Que agradable sorpresa encontrar estas notas de ustedes tan llenas - TopicsExpress



          

Que agradable sorpresa encontrar estas notas de ustedes tan llenas de cosas bonitas. Tal como lo indiqué anteriormente, de mi parte he dado por olvidada la ligereza y estoy para servirles, a todos. Lo más bello que tenemos es la familia y la mía (que los incluye a todos) es la mejor. No puedo borrar de mi memoria los bellos momentos que pasé en Puerto Barrios. Forman parte de mi historia, esa historia que contribuyó a ser lo que ahora soy. Estoy inserto en la familia como una pieza más del gran rompecabezas Salguero-Motta. Como bien dice Lautaro, tengo un poquito de todos y todos tienen un poquito mío. Cuando veo al tío Jorge, noto algún rastro de mi padre, cuando veía al tío Moncho, me parecía verlo totalmente a él. Era el que más se le parecía, sobre todo en esos ojillos de mirada penetrante. Del tío Chico tengo pocas vivencias, me parecía un tipo audaz, medio especial con esos anteojos de tamaña graduación. La tía Coyo con el hablar pausado lleno de sabiduría, cada palabra la meditaba antes de decirla y me encantaba cuando se dirigía a mí y me decía “Manuelito”. Recién vi la foto de mis primos Vasquez-Salguero y los recuerdos vuelan inmediatamente a mi memoria, ver a Rober (Vita) y Tulio con los que compartí mis primeras pláticas de “primos-amigos”. Sus rostros surcados de las huellas del tiempo, de serenidad, sufrimiento y de experiencia, ¡Cómo han pasado de raudos los años!. Una vez mi padre me dijo: “es necesario que conozcas al resto de tu familia Motta, porque no sea que te encuentres con alguna chica linda de la que te enamores y resulte siendo tu prima” y qué razón tenía. Empezamos a buscar a toda la familia y efectivamente ¡qué guapas eran!, (y lo siguen siendo). Ya conocía a las hijas de la tía Coyo, Chata, Quela y Blanquita, guapas, elegantes, sobrias y de mucha gallardía y mis primos muy cariñosos conmigo, sobre todo Vita. Tengo especial recuerdo de Hugo, callado, observador y de uno que otro susto que nos daba cuando ingratamente le invadían los ataques de epilepsia. El cargo de Supervisor de Educación que mi padre orgullosamente ostentaba, lo obligó a mudarse continuamente de Chiquimula a Puerto Barrios (calor abrasador), ora en Totonicapán (frío intenso), ora en Cobán (lluvia constante), después en Sololá (paisaje de encanto) y finalmente Guatemala, con una fugaz estancia en San Marcos donde muere. A todos lados llegó la galana, simpática, bullanguera y cariñosa tía Laura que siempre estuvo cerca de mi padre. Conocimos a sus hijos e hijas desde chicos y siempre fueron preciosos y muy educados. Recién nos encontramos con la grata sorpresa de ver la belleza de sus hijas y nietas. Siendo pequeño recuerdo llegar a la casa del tío Jorge donde conocí a Jorgito que luego tomaría la aventura de buscar su destino fuera de Guatemala y que ahora felizmente ha vuelto, y me presentan a una hermosa rubia que era su hija Xiomara, más tarde conocería a Hosman y a Moris. Posteriormente conocimos a las hijas del tío Moncho, ¡preciosas María y Yoli!, después buscamos a la tía Marta que vivía en Amatitlán, y ¡oh sorpresa, dos encantadoras princesas eran sus hijas Beatriz y Marta Elena!, pronto con sus hijos varones Guillermo y Vicheto hicimos muy buena amistad de los cuales me siento muy orgulloso por los éxitos que han alcanzado, tanto ellos como sus hijos. Finalmente viajo a México y conozco a la última de la generación, la tía Yoli y me presenta a sus hijos varones. Al igual que Chata, me cuenta que le tocó vivir fuera de la familia en países extraños pero nunca perdió de vista al resto de su familia ya que para ella también era lo más importante. Hoy todos mis primos, o casi todos, son respetables abuelas o abuelos, muchos prestigiosos profesionales, luciendo orgullosas canas, luengas barbas, sabias y serenas miradas que se me antojan todos como brillantes chispitas salidas de la explosión de un fuego pirotécnico que fue mi abuela María Elena Motta Quiroa Quisiera poder visitarlos a todos, pero eso es difícil dadas las distancias, compromisos de trabajo y el diario trajín que nos absorbe día a día, pero afortunadamente está Facebook donde me regocijo viéndolos y saber que están allí, donde casi puedo abrazarlos para hacerles sentir ese respeto y cariño que les profesamos toda la familia Salguero España.
Posted on: Mon, 19 Aug 2013 18:28:08 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015