Me duele la cabeza por unos inadaptados hinchas, y aquí va mi reflexión. Yo soy hincha aparentemente de un cuadro de intelectuales, de gente que sabe ubicarse a pesar de que pierda o gane, son esos valores que en 1899 llevaron a fundar el primer club criollo de América. Esos hombres que pertenecían a las élites de Montevideo, decidieron fundar un club en base a los valores y el respeto. Este último año decidí acompañar a mi club a través de las diferentes canchas, y por eso puedo decir que yendo a la cancha o saliendo de la misma (sea cuál sea el resultado) ha respetado al el servicio de transporte y de los montevideanos que viajan en ellos. Porque los señores pasajeros nada tienen que ver con mi ida o venida del estadio, por eso se los respeta, tratando siempre de ser educados. Ayer tuve la mala idea de ir a festejar los 225 años del proceso fundacional de mi ciudad natal, entonces fui a cenar con mi hermano a Portones, a eso de las 10:27 en Av Brasil y la Rambla ya la situación era bastante complicada; pero lo pero fue el regreso. Yo creo la verdad que todo el mundo tiene derecho a festejar el aniversario de su club sin molestar al otro, porque si bien la libertad es libre, mi derecho termina donde empieza el otro. Ese derecho de respeto en mi caso fue avasallado por un grupo de 40 inadaptados hinchas del Club Peñarol que decidieron tomar el 121 en Bv. España (la mayoría tomados y fumados), aparte de cantar y hacer apología del delito y consumo de estupefacientes, lo que más me molestó fue la falta de respeto hacia el pasaje que nada tenía que ver con ellos, y la falta de respeto a la señora conductora del ómnibus que tuvo que frenar un par de veces para decirles que se calmaran. La verdad es que Juan Salgado puede sentirse contento, porque los vidrios de ese ómnibus son irrompibles (porque los golpes constantes que recibieron en la arenga no los rompieron nada los rompe), aunque no el plástico del techo ya que los inadaptados lo terminaron rompiendo. La verdad tuve miedo por mi integridad, yo soy del interior, y he estado en más de una generala (y con luz apagada), y la verdad nunca me había pasado eso de estar en medio de una turba y sentirme inseguro. Por último los insultos porque no cantábamos con ellos me hizo pensar en la encuesta de Cifra, y la verdad prefiero calidad y no cantidad; con eta gente que no respeta al otro el fútbol cada vez esta más enfermo, y la familia cada vez más lejos del deporte más popular que hace nuestra cultura. Da verdaderamente para reflexionar, sea del cuadro que seas, si para vos tu cuadro te lleva la vida y podes llevarte la del otro, lo mejor que le podes hacer es alejarte lo más posible del deporte. Yo quiero una hinchada que aliente en la cancha, y que sepa respetar al diferente. Buen Sábado.
Posted on: Sat, 28 Sep 2013 14:21:25 +0000
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