El Sistema de la Iglesia Ramera “Salid de ella, Pueblo - TopicsExpress



          

El Sistema de la Iglesia Ramera “Salid de ella, Pueblo mío” PARTE 6 "B" --------- BALBUCEO La Babilonia espiritual se caracteriza por el balbuceo. El Balbuceo es charla inútil. “En las muchas las palabras no falta pecado, pero el que refrena sus labios es prudente” Proverbios 10:19. Palabras, palabras, palabras. ¿Has oído decir de algunos que solo balbucean y balbucean? Con frecuencia, sus palabras no tienen sentido, son aburridas, tóxicas. Hablan cuando necesitan estar escuchando. Responden antes de escuchar. De los tales, Proverbios 18:13 dice:” Al que responde palabra antes de oír, le es fatuidad y oprobio”. De tal gente se dice que no tiene oídos. Proverbios describe la palabrería de Babilonia en estos versículos: “El que mucho abre sus labios, tendrá calamidad”. Proverbios 13:3. “En la boca del necio está la vara de la soberbia” Proverbios 14:3. “Las vanas palabras de los labios empobrecen” Proverbios 14:23. “La boca de los necios hablará sandeces” Proverbios 15:2. “Los labios del necio traen contienda; y su boca los azotes llama. La boca del necio es quebrantamiento para sí, y sus labios son lazos para su alma. Las palabras del chismoso son como bocados suaves, y penetran hasta las entrañas.” Proverbios 18:6-8. “¿Has visto hombre ligero en sus palabras? Más esperanza hay del necio que de él”. Proverbios 29:20 Algunos hablan y nunca dicen nada. Algunos hablan hasta que dicen algo. Pocos son los que hablan cuando tienen algo que decir. Pedro escribió: “Si alguno habla, hable conforme a las Palabras de Dios” 1ª Pedro 4:11. ¡Ojalá fuera hoy ese día! ACUMULACIÓN DE CONOCIMIENTO ---------------------------------------- La Babilonia espiritual se caracteriza por la acumulación de conocimiento. El incremento tan extremadamente rápido del conocimiento en el día de hoy, es predicho en Daniel 12:4 “Muchos correrán de aquí para allá, y la ciencia se aumentará.” La hora que vivimos ha sido clasificada como la era de la información. El conocimiento se extiende como hongos. Cada nueva pieza de conocimiento multiplica lo que aprendemos. Parece no haber límite al conocimiento que podemos acumular hoy. Parece no haber límite a lo que los humanos podemos hacer con el conocimiento que acumulamos. Por causa de lo que sabemos, nuevos umbrales en el espacio se van cruzando constantemente con cada lanzamiento de éxito. Los ordenadores y sus programas se quedan anticuados para cuando llegan al mercado. Se hacen operaciones quirúrgicas grandiosas sin incisiones intrusivas. Guerras de alta tecnología pueden ser ganadas en cuestión de días. El conocimiento se hace más poderoso que el dinero. Dependemos de nuestra capacidad para investigar, explorar examinar, conocer, entender y descubrir cosas. Tenemos un apetito insaciable de más conocimiento, para arrancar las cosas desde la raíz para ver de qué están hechas. Nos hemos convertido en una sociedad de tecnomaníacos. Presumimos de poder resolver nuestros problemas con más conocimiento. El conocimiento es una de nuestras Babilonias, uno de nuestros lugares altos, y somos el dios que adoramos. El conocimiento que lleva a la auto-idolatría es el conocimiento del bien y del mal. Cada año, hombres y mujeres se gradúan de seminarios a miles, para llenar púlpitos por todo el mundo. Aplicarán las más altamente críticas y casi ateas interpretaciones de las Escrituras, que han aprendido. Están en bancarrota espiritual por causa de un aprendizaje tan noble, y llevan a la bancarrota a sus seguidores. Pablo tendría hoy el mismo temor que tuvo por los corintios:”Pero me temo que como la serpiente engañó a Eva, así vosotros también hayáis sido engañados para apartaros de la simpleza que hay en Cristo Jesús.” 2 Corintios 11:3. SECTARISMO ---------------- La Babilonia espiritual se caracteriza por el sectarismo. Después de que la gente de la tierra de Sinar se hubiera propuesto en su corazón edificar una ciudad, una torra, y un nombre para ellos mismos, el Señor bajó y dijo “descendamos y confundamos allí su lengua”. El lugar fue llamado Babilonia porque el Señor confundió su lengua y los esparció por todas las partes de la tierra. Génesis 11:2-9. Puesto que esta Cosa que llamamos iglesia es de la carne y es un aspecto de la Babilonia espiritual, está bajo la misma maldición de confusión y sectarismo. Está fundada en el sectarismo, e incluso florece sobre ello. Promociona la desunión del cuerpo de Cristo. Su misma existencia depende de cómo cada sistema de iglesia difiere uno de otro. Esto se ve fácilmente en la forma en que sus nombres anuncian sus diferencias. El sectarismo dice: “Yo soy de Pablo, Yo soy de Apolos”: Pablo acusó a los creyentes corintios de ser “carnales” y “meros hombres” por causa de su sectarismo. Había celos y contiendas en medio de ellos. Ponían su identidad en personalidades (Pablo, Apolos, Cefas) en lugar de ponerla en la persona de Jesucristo. Apolos y Pablo era ambos siervos del mismo Jesús. Uno plantaba; el otro regaba; pero era Dios quien daba el crecimiento. El que planta y el que riega no es nada, sino que es Dios quien importa, porque El es el que da el crecimiento. Cuando entendemos que todos somos compañeros de obras, el campo de Dios, el edificio de Dios, entonces el sectarismo será quitado de en medio. La desunión en el cuerpo de Cristo se convierte en unidad, unicidad. Solo puede haber un fundamento, Jesucristo. Si lo que tenemos es sectario y contribuye a la desunión del cuerpo, ha sido edificado sobre el fundamento equivocado. 1ª Corintios 2. Una vez que vemos esta verdad, no deberíamos tener necesidad ni de nombrarnos a nosotros mismos para poder identificar de lo que vamos. Todos estamos en los negocios del Padre, dejando que el Espíritu Santo que mora en nosotros nos edifique como el Templo del Espíritu Santo. “Si alguno destruyere el templo de Dios, Dios le destruirá a él, porque el templo de Dios, el cual sois vosotros, santo es”. 1ª Corintios 3:17. Cuanto más nos separamos del cuerpo de Cristo, más destruimos el templo del Espíritu Santo. RELIGION ------- La Babilonia espiritual se caracteriza por la religión. Aunque las masas de almas parecen aborrecer la religión, sea de la clase que sea, nuestra naturaleza de pecado tiene una tendencia hacia ello, porque eso se halla bajo la condenación y las obras. El primer Adán fue arrastrado lejos de la presencia de Dios (condenación), y recibió el mandato de labrar la tierra y comer su fruto con el sudor de su frente (obras). Génesis 3:19,23. Puesto que el hombre caído del pecado y de la carne está bajo la maldición, siente vergüenza y quiere hacer algo para sentirse bien. El hombre pagano hacía dioses y después establecía rituales (cosas religiosas qué hacer), para tratar de apaciguar a sus dioses. Algunos de ellos incluso sacrificaban a sus niños a estos dioses de su propia creación. Aunque muchos pueden haber sido genuinamente redimidos por el Señor, siguen trayendo sus tendencias carnales de vergüenza a la vida de la iglesia; solo conocen un camino para relacionarse con Dios, y es a través de la religión. La gente inclinada hacia la religión ama la religión. No importa nada en absoluto que la gente escoja expresarse a sí mima religiosamente. La religión sigue siendo religión. Aman las atmósferas religiosas de la iglesia porque la iglesia les da algo qué hacer con el fin de salvar la culpa de la condenación. Muchos cristianos bien intencionados son inconscientes de que van a la iglesia y hacen cosas religiosas a partir de un falso sentido del deber. Asisten porque les hace sentirse bien. Quizá no hayan comprendido completamente que “ya no hay condenación para lo que están en Cristo Jesús, los que no caminan en la carne sino en el Espíritu.” Romanos 8:1. La religión es ajena a Dios. Él no demanda una cosa religiosa de nosotros. Hemos sido hechos seres espirituales por la presencia y poder de Su Espíritu Santo morando en nosotros. Su presencia y poder en nosotros nos hace ser y hacer lo que el Padre demanda de nosotros. No hay forma de ser justos sin que sea Su justicia obrando en nosotros. Por eso se llama gracia.” Porque por gracia sois salvos por medio de la fe; y eso no de vosotros, pues es don de Dios, no por obras, para que nadie se gloríe. Porque somos hechura suya, creados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios ordenó de antemano para que anduviésemos en ellas”: Efesios 2:8-10. La religión apesta en la nariz de Dios porque nos impide tener relaciones íntimas con Él. Nuestra relación es con nuestra religión o con nuestra iglesia. El hombre de la carne se engaña a si mismo pensando que si su religión le hace sentirse bien, debe ser buena; por tanto, sigue adelante haciendo sus cosas religiosas. Para el tal, la iglesia es con frecuencia la actividad religiosa que hace. Sin embargo, al final del día, después de que todo se haya dicho y hecho, nada hay diferente en él que antes de involucrarse en esta actividad religiosa. Está tan vacío por dentro como lo estaba antes. Una relación permanente con el Padre a través de Jesucristo es el único alimento que sacia el alma hasta la satisfacción plena. SISTEMAS RELIGOSOS -------------------------- Los sistemas religiosos que constituyen y gobiernan esa Cosa que llamamos iglesia caracterizan a la Babilonia espiritual. De la misma forma que Judá y Jerusalén estuvieron un día bajo cautiverio babilónico, así esta hoy el pueblo de Dios unido a la iglesia en su corazón. El ladrillo y el barro son las doctrinas sectarias, credos, tradiciones, festivales y celebraciones, liturgias, rituales, conferencias, políticas, herencias y calendarios eclesiásticos. Estas cosas permanecen sustituyendo a una relación dinámica, viva, personal con Dios, o junto con ella. Estas cosas que gobiernan la iglesia tienen poco que ver con el Reino de Dios. La mayoría de nosotros hemos nacido y crecido en la Babilonia espiritual, y nunca hemos conocido otra cosa. No hemos visto lo que el cuerpo de Cristo es, como una novia pura y santa. Aunque sabemos que no todo está bien dentro de lo que llamamos la iglesia, pensamos que puede arreglarse, o por lo menos, mejorarse, pero no es posible. LA ABOMINACIÓN DESOLADORA ------------------------------------- La mente carnal rebelde-inmersa en el engaño, el orgullo, la exaltación del Yo, confusión, imaginaciones, balbuceos, la acumulación de conocimiento, sectarismo, religión y sus sistemas religiosos-está en la iglesia como lo está en el mundo. La abominación desoladora del lugar santo del Templo de Dios, del que somos nosotros, como creyentes, es el gobierno de la mente carnal por encima de la obediencia a Dios. Jesús habló sobre esto. Mientras describía las señales del fin a sus discípulos, mencionó la abominación desoladora que había sido predicha por el profeta Daniel. Les dijo que cuando viesen la abominación desoladora en medio del lugar Santo, habían de tomar varios pasos. (lee Mateo 24:15, Marcos 13:14). La abominación desoladora es descrita por Daniel para el futuro. Daniel 12:9-11. Daniel recibió la revelación de que una persona vil se levantaría, reuniría las fuerzas, profanaría la fortaleza del santuario, quitaría los sacrificios diarios, y pondría ahí mismo la abominación desoladora. Daniel 11:21-31. Algunos piensan que la profecía de Daniel se cumplió alrededor del 165 AC., cuando Antíoco IV (Epífanes), gobernador griego de Siria, hizo lo impensable. Sacrificó a un cerdo inmundo sobre el altar santo del Templo Judío. Otros creen que se cumplió cuando los Romanos destruyeron el Templo, alrededor del año 70 DC. Otros también sugieren que se cumplirá cuando el “el hombre de pecado” tome el Templo y obligue a la gente a inclinarse ante él, haciéndose a sí mismo igual a Dios.{11} Todas estas sugerencias apuntan hacia hechos naturales, históricos. Quizá fue o será uno de ellos. Quizá tenga un cumplimiento múltiple que incluya todos ellos. Sin embargo, consideremos que lo qué es expresado generalmente en lo natural, se cumple también en el ámbito espiritual. Los escritores del Nuevo Testamento explicaron que lo espiritual no es primero, sino lo natural. Después viene lo espiritual, que sigue a lo natural. 1ª Corintios 15:46; Hebreos 9:11. Jesús estableció el acontecimiento de la abominación desoladora en el futuro, incluso como una señal del fin de los tiempos. Los escritos de Pablo concuerdan que sería para un tiempo futuro después de él. 2ª Tesalonicenses 2:3-4. Mateo indicó que el lector necesitaría entendimiento. Mateo 24:15. Considera que el cuerpo de Cristo es el Israel espiritual, y el templo del Espíritu Santo. Por lo tanto, ¿Donde tendría lugar la abominación que asola al Lugar Santo? Tendría lugar en las mentes y espíritus de los miembros del cuerpo de Cristo. Ya hemos comprobado en las Escrituras que es posible que los creyentes sean engañados. La abominación ocurre cuando la mente carnal recibe preeminencia sobre la Palabra de Dios y la mente de Cristo. Cuando permitimos que esto suceda, el lugar santo de nuestros espíritus queda asolado. Cuando nos inclinamos antes esos sistemas idolátricos de las tradiciones de los hombres como incorporados en nuestras iglesias, dejamos entrar a la abominación al lugar santo que es nuestro espíritu. Nuestras idolatrías profanan el templo del Espíritu Santo. La mente carnal gobierna. LA CAIDA DE BABILONIA ---------------------------- Esta iglesia Babilónica caerá como cayó la Babilonia histórica. La Babilonia histórica fue usada por Dios para juzgar a Judá por sus idolatrías. Isaías 10:5-6. Daniel describió el juicio de Judá en Babilonia como un tiempo de indignación (ira). Daniel 11:36. Cuando el período de 70 años de la indignación de Dios se cumpliera, Dios traería su juicio contra Babilonia. Jeremías 25:12. Dios profetizó a Babilonia a través de Isaías diciendo: “Me enojé contra mi pueblo, profané mi heredad y los entregué en tu mano; no les tuviste compasión”. Isaías 47:6 Dios ve el orgullo de Babilonia: “Oye, pues, ahora esto, mujer voluptuosa, tú que estás sentada confiadamente, tú qué dices en tu corazón: Yo soy, y fuera de mí no hay más; no quedaré viuda, ni conoceré orfandad.” Isaías 47:8. El predice lo que va a sucederle: “Y clamó con voz potente, diciendo: Ha caído, ha caído la gran Babilonia, y se ha hecho habitación de demonios y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda ave inmunda y aborrecible. Porque todas las naciones han bebido del furor de su fornicación; los reyes de la tierra han fornicado con ella, y los mercaderes de la tierra se han enriquecido de la potencia de sus deleites.” Apocalipsis 18:2-3 “Y oí otra voz del cielo, que decía, salid de ella, pueblo mío, para que no seáis partícipes de sus pecados, ni recibáis parte de sus plagas“ Apocalipsis 18:4. Esto habla de la persona en Apocalipsis 17:5 que había escrito sobre su frente el nombre: “MISTERIO, BABILONIA LA GRANDE, LA MADRE DE LAS RAMERAS Y DE LAS ABOMINACIONES DE LA TIERRA”. Salir de la Babilonia espiritual no es fácil. Estamos cómodos en ella. La iglesia institucionalizada nos hace sentir seguros, protegidos y autosuficientes. Nos da un status, posición, reputación, seguridad, identidad. Nos hemos institucionalizado con las instituciones de nuestra propia creación. Notas {9} Hislop, p.1 {10} Sinar era el territorio que más tarde fue conocido como Babilonia. Babel es el nombre Hebreo de Babilonia. {11} Nelson’s New Illustrated Bible Dictionary, s.v.
Posted on: Mon, 19 Aug 2013 08:49:48 +0000

Trending Topics



Recently Viewed Topics




© 2015