Y aunque el alma a veces recita estoy llena de inquietudes hasta el alba. Qué es pues la fe? Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve. Porque por ella alcanzaron buen testimonio los antiguos. Ahora si creo en aquél que resucitó de entre los muertos en qué necesitaré ser entrenada? en la PACIENCIA. No perdáis, pues, vuestra confianza, que tiene grande galardón; porque os es necesaria la paciencia, para que habiendo hecho la voluntad de Dios, obtengáis la promesa. Y la voluntad de Dios es buena, agradable y perfecta como está escrito No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. Por eso vale la pena no confiar en las emociones aunque a veces parece uno vacilar en la prueba. Si hacemos la voluntad de Dios alcanceremos las promesas que él dejó para aquellos que aman su nombre. No hay que desanimarnos, pues Jesús dijo: Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer. Él dijo también Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho. Por tanto animémonos en conocer más al Señor Porque sus pensamientos no son nuestros pensamientos, ni nuestros caminos sus caminos. Como son más altos los cielos que la tierra, así son sus caminos más altos que nuestros caminos, y sus pensamientos más que nuestros pensamientos
Posted on: Fri, 22 Nov 2013 19:37:04 +0000
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