El amateurismo es una de las plagas de la actualidad. Afecta a todo, desde las artes -donde es más evidente- hasta la protesta social. Como dice mi amigo Santiago Bergantinhos el mundo se va a la mierda (no es una cita exacta, pero es el sentido). Y creo que en gran parte por esto. Con amateurismo no me refiero a que haya cada vez más amateurs. Amateur significa "amante" o "amador". Yo creo que es bueno que haya gente aficionada. Que la gente tenga afición por la pintura permite que los pintores nos podamos ganar la vida dignamente, por ejemplo. Tampoco me refiero a los casos de la gente que por ejemplo, como han pintado un cuadrito un domingo se piensan que están a la altura de Velázquez y hablan con condescendencia sobre pintura. Estos pobres diablos, a los que Stravinsky llamaba "pompiers" son el pan nuestro de cada día para el artista. Basta con llevarlo al absurdo en plan "yo puse una tirita un domingo, ya soy médico", para que se entienda el error. Yo me refiero a que se ha extendido la idea de "todo el mundo es artista" de Beuys, a la idea de que para que algo funcione bien basta con ponerle voluntad. La idea, pretenciosa, estúpida y francamente deprimente de que no es necesario volcarse en una profesión y ser autocrítico. Las cosas en plan "yo sieeeeento la pintura" y ¡zas", me pinto un pezón de color amarillo y ya soy artista. Que es verdad que hay que sentir el arte. Facilita mucho las cosas entrar en trance y notar los movimientos de la mano. Hay un montón de cosas propias del acto de pintar que harían las delicias de los newageros por lo que tienen de aparentemente místico y ancestral. Pero pintar bien no es solo eso. Hace falta, sobre todo, trabajar. Poner toda la carne en el asador, como suele decirse. Intentar superarse a uno mismo con cada pincelada, tener ese puntito de vocación que te hace dedicarle a lo tuyo más de lo necesario. Lo contrario, eso de "Guau, ahora siento el universo" y sacar un manchurrón amarillo como todo producto es un cachondeo. Evidentemente el que lo hace es porque se lo está pasando bien, y creyendo, y sintiendo cosas mu adentro. Pero el resultado final es que dejas al mundo igual que estaba, o si acaso algo más empobrecido culturalmente. Lo triste es esa idea -errónea completamente- de que la técnica no importa. De que es tan digno pintar La Balsa de la Medusa como firmar con un grafiti sobre los muros de la Catedral. Que no es necesario estudiar, romperse la cabeza, organizarse... Desgraciadamente, el amateurismo está invadiendo todo. En lugar de médicos, curanderos que hacen cursos de unos meses. En lugar de artistas, iluminados. En lugar de filosofía, cartelitos con citas espurias en Facebook. En lugar de organización para la lucha social, buenrollismo y sentadas sin cabeza visible. Que está bien, pero si no se organiza y canaliza la fuerza, no vale de nada. Todo es así. Los timadores y toda clase de advenedizos están de enhorabuena. Nos hemos relajado tanto que a los ojos del público un chamán vale igual que un neurocirujano. A mí me maravilla ver una escultura de Bernini, una partitura de Bach o uno de los dibujos de Durero. Tanto como leer cosas sobre el kernel de Linux o el Bosón de Higgs. Porque son cosas complejas. Maravillosamente complejas. Cosas que para ser posibles necesitaron inteligencia, dedicación y una pasión desmesurada. El amateurismo es conformarse con la propia mediocridad, obviando toda esa complejidad que hacen que la humanidad sea grande. Una de las pocas cosas en las que todavía puede encontrarse algo de seriedad es la ciencia pura y dura. La ciencia (la Física, por ejemplo) sigue abriendo caminos para la técnica y ahí no hay coña que valga. El motor de movimiento continuo puede parecer muy gracioso, encontraremos mil webs que hablan sobre sus variantes. Pero nadie lo fabrica, simplemente porque no funciona. En cambio la NASA ya está embarcada en la fabricación de un prototipo de motor de curvatura, el motor de las naves de Star Trek. Porque sus principios teóricos son sólidos y su construcción ya es plausible. En fin. Que el mundo se nos va a la mierda. Pero eso sí, todos felices porque, jo, nos expresamos.
Posted on: Thu, 10 Oct 2013 15:16:16 +0000
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