3,9-15 El hombre ante la obra de Dios. Esta sección prolonga - TopicsExpress



          

3,9-15 El hombre ante la obra de Dios. Esta sección prolonga la anterior exposición sobre el tiempo (Ecl3,1-8), volviendo a la forma habitual de reflexión. La regularidad de los tiempos parecía sugerir que su cabal co­nocimiento garantizaría el provecho, la ga­nancia del hombre. Yeso es precisamente lo que cuestiona Qohélet, repitiendo la inicial "pregunta programática" (Ecl3,9; véase Ecl1,3).Esta pregunta, que precedía al poema de los ciclos (Ecl 1,4-1), cierra ahora el poe­ma de los tiempos, anticipando la respuesta negativa que será justificada por una argu­mentación escalonada en tres etapas: Dios, creador de todo, da al ser humano una tarea imposible y desproporcionada para sus ca­pacidades (Ecl3,10-11), pero también le con­cede una felicidad sencilla y accesible (Ecl 3,12-13), por lo que al hombre no le queda más salida que aceptar el designio divino y sus propios límites, a sabiendas de que no puede dominar ni transformar la realidad (Ecl 3,14-15). Ecl 3,10 repite, con leves variaciones, el pensamiento de Ecl 1,13 Y contempla la ta­rea que Dios impone al ser humano, refiriéndola ahora a toda la actividad humana descrita en el poema precedente. La pers­pectiva es optimista, como se sugiere en Ecl3,11: Dios ha creado un mundo hermoso y ordenado (se advierten claras reminiscencias de Gn 1) y lo ha puesto a disposición de la observación y de la comprensión humanas. Pero, en contra de las pretensiones de la tra­dición sapiencial, el hombre con toda su sa­biduría es incapaz de comprender y explicar la obra divina (Ecl 3,11b). Su felicidad recompensa no será, pues, producto de con­quista personal, sino humilde aceptación de los dones divinos (Ecl 3,12-13). La claudicación de sus propios sueños y afanes ante Dios abren al hombre a la adecuada religio­sidad, que Qohélet formula con la idea del "respeto/temor de Dios" (Ecl 3,14), expre­sada aquí por primera vez y repetida a me­ nudo en el libro. No se trata tanto de "mie­do", cuanto de una actitud reverencial que implica reconocimiento de su transcenden­cia, aceptación de su voluntad y lúcida toma de conciencia de la distancia insalvable entre Creador y criatura.
Posted on: Wed, 31 Jul 2013 07:04:16 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015