Mascotas: compañía que no hace daño Aunque se ha intentado - TopicsExpress



          

Mascotas: compañía que no hace daño Aunque se ha intentado encontrar conexiones entre la exposición a los animales y el desarrollo de enfermedades como bronquitis o asma, el pediatra neonatólogo Rodolfo Rivas Ruiz afirma que la susceptibilidad no es mayor en niños que tienen mascotas respecto a quienes no las tienen. “Hay gran cantidad de artículos que revelan que no hay absolutamente ninguna relación. Los animales de compañía no hacen daño, las enfermedades de los perros o los gatos no son transmisibles a los humanos”, asegura el especialista del Hospital de Pediatría del Centro Médico Nacional Siglo XXI. Carlos Manuel Aboitiz Vera, pediatra del Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias, explica que las bacterias y virus que enferman a mascotas y humanos son distintas. “Si al perro le da un cuadro respiratorio como un catarro, o si tiene incluso neumonía, no afecta al humano. No es posible un contagio porque son especies diferentes de bacterias y virus las que afectan a los perros”. Si los animales son vacunados y los llevan a consulta con el veterinario cada seis meses para ser desparasitados, se evitan los riesgos, y la convivencia con una mascota puede beneficiar al sistema inmunológico. “Se ha visto que el contacto temprano con un animal, como un perrito sano, mejora la salud de los niños, porque disminuye el riesgo de infecciones graves y diarreas; esto se explica porque el convivir con una flora bacteriana diferente, como podría ser la de los animales, hace que el sistema inmune se active y de alguna manera esté más atento para defenderse de otro tipo de enfermedades”, explica. Leonel Martínez Duarte, pediatra neonatólogo del Hospital Español, menciona que la rabia puede ser un riesgo que se resuelve vacunando a la mascota. Otros medios de infección serían las mordidas o rasguños, por mínimos que sean, ya que también son causa de lesiones. “Pero éstos son problemas que pueden presentarse en la convivencia diaria de los animales con los niños, y se resuelven escogiendo una mascota que realmente sea de compañía, educándola y enseñando también a los menores a no molestar a los animales cuando están durmiendo o comiendo, por ejemplo”, detalla. Los pediatras coinciden en que una mascota sana puede estimular el desarrollo infantil, siempre y cuando los chicos adquieran responsabilidades dependiendo de su edad, como darle de comer al nuevo cachorro, sacarlo a pasear, bañarlo y recoger las heces. Gloria Esther Durán y de la Vega, pediatra del Hospital Ángeles Metropolitano, subraya que está en manos de los padres el que los menores se vuelvan responsables. “La responsabilidad se da en la medida en que los papás les asignen tareas específicas, porque si los dejan tener la mascota y quien anda recogiendo las heces, y quien anda limpiando es la mamá, mientras los niños sólo se dedican a jugar con el perrito, no aprenderán a hacerse responsables de él”. Poner atención Si la mascota no está sana, sí se convierte en un riesgo, y los gatos cuando no están desparasitados pueden ser huéspedes del toxoplasma gondii, causante de la toxoplasmosis en los humanos, subraya Leticia Belmont, pediatra del Instituto Nacional de Pediatría. “El toxoplasma es un microorganismo peligroso para laembarazadas, porque puede generar cardiopatías, cataratas, microcefalia, retraso mental y alteraciones cerebrales en el bebé”. Por ello, es importante llevar a los felinos al veterinario. Aboitiz agrega que gatos y perros no desparasitados pueden albergar el parásito intestinal toxocara, que si logra entrar al organismo humano puede afectar desde el hígado hasta los pulmones y el corazón. “Pero en realidad son enfermedades poco comunes”. Dichos parásitos ingresan al cuerpo humano por ingestión directa, es decir, los microorganismos de las heces de los animales tendrían que llegar a los alimentos o directamente a la boca de los niños. Martínez aclara que quien recoge las excretas no tiene riesgo de contagio, pero es necesario tener medidas de higiene. “Si las heces de los perros o los gatos permanecen mucho tiempo a la intemperie, las moscas podrían transportar las bacterias y contaminar los alimentos, pero tiene mucho que ver en qué zona se encuentren las excretas. “En general, si el espacio del animal permanece limpio no hay ningún riesgo”, señala. Los expertos sugieren: Asegurarse de que la mascota tiene todas las vacunas, como leptospira y rabia. Llevarla al veterinario cada seis meses para revisión de rutina y para desparasitarla. Lavarse las manos después de jugar, darle de comer o convivir con la mascota. Los perros se deben bañar cada 20 días. Los gatos no requieren baños tan continuos. Enseñar al perro a defecar fuera de la casa y cambiar con frecuencia la arena del gato. No dejar heces u orina de mucho tiempo a la intemperie. La interacción humano-animal, estudiada científicamente, ha demostrado que convivir con un perro: » Fortalece el sistema inmunológico de los niños. » Impulsa una mejor interacción social de los infantes y ayuda a que presenten menos estrés. » Estimula la actividad física, ya que salir a caminar con la mascota contribuye a ejercitarse y, en su caso, a reducir la obesidad infantil. zocalo.mx/seccion/articulo/mascotas-compania-que-no-hace-dano-1384430072
Posted on: Fri, 22 Nov 2013 22:18:36 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015