Puerto Rico, despídete de tus sueños de biotecnoñoña, economías del conocimiento y centro de innovación inmaterial. Quiénes deciden globalmente adonde mover sus cuarteles de operación les preocupa la calidad de vida que tiene el país y su capacidad para atraer empleados. Tus playas y cielos, y el culo de JLo, no cuenta. Estas empresas miran en cualquier prospecto destino la vitalidad de sus zonas urbanas, la seguridad, la confiabilidad del clima de hacer negocios y, aunque no lo crean, miran también los espacios de equidad que existen para sus empleados gays, que son un componente indispensable de su plantilla de recurso humano. En todos esos renglones Puerto Rico se cuelga. Nada más con esa jauría de religiosos vociferones que acapara el debate, los servicios de salud tercermundistas, y la institucionalización de la violencia de género y la homofobia, Puerto Rico se auto-descalifica de las grandes, medianas y pequeñas ligas del R&D y el conocimiento. Y mientras tus escuelas de ingeniería, públicas y privadas, sigan produciendo orangutanes homófobos, tampoco te creas contar con la "excelente" fuerza laboral que daría apoyo a esos sectores. No la tienes. Lo que tienes ahí, Puerto Rico, es un "locker room"; mucha fuerza, sí, fuerza bruta y acéfala. Llevo un tiempo diciendo que el deterioro de la convivencia en la Isla por la proliferación de una cultura violenta y macharrana, no sólo produce niños-que-serán-criminales y mujeres maltratadas, sino que desbanca cualquier sueño de desarrollo económico. En lugares donde reina la violencia y la exclusión, sin cultura de mérito, perspectiva de género y convivencia civil, nada crece o prospera, salvo las gangas del crimen organizado.
Posted on: Tue, 03 Sep 2013 03:58:14 +0000
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