LAS AMIGAS, LOS JUEGOS, LOS CUMPLEAÑOS........... (Séptima parte)...... Yo tenía mi repertorio: Las Rimas de Bécquer (por eso las puse al comenzar este relato).Ya mientras vivía Tita me las enseñaba, pero cuando leí sola, me las aprendí de memoria de tanto leerlas. Claro que Popo me enseñaba cuales NO tenía que decir, por ejemplo: "Cerraron sus ojos que aún tenía abiertos.....", pues esa era muy "lúgubre". Generalmente elegía: "Volverán las oscuras golondrinas......" o "Quién fuera luna, quién fuera brisa, quién fuera sol.....". Y con esas quedaba bien. O si no, me pedían que cantara: "La cuequita del desengaño", que había puesto de moda Margarita Palacios. Las demás chicas hacían su número y cuando todas habían terminado, mi hermana Popo cantaba: "Las cosas del querer" o "Te lo juro yo" que estaban de moda. Luego volvíamos a comer algo y la que quería tomar más chocolate, (que Mamá había calentado) lo hacía; y si no, se servían algunos refrescos para acompañar la torta, pues había llegado el momento cúlmine, de pedir los deseos, de soplar las velitas y de cantar el Feliz cumpleaños. Ahí se armaba un alboroto, con los besos, los abrazos y los tirones de orejas. En ese entonces, no se usaba todavía dar "souvenirs", pero Popo y Mamá habían inventado una manera de agasajar a mis amiguitas y era "El pozo de la suerte". Algo así se usaba en las fiestas o ferias escolares. Allí se compraba un número, por unos centavos y luego, se sacaba un premio, mejor o peor, según la suerte. En casa, Popo forraba una caja con un papel bonito, lo adornaba con un moño y le ponía adentro distintas cositas, chiches, pequeños adornos, cuentitos, golosinas, en fin, tantos obsequios como invitadas había; como no eran todos iguales, les ponía un número pegado. En una pequeña canasta, ponía otros tantos cartoncitos con números y la ofrecía a las chicas, que iban retirando un número sin mirar; luego cada una miraba dentro de la caja y sacaba lo que le correspondía. Había que ver la algarabía que se producía entre las chicas, al sacar cada una su regalito, aunque fuera una pavada, todas quedaban encantadas y una vez que les hicimos "El pozo de la suerte", quedó como una especie de "ritual" en mis cumpleaños, que todas esperaban...... (Continuará)
Posted on: Fri, 28 Jun 2013 02:48:05 +0000
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