Los huérfanos Ochberg En 1921, el africano Judio Isaac Ochberg Sur encabezó una audaz operación de rescate en Europa del Este. Gracias a su coraje y determinación, junto con el apoyo incondicional de los Judios de Sudáfrica, a 200 huérfanos judíos podrían comenzar una nueva vida en este país. Esta es su historia. Isaac Ochberg nació en mayo de 1879 en Ucrania y, con poco más de 15 años, emigró a Sudáfrica con su padre. Enriquecer, en poco tiempo, con el comercio de la madera, y se convierte en uno de los empresarios más exitosos del país. Generoso filántropo y líder de la comunidad dedicada, que estuvo activo en organizaciones de la comunidad judía en Ciudad del Cabo, donde residía. Fue un sionista ferviente largo de su vida y por lo tanto representa a Sudáfrica en la 16 ª Conferencia Mundial Sionista en Zurich. También fue uno de los fundadores del orfanato judío en Ciudad del Cabo, que presidió durante muchos años. En Sudáfrica, fue el gran número de Judios que vienen del imperio ruso, que, como Ochberg, se había instalado allí en el siglo 19, después de que el aumento en la Rusia zarista, la persecución y los pogromos. Los Litvaks, como se les llamaba, siguieron con preocupación la devastadora noticia de la casa paterna, Deir heim, en el viejo país. A principios de la década de 1920, el entorno no podía ser más turbia. La primera guerra dejó un rastro de destrucción y muerte. Cientos de miles de Judios que tratan de escapar de los intensos combates habían dejado sus casas y sus shtetls y vivió en la pobreza extrema, asolado por el hambre y las enfermedades. La situación empeoró aún más después de la caída del régimen zarista y la revolución bolchevique de octubre de 1917. A principios de 1918, después de que el nuevo gobierno ruso ha firmado la paz por separado con Alemania, entró en erupción en el antiguo imperio zarista una sangrienta guerra civil. Se enfrentaron, por un lado, el Ejército Blanco, apoyado por los sectores liberales y comandada por el ejército zarista conectados, y por otro, el ejército rojo de los bolcheviques, Trotsky organizó para luchar contra el nuevo orden socialista. En 1921, la guerra civil llega a su fin con la victoria de los Rojos y la instalación del estado soviético. El saldo en vidas humanas fue muy alto: 9.000.000 muertos, y el hambre que había venido de Rusia, en 1921, había sido responsable de la muerte de millones de personas. En Ucrania, Polonia, Bielorrusia y Lituania, las regiones con alta población judía y la pobreza sin límites, los Judios sufrieron intensamente. Las terribles condiciones en las que los Judios vivían había empeorado aún más, y el resurgimiento del antisemitismo con intensidad redoblada. La guerra civil dejó a la población judía a la completa merced de las bandas armadas que aterrorizan las calles. Los pogroms eran diariamente y Judios fueron masacrados por los ucranianos y polacos, rusos blancos y rojos, dondequiera que estuvieran. Hasta la fecha, no existen cifras exactas sobre el número de muerto víctima de este tipo de ataques. Noticia de la muerte y la devastación en la región de los pogroms y terribles historias sobre los huérfanos abandonados, que murieron de la enfermedad y el hambre, se había extendido la diáspora. El rabino jefe del Imperio británico declaró en una ocasión: ... Un millón de personas fueron exterminadas en sólo tres años. En Ucrania, 3 millones de personas fueron sometidas a los horrores del infierno. [...]. Hay alrededor de 600 mil niños sin hogar, 150.000 huérfanos y 35.000 huérfanos de padre y madre en Ucrania que pueden morir de frío, el hambre y la enfermedad, a menos que los corazones judíos todavía tienen un ápice de humanidad y las libraré. En Sudáfrica, los Litvaks recibieron cartas desesperadas, de contrabando a través de las líneas enemigas, de amigos que se declararon en busca de ayuda y la familia. Un recaudador de fondos para la asistencia social a los refugiados judíos se convirtió en el foco principal de los judíos de África del Sur durante la guerra mundial 1. El destino de los huérfanos de guerra judíos movilizó especialmente la comunidad judía y había campañas para recaudar fondos para subvencionar en Europa y ayudar a su emigración a Palestina luego. El Fondo del Sur Víctimas ayuda a África de la guerra creados durante la Guerra 1 habían trabajado intensamente cuando surgió la idea de tratar de organizar una operación de rescate para tener por lo menos algunos hijos del infierno y llevarlos a Sudáfrica. Isaac Ochberg abrazó inmediatamente la causa. Durante una reunión especial en agosto de 1920, Ochberg propuso que el orfanato judío en Ciudad del Cabo para tomar la plena responsabilidad de llevar a los niños de Europa y cuidar de ellos. Por otra parte, debe actuar como una carga central de distribución de los mismos entre las personas caritativas que adopten. Sugiero, además, que una suma de 10.000 libras para ser recogidos por el Fondo de Ayuda para este fin. Esta cantidad sería suficiente para que la emigración de 200 niños , dijo. Constituida entonces un Fondo de Huérfanos de pogroms para financiar el costo de tal operación. La decisión de realizar la operación de rescate Ochberg logró la autorización del Gobierno de Sudáfrica por la llegada del niño, pero impuso ciertas condiciones. Entre los requisitos se determinó que fueron aceptados sólo menores de 16 años no han mostrado la enfermedad, y la comunidad judía asumir la plena responsabilidad de los mismos. Finalmente, estableció que el número de huérfanos que se reciben no supera los 200. Ochberg también inicia contactos con la Federación de Judios de Ucrania en Londres. La organización responde a estar preparado para ayudar a llevar a Londres a todos los niños que podrían salvarse. Poco después de la reunión en la que se acordó llevar adelante el proyecto, que se celebró un evento para recaudar fondos en un cine de Ciudad del Cabo. Presente rápidamente Judios alcanzar la suma de 10.000 libras esterlinas inicialmente prevista y un nuevo objetivo es £ 25,000 multiplicado varias veces. Corriendo para ir a Johannesburgo, Ochberg no sólo puede apoyar el orfanato judío sudafricano, sino a toda la comunidad, ampliando su campaña de recaudación de fondos para todos los distritos del país. Y, sorprendentemente, recibió el apoyo de varias partes de la sociedad en general, no sólo a la comunidad judía. El siguiente paso fue enviar a alguien a Europa para hacer el procesamiento en el sitio. Era una tarea delicada, porque la gente tiene que ir directamente a la región de los pogromos. Isaac Ochberg ofrece para llevar a cabo la tarea. Él escribe en su diario: sin duda, mi viaje se entremezcla con dificultades, pero espero que con la ayuda del Todopoderoso, puede superar todo lo que aparece en mi camino. En una reunión en Ciudad del Cabo orfanato en marzo de 1921, Joseph Kadish dijo a sus amigos: Esta es la última reunión que nuestras sillas Presidente antes de su partida para llegar a los niños en Rusia. Él se enfrentará a peligros y tribulaciones en esta misión, pero espero que usted gana todas las dificultades y regresar con seguridad a Ciudad del Cabo, en compañía de los niños y las niñas . Así, en marzo de 1921, con los documentos que se habían garantizado la libertad de movimiento, Ochberg fue a Europa a través de Londres. Originario de Ucrania, llegó a dominar el idioma y conocía la región. La sede londinense de la Federación de los ucranianos judío extranjero no escatimó esfuerzos para ayudar, pero con la guerra civil que devastó grandes zonas de Polonia y los alrededores, y con muy poco rodaje de transporte, tenía límites definidos a lo que puede lograrse. Al llegar a Europa del Este, Ochberg viajaba de ciudad en ciudad - Minsk, Pinsk, Stanislav, Lodz, Lemberg y Wlodowa - además de pequeñas aldeas. Ante sus ojos descortinavam las escenas de miseria, sufrimiento y violencia indescriptible. Más preocupante, sin embargo, fue tener que seleccionar entre muchos niños huérfanos que traerían a Sudáfrica decidió tomar ocho de cada una de las instituciones a través de la cual pasaba. Para asegurar el bienestar de los niños a lo largo de la jornada, Papá Ochberg, cuando los niños comenzaron a llamarlo, añadió nuevos miembros al grupo, entre ellos Alexander Bobrow, que sería un elemento clave en el funcionamiento de rescatar. Alter, como se le llamaba, trabajó como analista químico en una fábrica de azúcar hasta el día, la búsqueda de los estragos de la guerra mundial 1, dejó su trabajo y se fue a ayudar a lo que podía los Judios de Pinsk. Alter pertenecían al partido de la izquierda Poaléi Sión, y su iniciativa e insistencia, sus compañeros dejaron sus trabajos para ayudar a los refugiados judíos. Su principal tarea era ir de pueblo en pueblo, recogiendo literalmente hijos, uno por uno, los restos sobrantes de sus hogares. Muchos habían visto a sus padres y, en algunos casos, familias enteras fueron muertos a tiros ante sus ojitos asustados. En una declaración grabada antes de su muerte, Alter Bobrow dice: Encontramos muchos niños, que pronto se vieron obligados a montar los orfanatos. Al principio, Pinsk fue aislado por las luchas y fueron prácticamente cayó a causa de nuestros recursos. Después de algún tiempo, los suministros empezaron a llegar, primero a través de la Sociedad de Beneficencia judía, en Berlín, y más tarde, el Joint Distribution Committee. Uno de los estadounidenses que trabajaron en la comisión de salud, más tarde se hizo famoso, recuerda Bobrow, era Henry Morgenthau, Secretario del Tesoro durante la presidencia de Franklin Roosevelt . También habló de la fuerte epidemia de tifus, las bombas que cayeron en la región y los pogromos, casi a diario, organizado por bandas de Ucrania. Para calmar a los niños, una mujer que nos ayudó a era repetir el Todopoderoso nos proteja y nos salve. El viaje Una vez seleccionados los niños, Ochberg hizo todos los preparativos para llevarlos a Londres, donde haría la nave hacia Sudáfrica Al llegar a Inglaterra, después de un viaje largo y difícil, Ochberg escribió Adolfo Schauder, su amigo, que era un líder de la comunidad en Port Elizabeth: (...) Se le complace saber que regresé a Londres ayer por la noche, después de pasar por pruebas difíciles durante los últimos tres meses de mis áreas de misión de los pogromos. He estado en casi todos los pueblos de Ucrania y Polonia Galicia y ahora conozco bien los lugares donde hay un sufrimiento inconmensurable. Recogí el número estipulado de niños y puedo decir con toda certeza, que la generosidad de los judíos de Sudáfrica para hacer posible el logro de la eliminación de ellos significa nada menos que para salvar su vida. Sin duda habría muerto de hambre o enfermedad, o se hubiera perdido a nuestro pueblo por otras razones. Ahora estoy en Londres con el fin de conseguir el transporte, y es de esperar informo por telégrafo, en resumen, los datos de nuestra partida a Sudáfrica, con los niños. A principios de septiembre de 1921, a bordo del buque de Edinburg Castle, Ochberg y los niños salieron de Londres hacia África del Sur Al llegar a su nuevo hogar, los niños fueron muy bien recibidos y enviados a dos orfanatos mantenidos por la comunidad - Oranje en Ciudad del Cabo, y Arcadia, Johannesburgo. Durante muchos años, Isaac Ochberg fue Presidente de la orfanato judío en Ciudad del Cabo y siguió manteniendo un ojo vigilante sobre sus huérfanos. Muchos de sus protegidos crecen para convertirse en los pilares de la prestigiosa comunidad judía sudafricana. Isaac Ochberg murió en noviembre de 1937, durante un viaje en barco, a los 59 años. Fue un generoso mecenas de la Universidad Hebrea de Jerusalén y el KKL, que hizo un legado en un testamento, alrededor de $ 100 millones en valor presente, que aún hoy en día sigue siendo la mayor donación jamás se ha hecho a la institución por un individuo. Estos fondos se utilizan para recuperar un área grande en Israel llamada Nahalat Yitzhak Ochberg, ¿dónde están los kibutzim y Dalia Ein Hashofet. Su vida es la inspiración y la razón de que desde hace más de 3.000 descendientes de los huérfanos y algunas películas y libros se han escrito sobre este apasionante saga. Estos descendientes y Keren Kaiemet Leisrael - KKL rindió un homenaje a su memoria, en julio de 2011, la creación del Memorial Isaac Ochberg Scenic Lookout en la Biosfera de Ramot Menashe Park. A la inauguración asistieron numerosos descendientes de los huérfanos Ochberg de Israel, el Reino Unido, los EE.UU. y Sudáfrica Historia documentada La operación de rescate generada por Ochberg fue el tema de un documental realizado por el productor y director John Blair, quien ganó el Oscar al mejor documental en 1995 por su obra Anne Frank Remembered. Bajo el título Los huérfanos Ochberg es un conmovedor relato de la aventura y aporta testimonios de algunos sobrevivientes y sus descendientes. Cuando Blair comenzó a producir el documental, publicó un anuncio en The Jerusalem Post pidiendo información sobre el sudafricano Isaac Ochberg filántropo. Un día, el periodista David Kaplan, el Post recibió una llamada de una mujer que se identificó como Cecilia Harris, 90, quien vivía en Haifa, y dijo, con voz temblorosa: Yo soy uno de los huérfanos Ochberg . Cecilia tenía tres años cuando fue llevada junto con sus dos hermanas a Sudáfrica Pocos meses después de la conversación telefónica, participó en el rodaje del documental en Europa del Este. La producción también contó con la participación de Liebe Klug, hija de Alexander Bobrow. Fanny (Frier) Lockitch, actual presidente de la judía Orfanato Oranje, en Ciudad del Cabo, es uno de los niños rescatados por Ochberg: Nací en Voronesz, pero tengo casi ningún recuerdo de allí. Mi padre estaba en el ejército ruso y murió durante un ataque con gas; Mi madre murió en 1918. Alguien nos llevó, a mí ya mi hermano Jack (actualmente vive en Rhodesia), dos años mayor, a un orfanato en Brest-Litovsk. La vida no era fácil, pero estar juntos mejoró algo la situación. A pesar de que la guerra había terminado, había escasez de todo: comida, ropa, carbón, y en especial de afecto y cuidado. Para tener una idea de cómo la situación era inestable, una vez que los rusos tenían que rodea la ciudad, por el otro, eran polacos. A través de las ventanas del orfanato vio combates cuerpo a cuerpo con bayonetas y cuerpos esparcidos por las calles. Un día, nos dijeron que un hombre venido de África para llevar a algunos de nosotros y nos ofrecen un nuevo hogar en el otro lado del mundo. No sabíamos muy bien qué pensar y tenía sentimientos encontrados. A pesar de vértigo con la anticipación de ir a un país hermoso, habíamos oído historias de ladrones y animales salvajes y temía ser devorado por los leones, los caníbales o incluso ser vendidos como esclavos. Todos nuestros temores, sin embargo, desaparecieron cuando Isaac Ochberg apareció con el pelo rojo y sonrisa cautivadora. Inmediatamente todos quedamos impresionados con él y comenzó a llamarlo papá Ochberg . Podía pasar horas hablando con nosotros, haciendo bromas y abrazos ... Nunca, hasta el día que me muera, no me acuerdo de la primera vez que vi las luces de Ciudad del Cabo y luego la bienvenida cálida que nos hicieron. Parecía que la mitad de la población de la ciudad estaba esperando por nosotros . J.Virtual.Site ...
Posted on: Sat, 09 Nov 2013 18:15:39 +0000
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