Y entrando el ángel donde ella estaba dijo: Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tu entre las mujeres. Lucas 1: 28 Hace un instante compartíamos esta palabra con el personal de la empresa, un relato maravilloso que nos impulsa a tomar en todo momento la actitud de María, la joven virgen, una mujer de fe, temerosa de Dios, que antes que cualquier circunstancia o peligro natural eligió obedecer a Dios, y por sobre todas las cosas rescatamos la visión de esta mujer de coraje, que vió mucho mas allá que sus ojos naturales, ella vió el propósito de Dios para su vida y se dispuso. Antes de que el ángel le dijera ella ya entendió que para Dios no hay nada imposible (vers. 37). Cuando Jesús viene a nuestras vidas nuestro campo visual ya no queda limitado por nuestros ojos naturales, podemos llamar a las cosas que no son o todavía no vemos como si ya fueran y ahí todo empieza a tomar sentido en nuestra existencia. Amen, aleluyah
Posted on: Wed, 20 Nov 2013 10:52:06 +0000
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