Sólo a mi me pasan estas cosas. Empaqué un chorro de cosas y las envié expreso a Hangzhou. Cuando hice las maletas para llevar conmigo en el tren, noté que me quedaba demasiado. Pues iba como Santa Clos sin trineo por todo Cangnan hasta que llegué a Hangzhou. Me quedé un día allá y no tenía donde meter la ropa sucia. Ok, echo la ropa sucia en una bolsa plástica, llevo la mochila de la computadora y una maletita de las de llevar a mano en el avión. En fin, voy cargando con un chorro de cosas mas la maldita bolsa de ropa sucia. Llego a la estación del tren, voy arrastrando la maleta, la mochila que pesa como dos toneladas con la computadora y un chorro de cosas y la apestocita. Malrrayo parta, sacando el boleto del tren (alta velocidad que no existe en gringolandia porque allá son una mierda de país) se me encajó la apestocita de la maletita y había pantaloncillos con chillas de goma por todo el terminal. DIIIIIIIIITO SEA UN DOLOR. ¿Que qué hice? ¿Qué más pude hacer? Improvisar. Pues puse cara de gringo, imité lo más que pude el acento de sureño y escondí la bandera boricua. Para los chinos fue un gringo idiota el que estaba recogiendo pantaloncillos apestosos de las maletas de la otra gente. Jajaja.
Posted on: Sat, 13 Jul 2013 11:11:28 +0000
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