1925, que prohibió el armamento químico después de su uso intensivo en la Primera Guerra Mundial (1914-1919)”. Y lo dijo sin que ninguno de los presentes en la conferencia de prensa se animara a preguntarle su opinión acerca del napalm utilizado por los EEUU en Vietnam y Camboya; ni por el Fósforo Blanco que lanzó el orate de Netanyahu en contra de los palestinos. Y por si fuera poco todo lo anterior, Ban todavía agregó maliciosamente: “Corresponde a otros decidir cómo llevar este asunto más lejos para determinar responsabilidades. Todos podemos tener ideas propias al respecto, pero diría simplemente que ello fue un grave crimen y que los responsables deben ser llevados a la justicia tan pronto como sea posible”. El caso es que en la Casa Blanca, literalmente ya no saben qué hacer para poder invadir Siria, a tal grado que EEUU, GB y la “socialista” Francia, volvieron a señalar de nueva cuenta al Gobierno sirio como responsable del ataque a la población civil con el venenoso gas sarín, sin tampoco aportar pruebas de ello. Y todo esto, a pesar de que hay una entrevista de la televisora siria, acotada en este mismo espacio el día de ayer, en el que un individuo confeso, relató cómo le había hecho para transportar el gas sarín desde Turquía, y cómo lo habían lanzado sus compañeros opositores en las afueras de Damasco. Dejando en claro que debe de haber un gran interés por parte de los banqueros sionistas para invadir y destrozar aún más a la milenaria nación, que ya existía como tal XIII Siglos antes de que Roma fuera fundada. De tal suerte que hasta la GB, cuyo Parlamento tajantemente se opuso a intervenir en una nueva guerra, anda de nuevo alborotada con la posibilidad de meterse en lo que no le importa; cuando históricamente ellos han perpetrado masacres aún más grandes. A todo esto, Rusia reiteró su apoyo a Siria y advirtió que “Las intenciones de Washington y sus aliados pueden frenar la iniciativa diplomática”. Parece inconcebible pensarlo, pero es totalmente cierto que hay quienes no quieren la paz. Y son los que ni ponen el pecho por delante, ni corren mayor peligro; o sean los cobardes.
Posted on: Wed, 18 Sep 2013 13:29:40 +0000
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