Jhean Matt Te he tenido siempre en mi mente, en mis deseos, en mis anhelos… Te he añorado un sin número de ocasiones, llamándote sin nombrarte entre lágrimas y lamentos… Te he dicho miles “Te amo” convencida de ello, aunque otros oídos los hayan recibido todos mis “Te Amo” siempre fueron para ti… He vivido confundida sin ti, vida mía, bebiendo de una fuente ajena, festejando falsamente de una dicha que no me pertenecía, una dicha que estaba destinada a otra persona… Y te esperé… y en todas mis plegarias te nombré, las grité al viento para ayudarte a encontrar el camino hacia mi. Te hallé… te hallé entre la tristeza y la nostalgia, te hallé entre el anhelo y la penumbra… te hallé en el mismo lugar en el que me encontraba yo sin ti… Me rehusé a verte, me rehusé a aceptarte… confundida entre los vestigios de mi destrozado amor, atrincherado fuertemente en un corazón contrito y lastimado, encaramado neciamente en su soledad, golpeado por el engaño y la desilusión, embriagado por la confusión de una mala elección de un amor pasado… Y me miraste… y me elegiste… y te quedaste ahí, a mi lado, de pie, enseñándome a luchar el uno al lado del otro… Y me rendí... Cobardemente me rendí ante el recuerdo del pasado… Y me cegué nuevamente en ese dolor, en el recuerdo de ese sufrimiento tan hondo y tan cruel… y me aterré al pensar que nuevamente esa tormenta de desgracia y desolación se apoderaría de mi… Y corrí, corrí lo más lejos que pude de ti… y corriste detrás de mi, con una persistencia con la que jamás nadie lo había hecho, y tomaste mi mano para encaminarme nuevamente… y caí, rendida por el dolor, la confusión y el miedo… Y ME TOMASTE EN TUS BRAZOS PARA LLEVARME A TU CAMINO… y me enseñaste a amar, me demostraste con esmero y paciencia como es el VERDADERO AMOR. TE AMO… y si acaso mis lágrimas empapan mis mejillas mientras te escribo esto no es por dolor, es por amor… es por dicha plena… Gracias Jean. Me enamoré de ti, de tu ser, de tu esencia, de tu cuerpo… Me enamoré de una forma irracional, desmedidamente… y aún así NO TENGO MIEDO… me arrebataste el miedo del alma mientras la componías. Mi compañero de vida, mi fuerza, mi apoyo… Recogiste los pedazos de mi corazón y los armaste uno a uno… gracias. Quédate aquí, por siempre, me he unido a ti sin remedio…
Posted on: Sat, 06 Jul 2013 18:52:01 +0000
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