Valparaíso 3 de octubre 2013 ¡La Triestamentalidad no se tranza Se defiende! Estimada Comunidad Universitaria Presente: En vista de la compleja situación que atraviesa el Instituto de Historia de nuestra Facultad, en lo referido a sus próximas consultas triestamentales, es que como Centros de Estudiantes de la Facultad deseamos dejar de manifiesto a la comunidad Universitaria lo siguiente. 1. Entendemos que la problemática que hoy aqueja al Instituto de Historia, nos atañe y nos convoca como Facultad y Universidad. El conflicto es evidentemente político y obedece a distintas visiones sobre lo que se entiende por universidad y el cómo esta debe tomar sus decisiones. 2. Los Estudiantes creemos que la democracia debe ser parte de la práctica cotidiana en nuestra sociedad y en nuestras Instituciones educativas. No somos partidarios de una democracia limitada, consultiva, donde se nos priva de nuestro legítimo derecho de decidir el rumbo de nuestra casa de estudios, la democratización universitaria, desde nuestra perspectiva, pasa por una participación efectiva de todos y todas los miembros de la comunidad en las decisiones, desde las más simples, hasta las más fundamentales, como en este caso la elección de autoridades unipersonales. 3. Entendemos que nuestra universidad, así como el conjunto de las instituciones educativas en Chile, junto con ser masacradas y reprimidas durante la dictadura, fueron reconstruidas bajo un nuevo paradigma, creando universidades dependientes y serviles del mercado y anuladas en términos políticos, pasando de ser instituciones de creación a instituciones de reproducción, de espacios democráticos, a lugares profundamente autoritarios, donde la voluntad de las comunidades se reducía – en el mejor de los casos – a una simple opinión a considerar por los rectores antes designados por la dictadura, hoy elegidos solo por los académicos. Metodologías distintas, para un mismo espíritu antidemocrático instalado a punta de fusil durante la dictadura, al que muchos resistieron, pero que hoy es defendido incluso por quienes se autodenominan de izquierda. Es por ello, que a 40 años del golpe militar, exigimos que el tributo a nuestros muertos a manos de los asesinos del Estado, no sea una simple conmemoración durante la primera quincena de septiembre, que no sea solo un discurso ante un auditorio lleno, con Allende de fondo y banderas rojas en el aire. Exigimos en memoria de nuestro pueblo que la conmemoración sea un lucha por recuperar todo aquello que nos fue arrebatado, y les recordamos a todos quienes formaron parte de las multitudinarias conmemoraciones, que hoy nos estamos debatiendo entre la universidad democrática ganada en la reforma universitaria del 68 o la universidad autoritaria impuesta por Pinochet y sus secuaces en los tiempos oscuros de la dictadura. Por lo tanto, un marco legal heredado de quienes mutilaron la educación chilena, de quienes nos acallaron con balas, de quienes transformaron la universidad en una fábrica de capital humano, no puede ser un obstáculo, no lo fue en el pasado y no puede ser hoy un escollo o una excusa para avanzar por la recuperación de la universidad pública y democrática que como comunidad decimos defender. La legalidad dictatorial vigente en nuestra universidad ha sido rebasada por el espíritu democrático de nuestra comunidad, donde destacamos a los docentes de nuestra facultad, es por ello, que hoy nuevamente hacemos el llamado a seguir avanzando en esta línea, a no tranzar la universidad que queremos en pos del respeto de una norma que nos fue impuesta de manera arbitraria, llamamos a toda la comunidad, especialmente a los académicos a respetar el pasado del que somos hijos, a no dejar que la reforma universitaria sea una anécdota, a no dejar que se imponga el espíritu de la dictadura de los gorilas en nuestra facultad, los llamamos a ser consecuentes con sus prácticas y discursos en el pasado inmediato, que facilitaron la participación triestamental en la facultad de humanidades, que permitieron que el decano actual, profesor Carlos Martel, fuese electo, no solo por la comunidad legalmente constituida, sino también por los académicos a honorarios. 4. Argumentos como la aplicación de los nuevos EEOO de la universidad, tampoco puede ser esgrimidos para quitarnos la posibilidad de decidir respecto al futuro de nuestra facultad, porque el respeto a la legalidad vigente explicitado en los nuevos EEOO –ilegales por cierto, ya que no cuentan con la aprobación de los órganos correspondientes – ya fue rebasado anteriormente, los nuevos estatutos orgánicos no pueden ser una excusa para quienes en el pasado defendieron la democracia universitaria y soslayaron el DFL 1 y 2 que nos heredó la dictadura, para permitir la participación triestamental, siendo fieles a sus convicciones, entonces cabe preguntar, ¿han cambiado estas convicciones desde la última consulta triestamental o las autoridades – electas de manera democrática – hoy se escudan en la legalidad para imponer su parecer sin posibilidad de intervención de la comunidad? Tenemos la esperanza de que esto no es así, de que las convicciones democráticas de nuestra autoridades y profesores siguen intactas y que por lo tanto, se respetará la voluntad de la comunidad expresada en las elecciones triestamentales del 7 y 8 de Octubre 5. Tenemos la confianza de que los académicos de la facultad, respetarán el acuerdo al que suscribieron el 25 de Junio de este año, acuerdo que solo ratifica la profunda convicción democrática de nuestra comunidad. “El Claustro de Académicos de la Facultad de Humanidades, reunido en el día de hoy jueves veinticinco de julio de dos mil trece, luego de haber deliberado y escuchado la exposición de la Federación de Estudiantes de la Universidad, acuerda: Reafirmar la voluntad democrática y triestamental de la Facultad (y) reafirmar la práctica de participación triestamental en relación a los procesos de consulta para la nominación de autoridades unipersonales” 6. Por ello, es que hacemos un llamado a toda la comunidad de humanidades, para que defienda la democracia universitaria, llamamos a todos los integrantes de la carrera de historia a participar de sus elecciones triestamentales del 7 y 8 de Octubre, a los estudiantes a movilizar a nuestros compañeros, a no desconocer ni dar la espalda a aquello que tanto nos ha costado reconquistar, a los funcionarios a ser parte fundamental de este proceso, de tomar un rol activo, los instamos a entender que solo a través de la democracia, podremos impedir las arbitrariedades de las que muchas veces son presa e insistimos a los académicos a que sean consecuentes con sus discursos y sus prácticas políticas y que reconozcan los resultados de las elecciones anteriormente mencionadas, ya que estas representan la voluntad de nuestra comunidad, es a través de estas prácticas que se recupera aquello por lo que ustedes también lucharon y se reconstruye la universidad que hace 40 años quisieron destruir. “Nuestro régimen universitario aún el más reciente- es anacrónico. Está fundado sobre una especie de derecho divino; el derecho divino del profesorado universitario. Se crea a sí mismo. En él nace y en él muere. Mantiene un alejamiento olímpico. La federación universitaria de Córdoba se alza para luchar contra éste régimen y entiende que en ello le va La vida. Reclama un gobierno estrictamente democrático y sostiene que el demos universitario, la soberanía, el derecho a darse el gobierno propio radica principalmente en los estudiantes” (Manifiesto de la reforma universitaria de Córdoba, Argentina) EN LA DEMOCRACIA UNIVERSITARIA, ¡NI UN PASO ATRÁS! Se despiden Atte. Mesa de Representantes Sociología Mesa de Representantes Pedagogía en Filosofía Mesa de Representantes Pedagogía en Historia y Ciencias Sociales
Posted on: Thu, 03 Oct 2013 22:12:55 +0000
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