Hubo un tiempo, en una oficina del ejercito, muchas de las personas que trabajaban ahí dejaron de bajar por el ascensor, puesto que desde que el edificio fue ocupado por una de las áreas ejercito, en el ascensor sucedían cosas extrañas... las luz parpadeaba constantemente, sin previo aviso el ascensor se paraba a mitad del un piso y otro, a veces cuando estaba en movimiento, este empezaba a temblar fuertemente con intenciones de desprenderse de la polea que lo sugetaba, mientras una especie de grito gutural de una voz no humana, se escuchaba en todo el piso. Los militares y civiles que trabajaban en aquel edificio, nunca decidieron hacer un exorcismo ni llamar a un especialista, ya que, el honor del ejercito no se podía doblegar ante cosas tan banales como jugar con espiritus y fantasmas... Es aquí donde empieza nuestra historia... Un día, un alumno de una escuela "x", llegó a hacer su práctica profesional de contabilidad a aquel edificio. Desde el primer momento fue adevertido por una compañera de departamento sobre los sucesos del ascensor, y entonces este, que tenía respeto de estos fenómenos, decidió no usar el ascensor y usar las escaleras desde un principio. Todos los días repetían el mismo trayecto hacia un edificio cercano a la hora del almuerzo, ya que en él se encontraba el camino, y siempre que iban ahí, lo hacían por las escaleras. Un día, el alumno en practica decidió no ir a almorzar ya que se encontraba un poco mal del estomago, quedándo solo así en el edificio. Al minuto de estar sin compañía, cosas extrañas empezaron a suceder. Los computadores se apagaron y encendieron automáticamente y las luces parpadeaban, y la impresora se activó automáticamente, dejando pasar papeles, pero cuando salía, salían en blanco. Algo nervioso y con ganas de salir de ahí, decidió ir a comprar a un negocio, algo pequeño para comer. Al salir de la oficina, ésta daba a una puerta de vidrio granulado el cual solo dejaba ver las sombras al otro lado, este se mantenía siempre cerrado a todo el mundo por seguridad del ejercito, y solo se permitía el paso al deslizar una tarjeta de identificación por un dispositivo en la ranura... Al pasar por aquella puerta, vió al otro lado una sombra desfigurada, al parecer de vestimenta blanca y cabellos largos, rojos y rizados. Al abrir la puerta, no había nadie del otro lado. En este pasillo se encontraba el ascensor abierto, y al lado una ventana tambien abierta, dejando entrar aire frío, el cual cruzaba y reposaba en la espalda del estudiante, probocandole escalofríos. En la escalera se escuchaban pasos pesados que subían, y el ascensor permanecía abierto como invitandolo a pasar. No tenía muchas opciones. O se enfrentaba a lo que venía subiendo por las escaleras, o decidía entrar en el ascensor. Entró al ascensor... Al entrar en el ascensor, de inmediato sintió el aire pesado. Pero nada más extraño sucedió, así llegó al primer piso sin novedades... Desde aquel día el joven le tomó miedo a las escaleras, tomando todos los días el ascensor. Un día le preguntó a sus compañeros que, que era lo que estaba en el ascensor supuestamente, que los asustaba tanto, todos dijeron que no sabían ya que pasaba antes de que ellos llegaran al edificio, pero que sin duda no era humano. Tres días pasaron y la impresora de la oficina se activó sola. Empezaron a salir hojas en blanco a gran velocidad, los compañeros algo inquietos desenchufaron la impresora para que parara... Se detuvo en la última hoja... Está decía: "mañana iré a por ustedes, ¿Quieren jugar?..." Las mujeres de la oficina se asustaron, los hombres se hecharon a reir creyendo que era una broma de alguien, el alumno sintió un escalofrío por su espalda... Al día siguiente al llegar, el alumno tomó el ascensor como de costumbre para llegar a su oficina al cuarto piso... el ascensor se detuvo y las luces empezaron a parpadear, se acercó para mirar el reflejo del marco de bronce de la puerta del ascensor para mirar detrás de él... no había nada... pero sentía como unas manos se undían en sus hombros... En el transcurso del día no ocurrió nada mas anormal, hasta que al mediodía sus compañeros lo enviaron a hacer unos trámites bancarios. Sucedió lo mismo que el día anterior, la sombra a traves de la puerta, los pasos en la escalera, la ventana y el ascensor abiertos... El alumno decidió nuevamente tomar el ascensor... marcó el botón del primer piso, sintió un peso sobre sus hombros, miró por el reflejo del marco de la puerta del ascensor y vió como por detrás de él unas manos se asomaban por sus hombros... unas manos huesudas, de uñas puntiagudas y largas, con dedos llenos de manchas epáticas de color verde... miró de golpe atrás aterorizado, pero las luces se apagaron... mientras intentaba gritar el ascensor empezó a temblar como si estuviera aconteciendo un terremoto, y su grito fue ahogado por un gruñido de ultratumba... el alumno despertó a los pies del ascensor. Lo primero que percibió fue el sonido de la puerta abriendo y cerrandose, luego se percató de un dolor punzante en el pié... pues este lo tenía casi completamente destrozado, ya que obstruía el cierre de la puerta del ascensor, y este al cerrarse chocaba con el pié del estudiante... salió del ascensor inmediatamente a rrastras, tan rápido como pudo y lanzó un grito de dolor al ver su pierna quebráda... más tarde notaría ke sus hombros ardían como si los hubieran quemado recientemente... El alumno miró a su alrededor y vió que estaba en el cuarto piso, el piso de su oficina. Se paró como pudo y cojeando trató de entrar en la oficina en busca de ayuda... la puerta que siempre estaba cerrada al publico se encontraba abierta... Entró rápidamente pidiendo:"AYUDA!!!"... Pero nadie contestó... miró por todas partes para encontrar en su avace charcos de sangre, con algunas partes de cuerpos cercenadas en su camino... El alumno horrorizado, cojeó lo mas rápido posible hasta su oficina en busca de sus compañeros... Todos estaban muertos... Algunos decapitados, sentados en su silla, con su cabeza en su regazo y expresion desforme... otros desollados, con su piel y sus ropas al lado suyo... y el capitán de la oficina se encontraba con sus propios brazos metidos casi completamente a traves de sus ojos, con la cavidad ocular completamente expandida y destrozada... el alumno quizo gritar... pero derrepente sintió algo en su espalda... mientras una voz espectral decía:"Ahora te toca jugar a tí"... Sus ojos se abrieron por el espanto y fue la ultima vez ke vió la luz del sol... A la mañana siguiente el departamento de policia entró en el edificio reconociendo todos los cadáveres... cuando entraron en la oficina del alumno en práctica, luego de ver la horrible escena, sintieron un ruido en la oficina del capitán... entraron para ver al alumno colgado con una soga al cuellos, los ojos cocidos con hilo negro, y la boca abierta dejando entrever que había sido completamente rellenado con algodón mientras estaba vivo, rebentando todos sus órganos por dentro... el caso jamás fue publicado a la prensa... Fuente: misabueso
Posted on: Mon, 26 Aug 2013 22:19:58 +0000
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