Hay veces que Dios cambia nuestras agendas y no entendemos pero luego vemos el resultado y solo podemos decir Gracias Señor! Ayer tenía mi agenda trazada, salía de la oficina, iba a la Funeraria (a estar un ratito con una amiga, ya que una de sus tías pasó a morar con el Señor) y luego iba a mi clase de discipulado en la Iglesia. Ok aquí Dios cambió algo, no pude salir a tiempo de la oficina y tuve que seguir directo a la Iglesia, me excusé con mi amiga pues no podía llegar, pero Dios tenía otros planes. Inquietó mi corazón para que me olvidara de mi cansancio físico y fuera a la Funeraria luego de la Iglesia. Qué será lo qué Dios se trae? Me pregunté. Ya en la funeraria, en la capilla, Dios me inquieta con un niño de aproximadamente 10 años quien está sollozando frente al féretro de quien en vida fue su abuelita. Miré alrededor y todos estaban muy entretenidos hablando y mi corazón se duele por aquel niño, a quien no conozco, nunca lo había visto pero Dios me hizo identificarme con su dolor. Me senté al lado de Luis (así me dijo llamarse) le hablo del Dios consolador (atributo de Dios que conocí hace 7 meses cuando mi papá murió). Luis llora sin consuelo; me permites orar por ti? Asintió con su cabeza, tomo su pequeña manita entre las mías y oramos, Luis comienza a calmarse, la paz del Señor nos sobrecogió de una manera hermosa. Me permites date un abrazo? Volvió y asintió, lo abracé, le dí un beso y me comprometí a continuar orando por él. Dios cambió mi agenda y le doy gracias por eso, salí de allí ”pompia”, Dios no deja de sorprenderme, un privilegio poder seguir Su agenda para mi vida. Todo obra para bien!!!
Posted on: Fri, 27 Sep 2013 19:13:50 +0000
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