ANTES DE DORMIR LEELO POR FAVOR... Salmo 31:5 En tu mano encomiendo mi espíritu: Tú me has redimido, oh Jehová, Dios de verdad. Estas fueron las últimas palabras que Lucas pone en boca de Jesús en la cruz: “Padre, en tus manos encomiendo mi espíritu. Dicho esto murió” (Luc 23,44). Es muy posible que nuestro Redentor recitara todo el salmo ya que de salmos se componía la oración de todo buen judío y él fue el mejor de todos los judíos. Es una buena oración para el momento en que nos disponemos a descansar. No sabemos si el Señor nos llamará en la noche. Si así fuera, nada mejor que poner nuestra vida en las manos misericordiosas de nuestro Padre para que él en su bondad nos perdone nuestro desamor por la muerte de su Hijo, que desde la cruz justo antes de expirar, puso su vida en sus manos de Padre
Posted on: Wed, 03 Jul 2013 05:27:52 +0000
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