EL EQUIPO ECONOMICO Y SU DERROTA IRREVERSIBLE ANTE EL MERCADO. Es tal el berenjenal en que ha perdido racionalidad el rumbo económico, que a pesar de la leve mejora operada en las espectativas de los operadores, no es dificil antipar acontecimientos que llevarán al oficialismo a decisiones extremas. La causa de tal pronóstico es el desorden que priva en el funcionamiento del equipo económico, que parecería seguir irremediablemente condenado a cubrir los desastres de quien en realidad es el jefe del estado mayor en la lucha contra el mercado. No se entiende como todavía no se han rebelado los obligados subalternos del secretario de comercio interior, ante la sucesión de fracasos que han jalonado su trayectoria oficial. Donde haya intervenido lo hizo convencido de que con actos de fuerza y patotería iba a doblegar al mercado. Nunca lo logró con sus alocadas decisiones. Fueron solo intentos que se estrellaron contra el muro que construyen las fuerzas del mercado. Hay que convenir en que los propósitos que perseguía resultaban contradictorios con la política monetaria. No podía ganar nunca contra la inflación si por un lado fijaba precios máximos, restringiendo la oferta de bienes y por el otro la emisión estimulaba la demanda. En esos términos, su irracionalidad derivó en la creación de un ambiente de resistencia intelectual por parte de los productores. Ello impuso restricciones a los proyectos de inversión a lo que se sumó el temor que despertó el atropello de la expropiación de Repsol, murió la idea de competir en un mercado agredido por el gobierno y la falta de seguridad jurídica hizo el resto para determinar una pérdida de credibilidad que es fatal para todo país. En medio de ese clima y ante el avance de la demanda de moneda extranjera para cubrirse contra la pérdida de valor de la propia apareció la idea de crear ese papelito llamado CEDIN, cuyo fracaso es tan evidente como manifiesto el error de haber caído en la trampa de una esperanza sin argumentos. Transcurrido el primer mes de su lanzamiento solo se suscribieron 24 millones de dólares cuando la previsión oficial indicaba que se tomarían 4000 millones de dólares en dos meses. El mercado ha llegado a su veredicto. No se activa el mercado inmobiliario ni hay interés en cambiar billetes de una moneda que opera en términos reales por algo que no es más que un pagaré suscripto por un deudor consuetudinario que no cumple sus compromisos y que agrede permanentemente al mercado. Esa consecuencia deriva de la incapacidad de un funcionario que no razona, cuyo estilo es la amenaza y la agresión. Ignora que el mercado es una fuerza integrada por innumerables pensantes que frente a la negación de sus leyes, habrán de proteger su patrimonio y su forma de vida. Pero la responsable de este dislate es sin duda la presidente quien lo sostiene y lo utiliza como ariete contra el mercado, porque así lo determina su desconocimiento de los temas económicos.
Posted on: Sat, 17 Aug 2013 15:56:28 +0000
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