INCOHERENCIAS DE “ABC” Y CARTES, PELIGROSAS, ACERCA DE LOS NARCOTERRORISTAS DEL AUTODENOMINADO EPP En notable la serie de incoherencias que la prensa local, en este caso un ejemplo de “abc”, y nada menos que quien debe ser el Primer Servidor Público de la República del Paraguay, tienen con respecto a los terroristas y narcotraficantes del autodenominado EPP, en materia de confusión informativa, el diario, y de políticas pública el segundo. En la fecha, cabecera principal de la tapa de “abc” le hace un favor, el del periodismo irresponsable, al titular “La banda del EPP sigue asesinando a paraguayos”, que contradice nada menos que al contenido de la noticia: “Atacaron a comitiva de DD.HH. del Ministerio del Interior que venía de dar un curso en Tacuatí. Dispararon un balazo en la cabeza a uno de los choferes y en choque posterior hubo siete heridos. La gavilla narcoterrorista ya se cobró la vida de 31 compatriotas, 12 policías y 19 civiles. Zona del nuevo atentado fue reforzada anoche con efectivos de la fuerza de tarea conjunta”. Ver: abc.py/edicion-impresa/judiciales-y-policiales/un-policia-muerto-y-siete-heridos-en-ataque-del-epp-a-comitiva-de-ddhh-624054.html “abc” primero califica al EPP como una “banda”, y después, en el texto, se refiere a tal expresión del terrorismo local (versión paraguaya en ínfima medida, de su modelo, las narcoterroristas FARC) como “gavilla narcoterrorista”. Lisa y llanamente, esto es confusionismo y desinformación. Ya sabemos que el terrorismo es el ejercicio y práctica ocasional del terror como método de amedrentamiento político, ideológico, fundamentalista y cualquier otra finalidad, por una persona aislada (anarquismo sanguinario) o mediante una organización (en este caso el EPP), que por suerte todavía tiene una infraestructura limitada (aunque ya con varias experiencias de crímenes horrendos), y de cobardes que emboscan a fuerzas de seguridad y a personas, aprovechándose de graves descuidos en materia de seguridad de las víctimas. Hasta ahora no fueron capaces de atacar un cuartel de las FFAA, o un una comisaría policial bien equipada y custodiada. Los del EPP son depredadores que se aprovechan de la indefensión de sus blancos y objetivos y todavía cuentan con una limitada capacidad operativa (terroristas, armas, logística, etc.), que les dificulta objetivos de mayor envergadura. Por suerte para nosotros. Es lo que ocurrió en el último atentado, que dejara como víctima fatal a un joven sub-oficial de la Policía Nacional, y a una caravana del Ministerio del Interior que se dirigía a investigar denuncias de abusos y de actos represivos ilegales e ilegítimos, en la “investigación-persecución”, policial y militar, de las actividades de los terroristas, que si no se toman medidas correctivas y punitivas de inmediato, de haber sucedido realmente, tales abusos pueden conducir al peor y más lamentable resultado: el terrorismo de Estado. ¿Por qué la crítica periodística a “abc”? Porque según el diccionario “on line” de la RAE (rae.es/RAE/Noticias.nsf/Home?ReadForm , “banda, (quizá del gót. bandwō, signo, bandera)” no puede aplicarse al terrorismo, pues en español, en su segunsa acepción tiene los siguientes significados: “Grupo de gente armada; parcialidad o número de gente que favorece y sigue el partido de alguien; bandada, y manada”. Ni siquiera, pues, cabría la expresión, hablando correctamente de “banda terrorista”, que nosotros mismos más de una vez hemos empleado, por lo cual también hacemos nuestra autocrítica. Mucho menos los terroristas del autodenominado EPP son una “gavilla”, pues de acuerdo siempre con el diccionario indicado, debe entenderse por tal a una “pandilla juvenil con tendencia al comportamiento agresivo”, o bien (y quizá del lat, cavella, derivado de cavus, hueco entre las manos; cf. it. covone), es decir, de una “Junta de muchas personas y comúnmente de baja calidad. Gavilla de pícaros. Gente de gavilla”. No cabe hablar, pues, la “banda o gavilla” de terroristas del EPP. Ni siquiera son los tradicionales guerrilleros de otras épocas. Sencillamente son un grupo paramilitar-parapolicial de terroristas, supuestamente “revolucionarios”. Más preocupante por sus derivaciones en las políticas públicas son las insólitas expresiones del presidente Cartes, reproducidas por “abc” sin entrecomillar, pero sin alteración de su contenido. Expresó, el primer mandatario, que lamentaba “la muerte de una nueva víctima del EPP y dijo que no se trata de una lucha de fuerzas y que apostarán a la educación y el desarrollo en la zona Norte, área de influencia del EPP”. Una vez más, Cartes evidencia su incompetencia como jefe de Estado, incluso politiqueramente hablando, pues el enfrentamiento legal y legítimo de las fuerzas de seguridad del aparato de Estado, en un caso como este requiere del uso de su poder policial-militar, sin incurrir en actos de terrorismo de Estado, desde luego, y también de enfrentar las dimensiones de la pobreza de la región, tan miserabilizada, donde el EPP no tiene refugios permanentes ni estables, mucho menos “territorio liberado” ni bases de consideración, sino que, para atacar, siempre opera alevosa y traicioneramente. Conclusión: el periodismo no puede limitarse a ser una empresa para que Zucolillo, o cualquiera otro de los plutócratas de apenas otro “negocio” más para ganar dinero, y no está mal que su empresa sea rentable, sino que es imprescindible para tener independencia de cualquier otro interés o poder fáctico extra periodístico, lo que significa comunicar imparcial, objetiva y serenamente acerca de los hechos ocurridos, bajo la forma de noticias, a la ciudadanía, y no ayudar a confundirla. También reiteramos que ninguna persona sensata, que realmente busque el bien de la Patria paraguaya Humanidad, no puede comenzar su “carrera politiquera” nada menos que como presidente de la República, y mucho menos sobre la base de una inmensa fortuna, y no del mejor Plan de Gobierno y equipo para gobernar.
Posted on: Thu, 03 Oct 2013 00:00:38 +0000
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