PENSANDOTE YOSU Si, es cierto. ¿A que negarlo? A veces te - TopicsExpress



          

PENSANDOTE YOSU Si, es cierto. ¿A que negarlo? A veces te sueño. No se si es cuando tu me sueñas...supongo que no, pero quizás si... "Ayer" te soñé...Soñé que volvías y me querías llevar a casa. Retornar al hogar. Me desperté y pensé en tí, en mi, en nuestra historia inconclusa. Recordé y sentí la rabia subir por mi corazón hasta mi sien. Y recordé. Recordé que me dejaste, que me abandonaste, Que te fuiste muy lejos. Que me obligaste a volver a nacer...Y te maldije. Oh... si...te maldije por obligarme a volver. Nacer en un mundo salvaje y extraño, con seres incomprensibles, llenos de vanidades, deseos absurdos, miedos e iras...Rivalidades sin sentido. ¿Quieres saber que ocurrió? Que al principio me mostré con naturalidad, y me golpearon sin piedad. Que aprendí a ocultarme. Que durante todos estos años intenté enterderlos, comprenderlos. Y me mezclé con ellos... Y casi, casi me perdí. Hable, como ellos hablan. Intenté divertirme, como ellos se divierten. Intenté amar como ellos aman. Y fracasé. Luego...ocurrió el milagro...y abrí los ojos. Y descansé mi alma. Hablé como yo hablo. Me divertí como yo me divierto. Y amé, como yo amo. Y así fué como me convertí en extraña y salvaje para ellos. En incomoda, para muchos de ellos. Hoy sigo sin entenderlos...pero ya no me importa. Comprendí que al volver a nacer me hice grande. Y dejé de maldecirte. Me incorporé en la cama y acaricié a la gatita durmiendo a mi lado. Escuche su ronroneo suave y la respiración de él durmiendo en otro cuarto. Un autillo cantaba cerca. Salí al jardín y me impregne de olor a noche. Miré la Luna, cuarto creciente, y te recordé ya sin rabia y con nostalgia. Hacía frío y por un instante, creí sentir el calor de tu abrazo. Por un instante te sentí junto a mi como "ayer"... Recordé nuestro lugar, allá en la montaña. Nos recordé allí abrazados, con nuestros cuerpos entrelazados y nuestras almas anudadas. Con miedo a movernos por no separarnos. Ya no me da vergüenza admitirlo. Admitir que te sueño, que te recuerdo y que te extraño. Que aún llevo tu olor en mis pensamientos, en mis divagaciones. Si quieres, en otra ocasión, te contaré mi historia y mi milagro.
Posted on: Tue, 18 Jun 2013 15:54:25 +0000

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