APLICATE EL CUENTO, PORQUE SOMOS EL EJEMPLO DE LA INDECISION, POR - TopicsExpress



          

APLICATE EL CUENTO, PORQUE SOMOS EL EJEMPLO DE LA INDECISION, POR ELLA, LOS MEJORES HIJOS DE LA PATRIA , MUEREN SIN VER SU SUENO LOGRADO. POR LA INDECISION PREFERIMOS MORIR, TIRANDONOS AL MAR LLENOS DE TIBURONES O DECIR QUE NOS MORIMOS EN HUELGA DE HAMBRE, SI AMBAS COSAS TE LLEVAN A LA MUERTE. ESTAMOS INDECISOS, ENTRE LAS COSAS QUE NO CONDUZCAN A LA LIBERTAD CUAL APLICAR, PORQUE LA REAL NI PENSARLA.. SOMOS ASI. HOY, EL PRESIDENTE DE ESTE PAIS, TIENE LA INDECISION, SABE QUE HACER ALGO ES UN PROBLEMA, NO HACERLO TAMBIEN. DILATA LA EJECUCION, SOMO SI EL HECHO DE LOS MUERTOS POR EL GAS FUERA FUTURO, PRESIDENTE FUE PASADO, EL FUTURO ES LO QUE LE CORRESPONDE A USTED. La indecisión DE MAMERTO MENAPLACE. Lo habían agarrado en flagrante delito de robo, y no existían circunstancias atenuantes que lo justificaran. A pesar de todas sus negativas no pudo evitar que la justicia lo mandara a la muerte. Cierto, había tratado de mostrarse sereno y había logrado impresionar a sus mismos jueces. Todavía le quedaba un poco de humor, y decidió jugarse hasta la última carta. Trataría al menos de ganar tiempo, para vivir un rato más. Cuando le leyeron la sentencia que lo condenaba a la horca, la escuchó con calma, y concluyó la sesión preguntado si tendría la oportunidad de expresar su último deseo. Era imposible que se lo negasen. Y así fue. Se lo concedieron, antes aún de averiguar de que se trataba. -Quisiera – dijo – ser yo mismo quien elija el árbol en cuya rama tendré que ser ajusticiado. Aunque la petición pareció a los jueces un tanto romántica para lo dramático de las circunstancias, no hubo inconvenientes en concedérsela. Le designaron un piquete de cuatro guardias para que lo acompañaran en el recorrido por el bosquecito de las afueras de aquella vieja ciudad medieval, en la que este suceso se desarrollaba conforme a las costumbres y procederes de la época. Más de tres horas duró la caminata, que impacientó a todos, menos al interesado, que gastaba su tiempo desaprensivamente observando con superioridad e ironía cada árbol y cada gajo que podría ser su último punto de apoyo sobre esta tierra de la que se despediría en breve. Los miraba y estudiaba minuciosamente, para desecharlos luego casi con desprecio. No sería una miserable planta con tantos defectos la que tendría el honor de cargar con su partida. De esta manera fue pasando de árbol en árbol, hasta que hubo inspeccionado todos los posibles. De nuevo ante el juez, expresó así sus conclusiones: -¡Señor juez! ¿Quiere que le diga la verdad? No hay ninguno que me convenza. Murió lo mismo. Y sin haber elegido. Tengo dos amigos. Uno de ellos ha llegado a la convicción de que debería consagrar su vida a Dios. Pero todavía no ha encontrado ninguna congregación que lo convenza. El otro cree en el amor. Pero no cree en las mujeres. Me temo que los dos van a morir sin haber elegido.
Posted on: Sun, 01 Sep 2013 14:16:55 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015