Nunca he sido de esas que demuestran del todo sus sentimientos a las personas que aprecia, y estoy segura de que nunca lo seré. A decir verdad, con el paso del tiempo me veo igual a como soy ahora. Quizás con más enseñanzas en la espalda, con más tropiezos en las rodillas, con más cicatrices en las manos, y con más historias en el alma. Pero seguiré siendo la misma, soy diferente, lo sé y no lo puedo cambiar, me gusta como soy y aunque a veces me sienta un ser de otro mundo ante las demás personas, a fin de cuentas soy un ser humano ¿y que creen? duele. Duele que me juzguen por cada cosa que hago, por cada cara que pongo, por ser distinta. Soy un ser humano igual a todos, refiriéndome a que tengo inseguridades, miedos, complejos, problemas, básicamente todo lo que tienen ustedes, sólo que con un estilo de vida diferente que yo misma elegí. Crecí y no puedo tolerar que me digan como debo llevar mi vida, yo misma me construyo mi camino, y no siempre crecer significa cambiar, a veces significa adquirir nuevos conocimientos. A veces significa avanzar, seguir hacia adelante; aprender. Siempre hay cambios, pero también hay que ser consciente de que los cambios pueden ser de distintas formas. Físicamente todos cambiamos a lo largo de la vida, mentalmente también lo hacemos, yo lo hice radicalmente. El tiempo es capaz de cambiar a las personas, pero no siempre es capaz de cambiar los miedos, las inseguridades, los complejos, y los problemas de las personas. Quizás ayuda a disminuirlos, o en la mayoría de las veces, te enseña a vivir con ellos.
Posted on: Wed, 13 Nov 2013 15:16:24 +0000
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