ÉPOCA DORADA DE NOGALES Por: Pedro Gabriel González Avilés EL RAYO DE JALISCO: “ÍDOLO DE NOGALES” Corresponde el turno de recordar a uno de los luchadores más carismáticos que visitó los cuadriláteros de la Plaza de Toros de Nogales y Los Flamencos Drive Inn en los años sesenta y setenta. Ubicado dentro de los grandes luchadores de la Época Dorada de la Lucha Libre, junto al Santo, Blue Demon, Huracán Ramírez, El Solitario, Mil Mascaras, Dr. Wagner, Ángel Blanco, Ray Mendoza, Cavernario Galindo, Karloff Lagarde, René “Copetes” Guajardo, Los Hermanos Espanto, Aníbal, Black Shadow, Rolando Vera, entre otros, un asiduo visitante a los encordados de la Plaza de Toros de Nogales y Los Flamencos Drive Inn de Don Pedro González Duarte, era el “Rayo de Jalisco”, quien con un vistoso estilo de luchar en donde destacaban sus topes en reversa, este gladiador se convirtió en un ídolo para los aficionados a la lucha libre de Nogales y de otros lares, entre ellos, mi buen amigo y director de este medio informativo, Licenciado Manuel Rivera Galindo, el gran Superchef Carlos Haro Ruvalcaba, con residencia en Los Ángeles California, Alicia Rosas Pérez y un servidor, que siempre sostuve que “El Rayo” era mucho mejor luchador que “El Santo”, lo que me valió algunos intercambios de palabras con mis amigos que idolatraban al enmascarado de plata. Maximino Linares Moreno es el nombre real del hombre que le dio vida por casi mas de 30 años al Personaje del “Rayo de Jalisco”... Máx. Linares Nació un 22 de noviembre de 1932 en las cercanías de Milpa Alta, Distrito Federal y apenas a los 18 años, en Tulancingo, había decidido nacer para la Lucha Libre, un deporte que abrazaría por siempre y en el cual se tornaría en una Leyenda. Antes de luchar como el Rayo de Jalisco tuvo varios nombres. Es muy común que haya casos en que un luchador al inicio de su carrera lo haga con un nombre diferente al que le dé la fama, y Don Máx. Linares no fue la excepción, pues en febrero de 1950 debutaba ya con el nombre de “Mister Misterio”, posteriormente en la cuidad de México debutó bajo el nombre de “Águila Negra”. En 1954, se presentó en Torreón, Coahuila, luego de haber afinado sus conocimientos bajo la tutela de su propio hermano (también Luchador) Tony Sugar, enfrentando a Ricardo Chávez y utilizando el nombre de batalla en los cuadriláteros en los que practicó en esa época la lucha libre; “Doctor Curtis”. En 1957 Debuta en Guadalajara como “Tony Curtis”, pero 3 años mas tarde, en el año de 1960, fue bautizado en Aguascalientes como “El Rayo” y finalmente, en 1961 en Ciudad Juárez, Chihuahua utilizó ya el nombre completo de “Rayo de Jalisco”, que tanta fama y seguidores le diera. Esa fue la prehistoria, para 1962 se presenta en Guadalajara, Jalisco, pero le prohibieron ponerse “Rayo de Jalisco”, dado que había un luchador colimense, Fili Espinoza, que ya portaba ese nombre. Finalmente Fili le accede el nombre y el nuevo Rayo de Jalisco debuta en ese mismo año en la Coliseo Tapatía frente al Enfermero. Este fue considerado su debut oficial con ese nombre y ese fue el comienzo de un camino deportivo que solo le depararía éxitos y Máx Linares ya comenzaba a construir con su esmerado y tesonero esfuerzo su propia Leyenda. A partir de ese momento el Rayo de Jalisco comenzó a cosechar triunfos, el primero de ellos fue el Campeonato Welter y Campeonato Medio de Occidente, siendo 1963 el año de su consagración, ya que sucesivamente obtuvo una serie de triunfos muy sonados: la cabellera de “Chino Chow”, además de que en su camino se le atravesó un Enmascarado Negro que a toda costa quiso destapar al inventor del tope en Reversa, este contrincante duro se hacia llamar “La Bestia”, quien vio caer su tapa ante el Hombre de la máscara con un Rayo en la frente, formó una gran dupla con quien irónicamente 26 años mas tarde perdería su máscara : El Gran Manotas; “Blue Demon”, en el año de 1963 ganó el Campeonato Mundial de Peso Medio de la NWA destronando a Rene “Copetes” Guajardo” y fue designado como el Mejor Luchador de México en ese año. De ahí nadie pudo detener su vertiginosa carrera de racha triunfal, sus inolvidables topes en reversa y en serie hacían de “El Rayo de Jalisco” un luchador casi invencible, pues todos quedaban noqueados en la lona cuando don Máx. Linares les conectaba un tope en pleno rostro o en el pecho, formó sociedad con la máxima leyenda de la lucha como lo fue “El Santo”, su fama fue tal que ha sido considerado una gran Leyenda solo comparada con el mismo Santo, Blue Demon y Black Shadow, además con el mismo Mil Mascaras con quien compartieron créditos en varias de sus películas, una de ellas “Los Campeones Justicieros”, además de haber recreado una de las incógnitas mas apasionantes de la lucha libre, y como dato adicional de este gladiador; es que en su nombre de batalla defendía un Estado del cual irónicamente no era oriundo y mucha gente creyó por años que el Rayo si era originario del bello Estado de Jalisco. Su carrera en los sets cinematográficos se da al lado de otros famosos luchadores enmascarados. Sus películas incluyen: “Superzam El Invencible” (1971), “El Robo de las Momias de Guanajuato” (1972), “Vuelven Los Campeones Justicieros” (1972) y “El Triunfo de los Campeones Justicieros” (1974). Los logros más importantes de su carrera, además del Campeonato Mundial Medio, al que le dio lustre, fueron la cabellera de “Chino Chow” y las máscaras de “La Máscara”, “La Bestia”, “Guerrero Negro”, “Mr. Sangre”, “Los Hermanos Muerte”, haciendo pareja con otro gran luchador “Huracán Ramírez” (Don Daniel García). Durante un Homenaje a Blue Demon, el Rayo de Jalisco tuvo serias diferencias con él, a tal grado de apostarle la mascara al recién retirado Demonio Azul, quien no rehusó al reto y fue así como un domingo 30 de julio de 1989 y ante un lleno impresionante en la Monumental Arena Monterrey; El Gran Rayo de Jalisco perdió su cotizada mascara frente al Manotas; dos grandes Luchadores de todos los tiempos chocaron y fue así como conocimos que, quien se escondía por mas de 20 años tras la mascara Negra con un rayo cruzado era Maximino Linares Moreno... Quien después de perder su mascara luchó muy poco y se retiró a vivir de sus recuerdos, pero lejos de quedarse en el olvido se convirtió en lo que es hasta ahora: una Leyenda, la del Rayo de Jalisco, misma que continuó su hijo. Una Leyenda que, por ello, no muere para siempre, pues sus hazañas quedaran grabadas en la historia y en el corazón de los aficionados. Un nombre de prosapia que subsiste, gracias a quien, sin equivocarse le heredó nombre y mascara, “Rayo de Jalisco Jr.”, quien lo sigue portando con dignidad, orgullo y brillantez... Así como sus famosos topes en reversa, que para los nogalenses son inolvidables, así como también lo son las luchas efectuadas en contra de René “Copetes” Guajardo, Benny Galant, “El Enfermero”, Ray Mendoza, Karloff Lagarde, “El Cavernario Galindo”, Sugi Sito, “El Cobarde”, “El Espectro”, los Hermanos Espanto I y II, Rizado y Rodolfo Ruiz, Septiembre Negro, “El Perro Aguayo”, El Chino Chow, entre otros muchos luchadores que escapan a mi memoria, el Rayo tenía muchos amigos y familiares en Nogales, por lo que no resultaba extraño que anduviera de visita en la frontera. Hasta aquí nuestros comentarios sobre un luchador que supo ganarse el corazón de todos los nogalenses, hasta la próxima si nuestro Dios así lo dispone.
Posted on: Fri, 16 Aug 2013 19:20:47 +0000