Mi barrio era un damero de calles de tierra limitado por las vías del FC Mitre (vía alta) al Sur, la avenida López y Planes al Oeste, las vías del FC Belgrano (vía baja) al Este y al Norte por la cancha de Gimnasia y Esgrima, ese club que nunca llegó a Primera B y la avenida Fray Cayetano Rodríguez, donde ahora está la escuela Bolivia esa que regaló Carlos Monzón. Pero entonces en los días de mi adolescencia inocente y aniñada de los años 60 solo era un baldío adonde llegaban los parques de diversiones y los circos. En él se podía ver la piedra fundamental de la escuela Bolivia –databa del año 1945-… y los yuyos amenazaban con perderla en la nebulosa de los tiempos hasta que Carlitos la concretó en los años 70 y pico. Una prueba de que el incumplimiento de promesas de los gobernantes no es un mal reciente sino que tiene una larga y amplia cuan deleznable trayectoria. La mayoría de las calles transversales a la López y Planes (por cuya parte central circulaban los inolvidables tranvías, y donde quedaba el cine Gran Rex, el habitáculo de Tarzán y el Llanero Solitario de los matinés de los domingos), decía esas calles estaban bordeadas por enormes tipas y paraísos de fragantes flores lilas y casitas bajas que eran habitadas por familias de españoles, turcos, polacos, alemanes e italianos (más adelante muchos paraguayos). Calles de tierra por las que en las siestas aparecía la Solapa, una mujer de edad indefinida (de tan vieja), vestida de blanco o negro por las noches. “¡no salgas a la calle a la siesta que anda la Solapa!”, era la advertencia de las madres que jamás obedecimos y, por supuesto , nunca vimos a la Solapa en cuestión una especie de duende como el Pombero o el Yacy Yateré, es que el vagar siestero tenía como atractivos el asalto a los cultivos de los gringos (italianos) en busca de manzanas verdes o granadas maduras o en la recolección de pisingallo, una frutita silvestre que no existe en Misiones. (Esta historia continúa)…
Posted on: Mon, 19 Aug 2013 02:29:51 +0000