Y aquí (aunque no creo que le importe a nadie) mi análisis de la Conferencia Oeste de la NBA: OKLAHOMA CITY THUNDER: Mantienen prácticamente el mismo bloque que les llevó a las Finales hace un par de temporadas y que el año pasado cayó en segunda ronda por culpa de la lesión de Russell Wetsbrook. Se fue Kevin Martin, que el año pasado no llegó a cuajar como se esperaba, y llega Ryan Gomes. Los Thunder son Kevin Durant, actualmente el segundo mejor jugador de baloncesto del mundo, alguien que en el futuro será recordado como uno de los mejores de todos los tiempos. Importantísimo que Westbrook vuelva al nivel de antes de la lesión y que Ibaka siga creciendo. Lo de Perkins ya empieza a ser indefendible. Quedarán entre los cuatro primeros de la Conferencia y teniendo a Durant y Westbrook pueden ganar la NBA, pero siguen teniendo dos deficiencias importantes: falta anotación en la pintura y más banquillo. SAN ANTONIO SPURS: Los eternos Spurs, la dinastía de los 4 anillos. El año pasado nadie daba un duro por ellos y estuvieron a 5 segundos de ganar la NBA si no llega a ser por el milagroso triple de Ray Allen. Como dijo un famoso entrenador, nunca hay que minusvalorar el corazón de un campeón. Sí, Tim Duncan (el mejor ala pívot de la historia) tiene ya 37 añazos y Ginobili parece haber entrado en clara decadencia… pero Tony Parker está en el mejor momento de su carrera y Kawhi Leonard en las finales del año pasado demostró que puede ser una estrella. Equipo muy completo (Belinelli, Bonner, Diaw, Green, Splitter, etc.) pero con el problema de que sus principales estrellas ya son muy veteranas. La lógica dice que es casi imposible que ganen el anillo, e incluso que puedan llegar a las finales… pero también lo pensaba todo el mundo el año pasado. Nunca hay que descartar antes de tiempo al tándem formado por dos genios como Duncan-Popovich. DENVER NUGGETS: Se prevén malos tiempos para el equipo de Colorado. Despidieron inexplicablemente a un pedazo de entrenador como George Karl y no han hecho movimientos significativos tras el varapalo de la temporada pasada. Siempre es divertido ver jugar a un excéntrico imprevisible como JaVale McGee y Kenneth Faried tiene un futuro esplendoroso. Ty Lawson es el que manda, pero la estrella del equipo es sin duda Gallinari, alguien que nunca ha terminado de rendir a la altura de su calidad. Chandler, Foye, Hickson, Miller y Robinson contribuyen a una rotación de buen nivel pero lejos de ser deslumbrante. Pueden luchar por ser séptimos u octavos del oeste, pero sin posibilidad de ganar una sola eliminatoria. LOS ANGELES CLIPPERS: Son mi gran apuesta para este año. No les falta absolutamente de nada: acaban de fichar al, en mi opinión, mejor entrenador de la NBA, Doc Rivers. Tiene a uno de los tres mejores bases de la competición (Chris Paul), a uno de los tres mejores pívots (Blake Griffin), a uno de los mejores triplistas (J.J. Redick), a un magnífico base suplente (Darren Collison), a uno de los jugadores con más calidad y fantasía del planeta (Jamal Crawford, una de mis grandes debilidades), a un veterano de mucha clase (Antawn Jamison) y a secundarios que aportan mucho (Barnes, Hollins, Dudley, Green). Un lujazo de equipo. Si se lo creen, éste puede ser su año. MEMPHIS GRIZZLIES: Como viene siendo tradición en los últimos años, lo cimentarán todo en la defensa (el año pasado fue el equipo que menos puntos encajó) y en su pareja interior, muy probablemente la mejor de toda la NBA: Marc Gasol y Zach Randolph. Pero siguen teniendo graves problemas para la anotación exterior. Conley se ha consolidado como un base fiable, pero Bayless es una cabra loca que se puede cascar 10 mandarinas por partido. Veremos cómo se adapta Calathes a la NBA tras su paso por Europa. Mike Miller desatascará varios partidos, pero no se puede confiar demasiado en un jugador masacrado por las lesiones. Lo más seguro es que entren en Playoffs, pero el techo de las finales de Conferencia que alcanzaron el año pasado se antoja utópico. GOLDEN STATE WARRIORS: ¡Ojo con los Warriors! El año pasado dieron la campanada llegando a semifinales de Conferencia, practicando un baloncesto muy alegre, ofensivo y vistoso. Han sufrido la baja significativa de Jarrett Jack, pero la han cubierto decentemente con Toney Douglas. Y encima han conseguido fichar a una estrella muy versátil como Iguodala. Todos los que amamos este deporte, sentimos un placer inigualable al ver jugar a Stephen Curry, el mejor triplista de la NBA y una delicia de jugador, pura clase. David Lee probablemente seguirá a nivel All Star, Klay Thompson continuará siendo ese asesino frío y silencioso y Harrison Barnes el chico para todo. La única duda está en ver cómo tratan las lesiones este año al gran Andrew Bogut. La Conferencia Oeste está muy cara este año, pero en una eliminatoria pueden cargarse a cualquiera. Creo que como mínimo llegarán a Semifinales. LOS ANGELES LAKERS: Despiporre absoluto. Un equipo que va a salir esta noche con Shawne Williams de titular no es serio. Y Steve Nash al borde del geriátrico. Toda una cohorte de jugadores mediocres: Blake, Farmar, Hill, Johnson, Meeks. Una pareja interior, Gasol y Kaman, de calidad pero defensivamente más blanda que la mantequilla. Y su gran apuesta este año ha sido fichar a uno de los chupones más desesperantes de la Liga: Nick Young. De locos. Ni siquiera un Kobe Bryant en plena forma y totalmente recuperado de su lesión del tendón de Aquiles pueden salvar a los angelinos del desastre. Si entran en Playoffs será por la fuera de su escudo, pero no tienen argumentos baloncestísticos para ello. En caso de que se produzca el milagro, cero posibilidades de pasar alguna ronda. HOUSTON ROCKETS: Han conseguido fichar a la joya de la corona, Dwight Howard. Tienen los mejores ladrillos para cimentar un gran proyecto: una superestrella exterior (James Harden) y otra interior (Howard). Chandler Parsons es un jugón capaz de aportar muchísimo a ambos lados de la cancha, Jeremy Lin (más allá del ruido mediático) es un base competente y Omer Asik una presencia poderosa en la pintura. Tienen, además, jugadores de complemento muy apañados como Beverley, Brewer, Brooks o Casspi. Tal vez sea un poco pronto para pensar en el anillo, pero unas semifinales o finales de conferencia parecen un objetivo razonable. Un equipo que dará mucho que hablar durante los próximos años. UTAH JAZZ: Un equipo muy joven que se halla en reconstrucción, pero con muy buenos mimbres. Derrick Favors y Enes Kanter conforman uno de los frontcourt más atractivos y con mayor potencial de la competición. Les hacía falta desesperadamente un base y pescaron al mejor que había en el último draft, Trey Burke, mi favorito para ganar el premio “Rookie of the year” tras Oladipo. Gordon Hayward nunca ha llegado a convencerme del todo, pero se ve que este año le darán los galones de estrella. No se les puede exigir Playoffs por el alto nivel que hay en la conferencia, pero pueden superar perfectamente las 45 victorias. Una temporada para divertirse, coger experiencia y esperar a un ilusionante corto-medio plazo. DALLAS MAVERICKS: Un equipo muy cambiado que, como siempre, girará en torno al talento de Nowitzki. Tiene una muy buena pareja de bases con el español José Manuel Calderón y Devin Harris. Monta Ellis es el fichaje estrella: un anotador puro muy chupón, irregular, pero genial. Dalembert y DeJuan Blair son dos incorporaciones muy interesantes para la pintura. Quizás les falte un alero de nivel, Vince Carter ya no es ni una sombra de lo que fue. Sobre el papel tiene muy buena pinta, pero siempre es una incógnita saber cómo funcionará un equipo que ha introducido tantos cambios. No me atrevo a dar un pronóstico, les veo capaces tanto de entrar en Playoffs como de acabar con balance negativo. PORTLAND TRAIL BLAZERS: El bloque se mantiene, pocas sorpresas. Tienen un gran quinteto con Lillard-Matthews-Batum-Aldridge-Lopez y tres jugadores que pueden funcionar desde el banquillo como Dorrell Wright, Moe Williams y Thomas Robinson. La temporada pasada el rookie Damian Lillard fue una de las grandes sensaciones de la Liga, éste debe ser el año de su consagración. Un equipo que personalmente me da mucha pereza ver, durante los últimos tiempos siempre rondan o alcanzan los Playoffs pero luego caen en primera ronda. En fin, en Oregón siempre es el día de la marmota. MINNESOTA TIMBERWOLVES: El pupas, el equipo de la mala suerte. Los dos últimos años han conformado equipos muy competitivos, aspirantes a Playoffs, pero las lesiones se cebaron con ellos. Si este año están todos sanos, me mojo y apuesto a que por fin entran en Playoffs. Es probable que Ricky Rubio dé un salto cualitativo, y consiga rondar unos promedios de 15 puntos y 10 asistencias, aunque para ello deberá mejorar significativamente su lanzamiento exterior. Junto con la de Gasol-Randolph, la pareja interior Kevin Love-Pekovic es la mejor de toda la NBA. Gran fichaje el de la metralleta Kevin Martin, en un equipo que precisamente no iba sobrado de capacidad anotadora. Mucha curiosidad por observar los progresos del ruso Shved en su segundo año y el rendimiento del rookie Shabazz Muhammad, un jugador con poco físico pero mucha calidad. Un equipo bonito de ver al que por fin tiene que empezar a sonreírle un poco la fortuna. SACRAMENTO KINGS: Los Kings son sinónimo de anarquía, caos y ráfagas de genialidad y de estupidez a partes iguales. Tienen a DeMarcus Cousins, uno de los jugadores con más clase de toda la NBA… pero desgraciadamente está loco, siempre poseído por un temperamento absolutamente volcánico. Si consiguiese sentar la cabeza sería una superestrella sin discusión… pero en tres temporadas en la NBA aún no lo ha logrado, ojalá éste sea el año. Por lo demás, lo más interesante es ver a su poco convencional pareja de bases, Greivis Vásquez (eminentemente asistente) y Isaiah Thomas (eminentemente anotador), y al novato Ben McLemore, una de las piezas más codiciadas del pasado draft. Carl Landry es un buen fichaje y, pienso, un buen acompañamiento para DeMarcus en la pintura. No tienen ninguna opción de entrar en Playoffs, pero es un equipo que siempre tiene cosas interesantes por ver. NEW ORLEANS PELICANS: Han hecho movimientos muy interesantes este verano. Han fichado dos jugadores de calidad como Jrue Holiday y Tyreke Evans, que junto con Eric Gordon (ojalá a este pedazo de crack le respeten las lesiones), Austin Rivers y Anthony Morrow conforman un backourt de muchos quilates y que asegura muchos puntos. Ryan Anderson es un seguro de vida y Anthony Davis debe confirmar todo lo que apuntaba (que es muchísimo) cuando fue elegido como número uno del Draft de 2012. Su principal carencia es que le falta un center de garantías, Stiemsma y Withey se quedan un poco cortos. Pese a ello, un equipo bonito, interesante, con amplísimo margen de mejora. No se les puede pedir Playofss, pero sí entre 10 y 15 victorias más que las que consiguieron el año pasado. PHOENIX SUNS: A priori y con cierto margen, el peor equipo de la conferencia. Envían a Gortat a Washington para hacerse con Okafor, y ahora dicen que va a perderse toda la temporada por una grave lesión de cuello. A perro flaco todo son pulgas. Sólo llama la atención ver a una base físicamente espectacular como Eric Bledsoe y al pívot novato Alex Len, por el que sorprendentemente apostó la franquicia de Arizona en el último draft. Sólo Goran Dragic y Channing Frye son jugadores de cierto nivel; el resto, una banda. Casi imposible que alcancen unas tristes 30 victorias. Faltan pocas horas para que empiece el espectáculo, ya hay nervios, me despido oficialmente de las 8 horas de sueño para los próximos meses y le doy la bienvenida a las legañas que tanta compañía me harán. I LOVE THIS GAME!!!
Posted on: Tue, 29 Oct 2013 19:53:39 +0000