SANGRE AZULGRANA SAN LORENZO Feliz cumple vuelta Boedo celebra hoy el aniversario de la noche en que la Legislatura le devolvió Tierra Santa. El plantel, que pelea por su vuelta (la olímpica), se sumó al brindis. Mercier ya vivía en el piso y Torrico aprendía a volar de brazo en brazo. Romagnoli pateaba en la panza de mamá Rita y los padres de Correa, de Navarro y de Villalba ni siquiera se conocían. Pese a que sólo Pichi y el Cóndor habían nacido en 1980, el plantel del Ciclón celebra el primer aniversario de la sanción de la Ley de Restitución Histórica, piedra fundamental para la Vuelta a Boedo, como si hubiese vivido el destierro del CASLA en Avenida La Plata. Y mientras las glorias y los famosos se empilchaban para el doble festejo de esta noche (la SCH festeja con un asado en el Polideportivo Roberto Pando y la CD organizó una cena top en la Rural), los players, antes de guardarse de cara al partido de mañana ante Belgrano en el Nuevo Gasómetro, clave en la puja por el Inicial, se peinan para la foto de Olé . Buena parte de este grupo de jugadores –muchos son hinchas- y también del cuerpo técnico, ya completó los formularios y comenzó a aportar metros cuadrados para regresar a Tierra Santa. Aunque, por ahora, no alcanza. Por eso aceptan la producción y posan con el banner que acompañó al equipo en varios partidos de esta temporada. Ahí anda el Pipi Romagnoli, el caballero de la armadura oxidada, el ídolo del barrio que quiere retirarse en el Gasómetro. En el de Boedo, claro, de cemento y con todos los chiches. Quizá en 2016, cuando -es la idea- termine de construirse. O un par de añitos después, qué más da, si la magia sigue intacta y no quiere saber nada con colgar los timbos. “Cuando me acercaron el proyecto, creí que la gente de la Subcomisión del Hincha estaba loca, pero con el tiempo empecé a creer. Y hoy todo se volvió una realidad. Hay que comprar metros para cumplir el sueño de la familia sanlorencista”, dice el Dios Santo, y recuerda la banca del Loco Migliore, otro guardián de la Vuelta que aportó desde Croacia y también quiere estar en el reestreno en Avenida La Plata. Detrás de cámara se esconde Bernie Romeo, hoy manager, quien tiene pensado donar la recaudación de su partido despedida para engrosar las arcas del Fideicomiso y, así, seguir colaborando con el club. Porque, se insiste, todavía falta. De los 94.000.000 de pesos que hacen falta para costear la expropiación del hipermercado francés, aún resta completar la mitad. “Para nosotros sería un sueño jugar en un lugar histórico para San Lorenzo. Nuestras familias nos hablaron mucho de la cancha de tablones. Sería hermoso poder estar”, cuentan Kalinski y Fontanini, cuervos de ley que intentarán seguir ligados al club para no perderse el regreso. Un regreso que fue obra de Adolfo Res, entre otros, a quien sólo le faltó dormir en los despachos de la Legislatura para convencer a todos del sueño. Cumplido. YO DIGO Adolfo Res (impulsor de la Vuelta a Boedo): Es una mezcla de emociones Pasó rápido el año desde aquella noche de felicidad en la Legislatura porteña. Fueron meses de mucho trabajo, con la esperanza de ir avanzando día a día para poder consolidar definitivamente lo que fue un sueño, que se convirtió en una realidad. En el fideicomiso ya hay 14.000 personas que han adquirido por lo menos un metro, y hay cerca de 17 mil vendidos. Se avanzó más de la mitad y, con el plan de cuotas, se hace más accesible. En lo personal, todo esto me trae recuerdos, emociones encontradas. Las marchas, desde la primera, con 3.000 personas, hasta la de los 110.000 en la Plaza de Mayo, las movilizaciones a la Embajada de Francia. Todo eso fue parte de una lucha. No tengo dudas de que antes de fin de año habrá un acuerdo con la empresa del supermercado para que construya a un costado, hemos avanzado con el polideportivo y soñamos con la posibilidad histórica cristalizándose en los terrenos, con un estadio, esperemos, en 2016. Esa es nuestra ilusión.
Posted on: Fri, 15 Nov 2013 14:19:07 +0000
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